Si se queda dormido escuchando La Venganza Será Terrible por la radio, ahora también podrá quedarse dormido escuchándolo a cualquier hora en formato podcast.
En lavenganzaseraterrible.com puede encontrar los episodios, etc.
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La venganza será terrible. Buenas noches. Nosotros somos la venganza, será terrible. Se trata de un programa de radio que se transmite muchas veces por AM 750, que es una radio. Pero a partir de hoy vamos a estar todos los lunes en Blender. Ya estamos, ya estamos. Voy a presentar a mis compañeros, en primer lugar... Patricio Barton, mis compañeros están en este momento recorriendo. Muchas gracias, muchas gracias. No puedo aplaudir. Necesitaba esto. Patricio Bartó. Hola amigos, buenas noches. Es por acá. Y el señor lo va a presentar aquí. Sí, Gillespi. El señor Gillespi. Muchas gracias. También está aquí. No me ayuden más, por favor. Bien. En primer término... vamos a anunciar nuestras siguientes hazañas. Bueno, la primera hazaña es estar aquí. Es estar aquí. Es estar aquí, porque esto es el streaming, tiene algunas novedades para lo que la rutina nuestra de La Venganza será terrible. Sí, reglas propias del formato. ¿No es lo mismo que lo que hacemos en el teatro? Esto. Para mí no. O que lo que se hace en la radio. Para mí no. Es otra cosa. Es una especie de televisión. cámaras, luces, gente del otro lado. Bien. Pero de todas maneras eso no es en variedad que también seguimos haciéndola radio y los teatros y todo lo que ya sabemos hasta aquí. Ahora, como somos nuevos, tenemos que presentarnos de alguna manera. Sí, yo intentaba hacerlo. Pero si usted quiere vamos directamente a algún tema conceptual, ya que... Pero, ¿por qué no lo hace ahora el...? Bueno, vamos directamente al primer tema que tenemos. Sí. No es así en general el programa, pero hoy es así. Hemos recibido muchas cartas antes de votar aquí de gente que naufraga. Bueno, es algo que ocurre casi siempre. han llegado las cartas y nosotros ahora vamos a tratar de aconsejarlas. Pero en realidad no es eso este programa. ¿En qué consiste este programa? Este programa o este trémen o este paso por Blender, consiste en estar al acecho de las ideas. No pasa muy seguido, vamos a informar ya. como una flecha luminosa una vez cada tantas noches pasa una idea. Y lo que se pide a los oyentes o a los televidentes o a los que se acercan es un poco de paciencia. Paciencia para esperar el momento en que esa flecha luminosa atraviese la noche cerrada. Es también la paciencia nuestra de recorrer los pasillos habitualmente desiertos de nuestras mentes para ver si a la vuelta de algún corredor aparece una ocurrencia, aparece algo. Y entonces, en realidad, cuando le estamos aconsejando cómo comportarse durante un naufragio, lo que estamos haciendo es buscar, buscar en el interior de nosotros algo divertido, algo emocionante. algo que vaya en contra de todo esto. Así que, vamos a ver qué pasa. Tenemos aquí un informe hecho por náufragos del Titanic. Creo que no se salvó casi nadie. Muy pocos. Y son consejos ante un naufragio cómo sobrevivir en Algamar. Es un servicio, digámoslo. Es un servicio. Muy bien. Vamos a ver. ¿Qué dice aquí? En situaciones extremas como un naufrago en alta mar... Es esencial contar con conocimientos básicos de supervivencia que marcan la diferencia entre la vida y la muerte. El capitán llama y separa a los que tienen algún conocimiento de supervivencia de aquellos que no lo tienen. Bueno, los primeros sobrevivirán y los segundos no. No, bueno, pero mi margen no. Creo que eso es lo que acabo de entender. No, señor, pero mi margen está clarísimo. Hay un protocolo de seguridad. El capitán, cuando los pasajeros suben al barco, es aprender lo básico de supervivencia porque a partir de ese momento empiezan a navegar al tamar y ya tiene que saber qué pasa cuando suena la cine. Pero imagínese si yo voy de luna de miel, puede suceder. Y sí, la verdad que sería un milagro. De luna de miel a un crucero. Y lo primero que me encuentro... No es una buena idea, desde ya le digo. ¿Qué cosa? ¿La luna de miel? Ninguna de las dos cosas, ni la luna de miel ni el crucero. y la suma de estas dos calamidades puede precipitarlo a usted a arrojarse del buque aún sin naufragio. Sí, pero dígame, pero si yo llego con... ¿Sabes qué proporción de personas que están de luna de miel y van a un crucero se arrojan por la borda? Cuánto, no sé. Calculo un 40% de los... No, no, pero no se trata de calcular a la marcha. ¿Pero con naufragio o se tiran directas? No, se tiran porque no soportan ni la luna de miel... Ni el crucero, ni en realidad nada de lo que pertenece a esta vida. No, pero a mí lo que me inquieta un poco es subir al barco en la luna de miel y que lo primero que tenga para decirme es que vamos a hacer