Isaías 41:8.

El mejor tipo de relación intima que Dios quiere tener con las iglesia es una relación de amistad donde tanto tu como Él puedan contarse los mas íntimos secretos.

Muchos creyentes se quedan en el nivel básico de relación don Dios; Dios por su parte desea no solamente que seamos hijos, que no solamente seamos siervos sino que también seamos amigos, Jesús en algún momento le dijo a sus discípulos “Ya no los voy a llamar siervos..”, Juan 15:15, pero lo condicionó a la obediencia, en Juan 15:14 el Señor dijo “Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando”; amarró la amistad a la obediencia, está escrito en Santiago 2:23 “… Abraham le creyó a Dios, y le fue contado por justicia, y fue llamado amigo de Dios” hasta tal punto que le contó grandes secretos, como el que está escrito en Génesis 18, Génesis 18:17-19. El Señor anhela un nivel más profundo e intimidad a través de la comunión diaria y a través de la comunicación.

El grave problema es que la iglesia de Jesucristo enfrenta unos de los problemas más grandes de la historia y está descrita en el libro de Santiago 4:4, allí nos llama adúlteros ya que muchos proclaman ser cristianos, pero realmente son parte de todo lo que el mundo es y comparten los valores del mundo, venden sus principios y sus valores, la palabra adúlteros” significa: “Alterar o eliminar la calidad y pureza de una cosa añadiéndole algo que le es ajeno o impropio, Alterar o falsear el sentido auténtico de una cosa o la verdad de un asunto”.

Hoy en día estamos sumergidos en prácticas del mundo en todas las áreas de nuestra vida: Espiritual, emocional, económica y física, estamos aceptando comportamientos corruptos con la cual estamos contaminando nuestra vida, hogar y descendencia.

Estos son  los dos lados de la moneda y tu y yo estamos en alguno de estos dos lados, con Dios es o no es, no hay términos medios, es blanco o es negro, es pecado o no lo es, eres enemigo o amigo de Dios… medio amigos no existe, pecados piadosos menos,  esta escrito en 1 Juan 2:15-17 “No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre”, hoy le hago una propuesta: “reconciliémonos con el Señor”:

Hoy es un buen día para volverse al Señor con todo el corazón, dar la espalda al mundo e ir al Padre y en la Biblia quedó registrada en La Parábola del Hijo Pródigo, en el Evangelio de Lucas es conocida por la mayoría de nosotros. Es la historia de un hijo que, lleno de orgullo deja a su padre y se va al mundo, llevando una vida desenfrenada despilfarrando todo lo que tiene valor. Hasta que es confrontado con el fracaso y ene su desesperación decide regresar a casa, arrepentido y deseoso de hacer cualquier cosa para ganar de nuevo el favor de su padre. 

Ninguna rebelión podía interponerse en el amor incondicional por su hijo. "Porque este mi hijo muerto era, y ha revivido; se había perdido, y es hallado" (Lucas 15:24).