Subscribe
Share
Share
Embed
La relación de Martín Chirino con el hierro comenzó muy temprano, en su infancia. Cuando este escultor canario era niño, solía deambular por los astilleros que su padre dirigía en las Islas Canarias, para ver cómo se cubrían los grandes barcos en metal. Aquel espectáculo de materia germinó en el niño, y sus obras terminaron exponiéndose en todo el mundo. En este capítulo, nos habla de su infancia y su incursión en el arte internacional.
Escucha los mejores fragmentos de las conversaciones con grandes artistas celebradas en el auditorio de la Fundación Juan March.