un simulacro por si hay un ofragio. No predispone bien eso. Bueno, el simulacro es indispensable. Hace algunos días hablábamos de simulacros. Algunos de ellos son tan realistas... que son más peligrosos y más mortales que los verdaderos náufragios. Sí, señor. Pero vamos a ver qué dice aquí. Desde luego, el primer consejo cuál es. Manténgale la calma. Mantengan la calma. Todo eso que ya sabemos. ¿Qué gano? Es imposible mantener la calma. Es imposible y además me parece contraproducente. ¿Por qué dicen? Porque al tipo le dicen, por favor, suban a los botes salvavidas rápidamente, y el tipo mantiene una calma estoica. Sí, bajo la mano en los bolsillos. Mantiene la más absoluta inacción e imperturbabilidad epicúrea, que no es lo más aconsejable para sobrevivir. en estos casos. Suban ustedes, yo tengo tiempo. Suban, suban, no hay problema. Yo estoy buscándome a mí mismo. Sí, vayan, vayan. Ustedes hagan lo que quieran. ¿Ahora puedo decir algo? Por favor. Si el ser humano se diera cuenta de cosas tan básicas como esta, que voy a decir, un bebé, esto lo vi en un documental. Ah, bueno, si lo vi en un documental debe ser así. Un bebé, usted lo tira, un bebé recien nacido lo tira al agua, una pileta, y el bebé nada. Nada, no hay ni sequía. No, nada, nada instintivamente. Si el ser humano se concientizara de que puede nadar, no grandes distancias, pero... Hay gente que parece que no sabe. ¿Usted quiere decir que uno nace sabiendo nadar? Después se olvida. Y después lo olvida. Pero ¿a qué edad olvida un niño? que sabía nadar. Yo creo que en la etapa de escolarización. No, todo para hablar en contra de la escuela. En la universidad probablemente. No, señor. Con tantos conocimientos que a uno le impactan. Claro, va perdiendo... Va perdiendo los que ya tenía. Y un día, ya un jovencito de 16 años, cree que sabe nadar. No, pero es que no es así. Olvidando su paso por la universidad y sus consecuencias se arrojé y se ahoga. Ahora, entonces estamos en condiciones de afirmar que el conocimiento... un conocimiento nuevo, de expulsar al otro. Está prácticamente demostrado. Está estable de conocimiento. Usted tiene la calavera suya. Es extensible, ¿no? Bueno, no, pero las diez cosas... Hay una cantidad de ideas que van a entrar en esa cabeza y hasta un punto. Después, para entrar una nueva idea, tiene que expulsar a una vieja. Pero no será que esta conversación acerca de la posibilidad de conocer... excede un poco el ámbito de salvarse en un naufragio? Sí, probablemente. Acá lo que dice es que hay que tener un lápiz y un papel. Es del naufragio. No le subo un barco sin mi lápiz y mi papel. Y hacer una lista de objetos útiles para naufragar. Acá no dice cuáles son. La lista la hace antes. la va haciendo. La va haciendo dice usted porque... No lo sé. Para mí... La primera cosa es un chaleco salvavidas. Y sí, es fundamental. Bueno, eso quiero decirles, buenas noches, que por supuesto estamos dispuestos a proveerles... Usted es de la tripulación. Sí, soy el... Por eso está vestido de blanco. Claro. Ahí va. Ahí está la bocina. Soy como el metro de la navegación. Bueno. ¿Cómo se llama el METR de un crucero? No existe tal cosa. Claro, bueno. Llega el tipo y entonces les digo, miren, cada uno de ustedes va a disponer de un chaleco salvavida. Bueno, fantástico. Esperemos que no lo tengan que usar. Entonces, en el caso de un naufragio, cada uno de nosotros tenemos nuestro chaleco puesto. vamos a flotar pase lo que pase ahora el perdón, el chaleco lo tengo que llevar en todo momento no solamente después que se haya producido el naufragio imagínese que si usted viene de luna de miel va a estar con el chaleco, yo que son como muy inflados si bueno, pero imagínese que naufragamos si y yo recién cuando estoy en el medio del mar con el agua hasta aquí me doy cuenta de que no me he puesto el chaleco ah bueno, bueno también que por otra parte se ha ido a pique junto con el titán no porque fue Puede ir a pique o un chaleco salvavida. Flota. Pero el Titanic sí. Bueno, en ese caso sí, el Titanic sí. Bueno, acá dice, este dispositivo. ¿Cuál? El chaleco, este. Te mantendrá flote, no sé si es el chaleco salvavida, y aumentará tus posibilidades de ser localizado y rescatado. Imagina que estás en el agua y sientes fatiga. Bueno, eso pasa. Imaginémoslo. El chaleco salvavidas te permitirá descansar sin hundirte. Claro. Usted se queda bien. No es para no ahogarse, es para no cansar. Bueno, sí. Chaleco salvavidas. Después hay que buscar un refugio flotante. Si te encuentras en el agua, o joven náfrago que sintoniza este programa, busca un pedazo grande. de madera flotante. Bueno, pero escúcheme, no hay pedazos grandes de madera flotantes en todas las partes del océano. Busque la puerta de algún baño, por ejemplo. ¿Son todas de hierro las puertas de los cruceros? No me digas. Pero perdón, si el barco se hundió, pensemos lógicamente, si el barco se hunde, todo lo que es camas, roperos... Hay roperos en los... Todas cosas de madera empiezan a flotar y bueno, puede ser eso, puede ser pedazos de tergopor, que también hay. También hay pedazos de tergopor, pero debe haber algunos. Dice, por muy caliente que te sientas, creo que ha cambiado el informe. No, señor, es lo mismo. La piel del cuerpo baja de temperatura en alta mar. y las consecuencias pueden ser trágicas. Eso es lo peor. ¿Cuánto cree que usted puede aguantar si el barco se hunde frente a Terra Nova? Y, bueno... ¿Donde el agua... qué tendrá? ¿2 grados, 1 grado? No, si entra usted... 