A partir de los datos de más de 500
estrellas jóvenes observadas con el
Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA), los científicos descubrieron un vínculo directo entre las estructuras de los
discos protoplanetarios (los discos que rodean a las estrellas y donde se forman
planetas nuevos) y las características demográficas de los planetas que allí nacen. El estudio demuestra que las estrellas más masivas son más propensas a estar rodeadas de discos con surcos y que dichos surcos están directamente correlacionados con la presencia de una mayor cantidad de
exoplanetas gigantes. Estos resultados proporcionan a los científicos una vista hacia el pasado, que les permite predecir el aspecto de los sistemas exoplanetarios en las distintas etapas de su formación.