Joel 2:25-27 “Y os restituiré los años que comió la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta, mi gran ejército que envié contra vosotros. Comeréis hasta saciaros, y alabaréis el nombre de Jehová vuestro Dios, el cual hizo maravillas con vosotros; y nunca jamás será mi pueblo avergonzado. Y conoceréis que en medio de Israel estoy yo, y que yo soy Jehová vuestro Dios, y no hay otro; y mi pueblo nunca jamás será avergonzado”.

Vamos a ver por que? es importante la restitución y nosotros no le hemos dado la importancia que se merece.

Dios quiere restaurar tu vida con el fin de restituir tus sueños, tu propósito y tu destino y aquellas cosas que fueron quitadas de tu vida por diferentes motivos.

En la Palabra aprendemos tres fundamentos del evangelio del Reino de los Cielos:

En el libro de Lucas 15 vemos que se pierde una oveja, se pierde una moneda y se pierde un hijo y en las tres situaciones Dios restituyó:

Quizá has perdido tu salud, tu familia, tu economía, tu dignidad, tu libertad pero Dios está dispuesto a restituir todo lo que se ha perdido porque Dios es el Dios de la Restitución, hay cosas que tu pensaste que nunca mas las ibas a volver a recibir, prepárate porque Dios te lo va a traer otra vez, para Dios no hay nada imposible y el tiempo que se perdió regresa, lo que se murió resucita y lo que se fue Él lo vuelve a traer porque está escrito en Joel 2:26 "Comeréis hasta saciaros, y alabaréis el nombre de Jehová vuestro Dios, el cual hizo maravillas con vosotros; y nunca jamás será mi pueblo avergonzado”, Dios quiere mostrar en este tiempo Su poder a través de lo que tu pensaste que estaba perdido: Mostrar y dar testimonio de que Él todo lo puede.

Otra de las características de la restitución se encuentra en Génesis 40:9-13 “Entonces el jefe de los coperos contó su sueño a José, y le dijo: Yo soñaba que veía una vid delante de mí, y en la vid tres sarmientos; y ella como que brotaba, y arrojaba su flor, viniendo a madurar sus racimos de uvas. Y que la copa de Faraón estaba en mi mano, y tomaba yo las uvas y las exprimía en la copa de Faraón, y daba yo la copa en mano de Faraón.Y le dijo José: Esta es su interpretación: los tres sarmientos son tres días. Al cabo de tres días levantará Faraón tu cabeza, y te restituirá a tu puesto, y darás la copa a Faraón en su mano, como solías hacerlo cuando eras su copero”, la restitución toma tiempo, pero llega el momento, el de repente, cuando nadie lo entendió Faraón ordenó que sacaran al copero de la cárcel y fuese restituido. En cualquier momento vienen tus tres días de victoria ya que hasta el diablo tiene que obedecer cuando Dios da la orden de restituir: tu enfermedad tiene el tiempo contado, tu ruina y escasez tiene el tiempo contado, tu situación jurídica y la injusticia tiene el tiempo contado.

Todo esto se llama misericordia por tal razón la Biblia dice que las misericordias de Dios son nuevas cada mañana, debemos entender que el copero no tuvo que hacer nada porque el restituidor es Dios, Dios hace algo grande porque Él es Dios y no por lo que tu eres o digas o hagas.

Este principio se muestra en toda la Biblia, la sunamita en un instante le fue devuelto todo; José después de haber perdido todo, Dios le restituye su familia, su libertad y su propósito; Moisés después de haber perdido su posición, 40 años después Dios le restituye su posición de Patriarca; Sansón después de haber estado con una Dalila tóxica, una mujer que usaba la sexualidad para obtener lo que quería, a pesar que lo que ella quería estaba en contra de los designios de Dios, Dalila la narcisista, Dios le restituyó todo lo que perdió, Jefté hijo de una ramera, le persiguieron, sus hermanos le robaron todo, le quitaron su herencia y cuando el estaba lejos lo buscaron como el caudillo de Israel porque Dios no iba a permitir que lo que le pertenecía se lo robara el enemigo.

No hay nada que el diablo se robe que Dios no pueda restituir…

Ministración: Colócate en pie y toma esta palabra y guarda en tu corazón, nunca tomes todo por perdido, no importa cuanto se tarde, Dios es un Dios que restituye; Confía en Dios porque siempre Dios va a restituir lo que no tienes:

Levítico 25:39-40 “Y cuando tu hermano empobreciere, estando contigo, y se vendiere a ti, no le harás servir como esclavo. Como criado, como extranjero estará contigo; hasta el año del jubileo te servirá”. 

Todo lo que has perdido por cualquier motivo, no importa cual, en un abrir y cerrar de ojos podemos perderlo todo: salud, economía, dignidad, familia, honra, libertad, e incluso muchos han perdido la fe, muchos han perdido su relación con Dios e incluso sus ganas de vivir, muchos están de luto pero Dios siempre ha estado desde la primera oración de arrepentimiento y de clamor que hiciste, la Palabra dice que vivirá con lo que ha perdido HASTA, hay un límite, en el libro de Levítico 25:41 “Entonces saldrá libre de tu casa; él y sus hijos consigo, y volverá a su familia, y a la posesión de sus padres se restituirá”, saldrá libre… cuantos dicen amen, de un fuerte aplauso al Señor, da un grito de júbilo y que suene la trompeta…

Tu puedes estar ahora mismo en una situación de enfermedad, dolor, ruina, escasez, división familiar, en prisión, pero Dios dice “HAY UN HASTA AQUÍ”, Dios te va a restituir todo lo que el enemigo te robó