30 segundos. En hipotermia... No, un poco más. Igual, ¿qué importa? Si son 30 segundos, 5 minutos, ¿usted le hace la diferencia? No, no. Sin embargo, debiera decir que sí. No, pero espérenme, no, te dijo que no. No, no. ¿Por qué le digo que sí? No, no, ¿por qué le digo que sí? Porque en esos cinco minutos viene una lancha de rescate, prefectura, y usted renunció antes y dijo yo me entrego, no voy a hacer nada, tengo frío y todas esas cosas que uno dice antes de morir. Dice... Lleva agua potable. Exacto, porque uno ve todo el océano alrededor del mar, pero no puede beber esa agua, porque primero le da diarrea, y después un montón de otras cosas. Se muere. Se muere, en última instancia se muere. ¿Qué es lo primero? Primero diarrea, después al final se da... Sería un milagro. Por eso agua potable. Sin embargo, hay mucha gente que tentada, por la proximidad del agua, su ruido invitante, la sed que lo abraza, se toma el agua al mar. A mí me dijeron, no sé si será cierto, yo tengo amigos médicos que siempre hablan conmigo de estas cosas, y me dijeron que el que toma el agua del mar se vuelve loco primero. Antes incluso que la diarrea, antes mencionada, sobreviene está, se muere. Bueno, me parece raro. Creo que es de la misma escuela de la sandía y el vino y todas esas cosas. Igual le puedo decir una cosa, en los últimos años, parece mentira lo que voy a decir. Inclusive por ahí se ha. No es mentira, es verdad y muchos de los oyentes que están poniendo el chat van a decir que es verdad. Se recomienda un vasito muy pequeño de agua de mar. ¿Se recomienda qué? ¿En qué momento? ¿Se recomienda para qué? ¿En un ofrejo o para digerir más rápidamente? En la vida diaria. Usted dice que si ahora le traen un vaso de agua de Villagesel, ¿usted se la toma? Bueno, precisamente ha llegado hasta nosotros un vaso de agua enviado por la municipalidad de Villagesel. Pero con atención. A cuyo Intendente agradecemos muchísimo esta gentileza. La voy a tomar. Cuidado. Apenas un sorbo. Bueno, apenas un sorbo. Está recomendado. Y veremos si ya se siente mejor. Tenía mucha razón. Ya se empieza a sentir mejor. Sí, sí. Bueno, vamos a esperar cómo evoluciona en los próximos minutos. Acá, este, pasa lo siguiente. Yo he visto muchas películas en que se revela que es insuficiente la cantidad de botes a las vidas. Ah. No, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no Entonces, en un naufraje lo primero que hay que hacer es tratar de ganar el buque salvaje. Está bien, pero es desesperante. Tienen que calcular la cantidad de botes de acuerdo a los que van. Bueno, lo han hecho mal. Pero entonces es... Lo mejor es entonces instalarse, ni bien empieza el crucero, al lado del buque salvaje. No, no, pero no es tan fácil. Quedarse allí y bueno, en caso de un naufraje usted ya está al lado. No, no, porque el que manda es el capitán. El capitán le dice... Atención, atención. Al capitán. Estamos teniendo un problema en el fuselaje. No, no es fuselaje. Esperamos resolverlo de un momento a otro, pero bueno, lo cierto es que impactó un objeto, creemos que una piedra. Una piedra, una piedra. Y además para un crucero que es una piedra. No, no, es una roca gigante, nos llevamos por delante una roca. Así que les pedimos que mantengan la calma. Y en el caso de usar los botes salvavidas, ¿Cómo botes salvavidas? Va a haber un protocolo. Primero mujeres, segundo ancianas, tercero niños. ¡Ey! ¿Cuál no me toca? No, sí, sí. Ya le tocó. Además, la anciana cuenta como mujer. ¿Por qué dice mujer? Primero mujeres, segundo ancianas, tercero niños. Tenga cuidado. Tenga cuidado en ese caso, porque... hay pasajeros que no son ancianas y viendo esa prioridad que tienen las viejas se disfrazan. Son jóvenes atléticos y se disfrazan de ancianas y van caminando hacia el bote diciendo manzanas, manzanas, son una viejita que vende manzanas, desconfié capitán. Después, en la medida que quede el bote salva vidas. van a ser utilizados primero por tripulación, segundo personal... ¿Cómo tripulación? La tripulación no es lo último que... Dicen que... Segundo personal contratado, tercerizado. Sí. Terceros pasajeros. Pero es los pasajeros que somos los últimos. No, bueno. Hay diferencia entre los pasajeros de tercera, de segunda, de pinotea, de primera... pasajeros de primera clase van a tener además el servicio de lunch mientras esperan el botel salvavida. Claro, hay una serie de servicios me imagino. Ahora, ¿qué señales puedo hacer doctor? Antes que nada, gracias por venir a este programa. Buenas noches. En esta primera emisión por Blender. Me dijeron que es muy prestigioso. Es muy prestigioso el canal y la verdad que muchas gracias. ¿Qué señales puede hacer uno para indicar su presencia en medio del océano? ¿Qué es mejor? ¿El grito? No. ¿Un estampido? Bueno, en general estamos recomendando bengalas. ¡Bengalas! La clásica bengala del náufrago. Sí, sí, sí. Es como revolver. Bueno, bueno, bueno. Y porque en medio de la freja algunos se hacen locos. y entonces uno hay pela, no se luce en ese momento. No, no es por eso, pero sí, cuidado porque está el ansioso que prende la bengala, apenas naufraga. Sí. Y no tiene sentido ahí, porque quién lo va a ver. Tiene que esperar un rato. Lo importante es que... ¿Cómo apenas? Pero si me hundo, después no prende la bengala. Ah, bueno, no sé. Y se moja. Se me mojó la bengala. No, tiene que tratar que no se le moje. Lo importante para mí es aprovechar cuando pasa en la ruta aérea, cuando usted está en el mar, los aviones que pasan con pasajeros, bueno, algo con un espejo, una luz... Que de noche, que es de noche, ¿qué espejo? ¿Se ve el avión? Bueno, que el piloto vea que ahí abajo hay un bote... Pero, ¿sabe qué pasa? Hay una cierta rivalidad entre las líneas aéreas y las líneas... No, bueno, pero... Entonces... Los pilotos se hacen los giles. No, pero esto es una cosa. Hacen como que miran para otro lado. No, es una razón humanitaria, por favor. Cuando llegan a destino en el aeropuerto, avisan a las autoridades que manden un bote. Claro. Esto no es recíproco. Es decir, cuando el que tiene problemas es el avión, sí, sí. y el avión hace señas con espejos o algo, no. el barco, al llegar a puerto tres días después, sí, sí. no envías un socorro para el avión. No, bueno, pero... Es mucho más rápido el desenlaco. Pero si usted ve un avión que cae, vamos a decirlo así... ¿Y qué hace? Tiene que dar aviso. Porque vieron que los aviones... Los asientos son salvavidas. No me digas. Va, son salvavidas, son asientos que flotan. Sí, igual que no es un barco, es un avión. Bueno, claro. Si esto fuera un barco, dice uno, mientras el avión cae, estaríamos salvados. No, pero cuidado, porque la persona que cae del avión la encuentra en el mar. Usted está en el crucero. ¿La dejan subir al crucero? Por supuesto que sí. Aunque no haya suficientes camarotes. Yo creo que sí. Frena el capitán y para el barco y que suban todos los que están allá abajo. Ahora bien, ¿por qué no vamos a la lista de elementos útiles para tener en una franja? Bueno, ningún problema. Primero, algo de comer. Sí, sí, vívere, Dijote. Ví-ver-é-re. Yo recomiendo alimentos no perecederos en lata, por ejemplo, arveja, garbazo. ¿Cómo abrir la lata? ¿Cómo abre la lata? Por eso el revólver también. Bueno, ¿por qué? Uy, ustedes no saben, la lata de arveja la tiene ahí, no la puede abrir, le mete cuatro o cinco tiros. Sí, bueno, es una demasía, pero podría ser. Yo creo que hay de esas latas que usted mete el dedo y arranca como una llave. Sí, que tiene como un anillo. Claro. Y le abre sola. Igual también... Ojo que uno está en el mar y en el mar hay millones de alimentos, kilos de alimentos, toneladas. ¿Dónde están? Están nadando abajo suyo. Ah, bueno, sí, bueno, pero lo tiene que pescar. Ahora, pero yo al pescado no se lo toco. ¿Y cómo? Bueno, ahí lo va a tener que comer. Aquí dice, utiliza algas marinas como fuente de energía renovable. En otro orden de cosas. Algunas algas marinas son comestibles y ricas. Sí, bueno, ricas en nutrientes. Si encuentras algo flotando, utiliza como fuentes de alimentos. Yo recuerdo que hace muchos años empezó, ahora ya no hay más, una exportación de bolas de fraile argentinas al Japón. Sí, señor. Y vino un barco japonés. No puede ser japonés, eso no es esto. Así se llaman los barcos japonés. A buscar las bolas de Fraggle. Millones de bolas de Fraggle. Ah, millones. Y naufragó. Bueno, pues le puedo decir una cosa. Flotan. Exactamente. Así se salvaron casi todos los tripulantes. Empezaron a flotar las bolas de Fraggle. Incluso algunos churros que habían llevado. Y se agarraron cada marinero. de una o dos bolas de fraile y sobrevivieron hasta que una lancha... Pero eran bolas grandes porque para... Las bolas de fraile tienen su tamaño. Sí, para soportar un cuerpo humano. Ellos no sabían lo que eran las bolas de fraile. ¿Y para qué lo compraron los japoneses? Porque creyeron que con ellas podían disolver manifestaciones contrarias a su gobierno. ¿De qué manera? Dándole una bolita... Porque creyeron que dentro había un explosivo o algo. Tiene forma de... Para disolver manifestaciones. que se las vendió les dijo eso y vio cómo son los japoneses se creen todos y no como los argentinos tenemos esa lucidez como para no creer nada esa especie de astucia que pero escuché ya la primera a la primera manifestación empezaron a tirar la buena la llevaron al fútbol Y bueno, hubo inconvenientes en una tribuna, que empezaron a arrojar bolas de fraile, que no surgieron ningún efecto. ¡Y no valen! Se las comían. Ningún efecto. Bueno, y ahí, bueno, no fracasó la exportación. Fracasó aquel intercambio. Primero por el lafragio, después cuando mandaron el segundo buque, por la ineficacia de la bola de fraile en la disolución de manifestaciones, que es proverbial. Sí, por supuesto. Acá lo sabíamos. Pero ellos no. Bueno, ¿y por qué lo hace así, como con aire de canchero y suficiencia? Porque siento ese orgullo de ser argentino y tener una idea exacta de lo que es una bola de fraile. No como ocurre en algunos otros países. Bueno, señor, la bola de fraile, sin embargo, creo que es portuguesa. Es portuguesa, sí, es de Belén. Sí, es una confistura de Portugal. Los frailes de Belén las hicieron por primera vez. Acá dice que... es muy útil en un anunfragio, ya en la exportación de bolas de fraile al Japón, emitir sonidos de alta frecuencia para traer delfinas. ¿Por qué? ¿Por qué? Esa es la pregunta. No sé, acá dice. Los delfines pueden ayudarte a encontrar la salida. ¿Qué salida? Bueno, me imagino que usted, vamos a decirlo así, se monta a un delfín. Sí señor. ¿Qué? ¿No, no? Está muy bien. Ah, no, no. Está bueno. Usted se monta un delfín. Lo agarra de la areta. El delfín, vamos a decirlo, es de lo nuestro. Es... es un sentido. es un cetáceo, no es un pez. O sea, va a tener que salir a respirar como usted, como usted, como su hermana o como cualquier otro. La ve y sigue la voz antes de hablar de mi hermana. Tiene que ver mi hermana porque la trae a colación. Va a ir en un primer programa que la gente no nos conoce del todo y puede formarse una opinión errónea de la moralidad de mi hermana. Bueno, se monta el delfín, no la voy a mencionar, cualquier humano, y el delfín se mete al agua pero sale. Usted respira ahí, se vuelve a meter y sale. El delfín siempre quiso ser amigo del hombre y el hombre no se dio cuenta. El delfín en cualquier lado que hay mar, Puerto Madri... Sí, no hay delfines en Puerto Madri. Ese es el problema. Claro, porque ese... Pero en cualquier lado que hay mar, usted se mete en el agua y sale la cabeza de un delfín. Lo primero que hace es se ríe. Es ayudar, ayudar. El delfín lo ayuda, si uno le cuenta lo que le está pasando, el delfín te escucha. Bueno. Escucha o a uno le parece que lo escucha, ¿no? No creo que nadie escucha a uno, sino que a uno le parece que lo están escuchando. ¿Qué? No, el delfín igual vio que tiene siempre como una sonrisa, nació así. Sí, pero es así. Es un rictus de... No, no, sí es un rictus, no acaso. No, no. Es malo el delfín en verdad. Es bueno. Primero mírele la dentadura, mírele a un tiburón que tiene más de 50 dientes. El tiburón sí es malo. Bueno. Tiene cara de malo. O sea, tenga cuidado de no confundir un delfín. con un tiburón, se empieza a montar un tiburón, y el tiburón no lo va a tomar. No, le pega un tarascón y le hace la primera de cambio. Ahora, ¿el delfín no se lo puede comer también a usted? No, ¿no vio los dientes que tiene el delfín? Parecen arroces. Yo creo que sí que se lo puede comer. No es vegetariano, entonces, ¿a qué quedamos? No come plantas. El año pasado murieron alrededor de 10.000 norteamericanos Esto es verdad? Esto es verdad, si... No, no lo sé. Bueno, bueno, pero... Un dato que me pasa el doctor Karajanciano. No, pero es importante que sea cierto porque tenemos una responsabilidad... Igual, una favor del delfín. ¿Usted se está ahogando, desesperado, pidiendo auxilio? ¿Lo ve un delfín? ¿Sabe lo que hace? ¿Qué? Lo salva. ¿Por qué lo salva? ¿Cómo sabe que usted está en peligro? Porque es el instinto del delfín. Lo salva. ¿Hay algunas playas? en Mar del Plata que no te puede meter al agua porque el delfín se saca. No, hijo. Y la gente se viene a nadar un rato, ¡fua! viene el delfín y lo arroja a la avenida de Costa Rica. No, bueno, no, pero así no se puede veranear prácticamente. No, bueno. Por eso es que ya no va nadie a Mar del Plata. Pero sí va un montón de gente a Mar del Plata. Por culpa de los delfines. No hay delfines tampoco en Mar del Plata. Digo que son las... Las toninas son como las del barco. ¿Qué pasó? Atención a hablar capitán, estamos en este momento reparando la avería, munidos de metal, soldadora... Bueno, bueno, sí, pero apúrense porque tenemos todos el chaleco. No, no, las posibilidades... El barco está hasta la mitad lleno de agua, pero la mitad de arriba, es decir, de cubierta para arriba, no hay prácticamente agua. Pero capitán, acaban de sonar las cuatro sirenas... del Apocalipsio. No, no, es que claro, tres sirenas es precaución, cuatro sirenas es peligro. ¿Y cinco? Cinco sirenas, hundimiento inminente. Una, eso no una. No, no, pero esa es la quinta. Ah, ah. Pero ¿desde dónde se cuenta? ¿Desde antes? O vuelve a ser uno. Dos. ¿Es lo que? Dos. Es la séptima sirena. No, señor, tiene que arrancar todas juntas. Esa es la octava. Tercera para mí, soy el capitán. Un divento eminente. No, están tomándonos el pelo, señor. Están sonando todas las sirenas todo el tiempo. Una cosa que está prohibida en los cruceros es tocar la sirena en vano. Más vale, porque todo el mundo... Porque sí. Es como el asunto de Pedro y el del Fin. No, a Pedro y el Lobo. La famosa fabula. Que son alarmas, alarmas. La gente concurre, pero después, cuando todas son falsas alarmas... dan por falsas las verdaderas. Exactamente. Así funciona el síndrome del Pedro y el Logo. Bueno, no, pero me parece que para eso se hacen los simulacros para que no se confundan estas situaciones. Ahora, el capitán es medio difuso. No, pero quiero aclarar, esto no es un simulacro. El simulacro lo hicimos antes de salir. ¿Cómo sabemos que esto no es un simulacro? Miren el agujero que hay en Babor. y se van a dar cuenta que hemos chocado con una piedra que yo creo a mí entender que es prácticamente la punta de un iceberg. ¿Ese agujero? ¿Este? No, señor. ¿El agujero, este? Sí, sí. ¿Es simulado o para usted real? No sabemos. Aquí en esta compañía naviera, los agujeros simulados los hacen también. Bueno, sí, pero tenemos que saber. Nuestro plan de viaje era llegar a las 9.30 al puerto de Galápagos. Sí, nos habían dicho, hay un puerto en Galápagos como para un crucero. Aunque es una reserva natural. Lo hicieron nuevos, señor. Sí, era una reserva, pero ahora está llena de turistas. Sí, bueno, pero... Que se montan a las tortugas. Equitación sobre tortugas. Hay gente que se asusta del galope de los caballos, dicen, montan esas tortugas que van tan lentamente. Pero tiene que abrir mucho las piernas para montar la tortuga. Veo cómo es. Y, bueno... Cada uno elige la vida que quiere llevar. Últimas consideraciones. Capitán, me han dicho... que en estos cruceros tienen la costumbre de sorprender a los polizones y obligarlos a abandonar el barco o dejarlos en una isla desierta. con un poco de comida. Hemos descubierto cuatro polizones en cubierta. ¿Va a hablar todo el tiempo por el parlante, usted por el alto parlante? Es que estoy en el... Porque estamos escuchando todos los pasajeros. No, es que bueno, estoy en el puesto de mando. ¿Qué quiere decir? Le habla a todos. Y le hablo a todos. El señor me pregunta una cosa. Le contesto por parlantes. Encontramos cuatro polizones, van a ser deportados en cuanto lleguemos al primer puerto. Ah, bueno, pero hasta el puerto va todo bien. El primer puerto será Galápagos son 2.700 kilómetros. Es muy difícil hacer 2.700 kilómetros con la mitad del barco llena de agua. Sí, sí. Y es curioso que lo llame kilómetro si no milla, siendo que es un capitán, el señor. Pero ¿usted confía en este capitán? Buenas tardes. No. ¿No será un polizón? Perdona, a los que dudan de mi doña Idad, les puedo mostrar el diploma con las mejores calificaciones que tengo. No, bueno, pero ahora... En realidad, buenas tardes. Buenas tardes. El barco ha sido tomado por piratas etíopes, que somos nosotros. Y que... Esa risa no hace más que confirmar el dato que acabó. Bueno, ¿y qué es lo que necesitan? No necesitamos nada. Y entonces, ¿para qué toman el barco? Perdón, inocente. Hemos tomado el barco y vamos a robarle a todos. ¿Y qué nos van a robar? Esto es todo all inclusive. No andamos con efectivo nada. Trajimos un... Ustedes son millonarios. Sí. Seguramente traen joyas. Seguramente tienen propiedades. Objetos de valor, tarjetas de crédito. Yo traje unas escrituras. Bueno, muy bien. Con más razón. Póngala aquí, por favor. Pero son unos campos que tengo un pergamino. Póngamelo aquí. Qué bien, qué bien. Bueno, sirva así. ¿Ese campo? Sí. ¡Una hectárea tiene! Bueno, ¿qué quieres? Es un lote. Quién me roba lo que tengo, es lo que tengo ahora acá. Bueno, ¿no tiene algo más? No, las últimas pertenencias que tengo, el reloj. Les voy a pedir por favor que vayan poniendo los objetos de valor en el bote salvavidas. ¿Dónde está el resto del pasaje? ¿Se han escondido? Lo que pasa es que a muchos los evacuaron porque el capitán, o el pirata, ya no sé, dijo que había un naufragio y que cada uno... Bueno, acá está pasando algo raro porque yo tenía una billetera, yo soy un pirata. Tenía mi billetera acá y ahora me falta. No tiene billetera los piratas. ¿Cómo que no? Sí. Él vino con la billetera. Te dije que no nos metiéramos con barcos llenos de millonarios porque nos iban a fanar. No, bueno, pero... Tenía una billetera y ahora le falta. Bueno, ¿qué quiere? ¿Qué me haga eso en cargo de la billetera de un pirata? Vamos a hacer una cosa. Vamos a apagar la luz. Bueno. Y... el que se ha equivocado y ha tomado mis billeteras tendrá oportunidad... No, no va a dar resultado. Y no, porque además si somos pocos, alguien ya se la llevó la billetera. Le damos la oportunidad, antes que nos enojemos, de devolver... la billetera, cuando cortemos la luz... Antes que nos enlojemos y antes que el barco termine de hundirse, cosa que está ocurriendo en este momento. Le diría que se apuraran porque nos vamos a hundir y ustedes se van a hundir con nosotros. Por eso voy a contar tres y voy a apagar la luz. Uno, dos, tres. Uno, dos, tres, prendemos la luz. No está la billetera. No, me ha desaparecido el reloj. Bueno, para eso le digo, no ves que acá no se puede estar, directamente no se puede estar. Últimos consejos para proceder en un naufraje. A mí me parece que hay que hablar con el capitán. Usted dice que personalmente, hacerse amigo. Hacerse amigo y... por ejemplo, usted dice que se está mudiendo al barco, ¿cómo podemos arreglar esto? Esto es muy sencillo, yo decido quién sube a los botes y quién no. No, no, pero no me digas que usted no puede evitar el naufragio. Parece que no. Estamos tratando de repararlo realmente. Lo que no hace a Quiñones. ¿Qué, 500 pesos? 500 pesos, último suben en el bote. Te dije que era poco 500. Acá manejamos otros números. ¿Qué le parece Milano? Milano? Ni un alfajor me compró con ese billete, por favor. Bueno, ponga usted cuál es su precio. Su amigo. ¿Qué? Su amigo. ¿Su amigo qué? Tenerlo como esclavo a partir de ahora. Roberto, por favor, somos amigos desde la infancia. Acá se ve la amistad. Con más razón. Bueno, está bien. ¿Cómo está bien? Eso lo tengo que decidir yo. Muy bien. ¿Cómo lo vas a decir vos? Y sí, lo tengo que decidir yo. Si yo estoy hablando con él. Estoy hablando yo con el capitán. Claro, eh. Bueno, sí, pero por qué no habla conmigo. Si vos estuvieras en mi lugar, haría lo mismo. No, bueno, no, no haría lo mismo. Además, ¿sabe qué, capitán? Yo no sé hacer nada, no le voy a convenir. No importa, porque yo necesito alguien que haga las tareas más... más horribles. No, no, no lo sé hacer. Bueno, no lo va a hacer. No lo sé hacer. Aprende en dos minutos a barrer el piso. ¿Me va a convenir él? Porque él sí sabe. No, sí él es mi amigo. Usted es amigo vos, Roberto. Me acabo de hacer amigo. Claro. No, pero no, te acabas de hacer amigo. En el semestre van y vienen. No, bueno, no es que van y vienen. ¿Cómo era tu nombre? Pero, ¿cómo te olvidás de mi nombre? Sí. Si desde chiquito tú... Iba lo de tu vieja que nos hacía los polvorones, ¿no te acordás? No. ¿Cómo que no te acordás? Roberto. Linda amistad tiene, eh. Disculpen que me meta. No se acuerda de nada. No. Bueno, procedamos al hundimiento. Ah, no. ¿Qué íbamos a hacer? Usted se va a salvar... porque hemos cerrado el pacto de caballeros. Esto es un pacto de caballeros. Muy bien. A partir de ahora el señor me va a acompañar. Tengo distintas tareas. La primera es pelar pescado. Y yo me voy a subir en el único buque salvavidas que hay. Pero cómo? Es un buque salvavidas, es más grande que el bote donde tenía lugar este crucero mígico. Pero claro, pero cómo el buque salvavidas va a ser más grande que el crucero mígico. Atención, colocan el buque salvavidas con cuatro motores para mi amigo. Permiso. Roberto, por favor. Solón. Roberto. Chau, Roberto. ¿Cómo puede ser esto? Nos vemos en el puerto, eh, Roberto. Muchas gracias. Mil gracias por todo. ¿Y por qué usted no se fue con Roberto, entonces? El capitán es el último que abandona el barco. Ah, bueno. Y prácticamente nos tenemos que quedar los dos. Y... ¿Llegaremos al puerto de Galapagos, dice usted? Me tengo que fijar la distancia. 2690 kilómetros. Mientras enfrentamos esta travesía, Sí. quizás encontremos flotando así en medio del océano Sí. algo del pensamiento ajeno. El pensamiento ajeno está hoy en la China. Vamos a revisar unas crónicas de los países de Hanos. Es una especie de libro de relatos publicado por un viajero chino, Dai Yu, que era una especie de Marco Polo, chino. Andaba viajando por todas partes. El libro se parece mucho a las aventuras de Gulliver, la de Jonathan Swift. Y a mí me parece que, yo probablemente leyó las crónicas de Dayú. La visita de Dayú a sitios extraños comienza por una tierra de gigantes, sigue por una de enanos, continúa por una de inmortales y luego por otras extravagantes. Vamos a saltear a los gigantes y a los enanos y vamos a ir directamente a la de los inmortales y los extravagantes. Al norte de la China había un país llamado Wuhi cuyos pobladores eran inmortales. Siempre ahí no tenían sucesión. Bueno, en aquella región vivían siempre las mismas personas, imagínense, en un aburrimiento atroz. Sostenían su aspecto físico, su vida ordinaria, su repetición. No había matrimonio, no había familia. La prosperidad se les volvía insoportable. Buscaban quebrantos y riesgos, pero inútil porque nunca les sucedía nada. Como conocían su inmortalidad, no creían en los otros peligros. Claro, cualquier peligro sin muerte es mínimo. Y entonces vivían en cuevas, comían peces, les gustaba dormir. Y el sueño les gustaba, porque en el sueño se encontraban con ¿qué? Con las yeguas de la noche, con las pesadillas. Y esa era la única oportunidad que tenían de tener miedo. Fuera de Gují, había otro país, el país de Atsing, donde todos eran vigorosos y jóvenes. Bebían de la fuente del agua roja que les daba cuento de eterna. Los animales también bebían de esa fuente, así que también eran jóvenes. ¿Cómo sabe uno? cuando un animal es joven. Puede saberlo, pero es más difícil cuanto más abajo está el animal en la escala zoológica. Sí, es verdad. Por ejemplo, uno puede reconocer un perro joven. Sí. Pero un mosquito joven... No, es raro. Un mosquito anciano es prácticamente igual que el mosquito adolescente. Tienes razón. Ni siquiera hay torpeza en el mosquito joven, ni siquiera hay precipitación. Ni siquiera hay mal gusto musical, por favor. Nada delata la juventud de un mosquito. Según Dayu, cerca de allí existían dos países de la longevidad. Uno de ellos era conocido como el Montículo del Emperador Amarillo, que quedaba cerca de la montaña Qiongshan. La gente allí vivía unos 800 años. Me parece que es razonable. No, muchísimo. 1800 años. Pero había longevos que llegaban a los 2000. El otro, el país de los blancos, donde todos los pobladores tenían la piel y el pelo blanco, también vivían 800 años, pero algunos conseguían vivir más por la siguiente razón. Por esas tierras andaba una bestia llamada Chen Wang. que era un zorro grande que tenía dos cuernos en la espalda y era muy veloz. Pero si lo podías montar, si podías montar al chenguang, al galope, podías vivir por lo menos dos mil años más. Genial. Bueno, bueno, pero es la llapa. Está bien, valía la pena. En el extremo este de la China quedaba el país de Qigong. Sus habitantes tenían solamente un brazo. Este. Bueno señor, qué detalle. Tan largo que podían tocar el suelo estando de pie, pero también tenían tres ojos. Uno para ver de día, otro para ver de noche. ¿Y el otro? Para ver de lejos. Bueno. Al sur quedaba el país de los hombres de los brazos largos, que tenían estatura normal, pero 10 metros de brazo. Genial. Y comían frutos de la altura de los árboles. a los cuales accedían debido a largo los brazos o a veces pecaban. Sin caña. Sin caña. Sin caña. Al tacto. Bueno, dormían sentados se apoyaban en troncos de árboles y colgaban los brazos de las ramas. Estupendo. A poca distancia estaba el país de los hombres de las piernas largas, eran más o menos iguales pero todo lo hacían con las piernas, es decir arrancaban frutos con los dedos de las patas poniéndose al revés, haciendo una parada de manos. Cuando pescaban lo mismo, se acostaban en la playa y pescaban con los pies. Los habitantes de ambos países eran sabios y cooperaban recíprocamente. A veces, para acceder a alturas inabordables, los hombres del país de brazos largos se subían. a los hombres de las piernas largas y llegaban hasta el cielo. Últimas regiones extrañas citadas por Diu, es Dayu. En el país de Sanxiu, los ciudadanos tenían tres cabezas que miraban en tres direcciones distintas. Esto evitaba que tuvieran que mover el cuello y producían simultáneamente el habla y el pensamiento. todo a la vez dice usted y no es así como se produce yo creo que debe haber un mínimo delay entre el pensamiento y el habla poco después le digo como se comprueba usted lee usted lee mas rapido lo que habla si claro si usted lee y quiere decirlo en voz alta va a tardar mas si usted quiere ahora que quiere alguna información por youtube y ve un video con un tipo que habla, va a tardar media hora. Si está escrito, va a tardar mucho menos. Así que, cuando esté apurado, lea. Sí, sí. Es una buena campaña para la gente. Es una buena campaña. Bueno, los rostros de las tres cabezas gesticulaban del mismo modo y hablaban a la vez en un ísono. perpetuo. Hablando de muchas cabezas, el otro día en una especie de conferencia que hemos dado con Dario Steinz-Reiber, contaba yo que había una bestia en el séptimo cielo de los musulmanes que tenía 70.000 cabezas. O sea, para mí es mucho, ¿eh? 70.000 cabezas. Pero fíjese, cada una de esas cabezas, cada una tenía 70.000 bocas. Y cada boca, hablaba una lengua diferente. Hicimos la cuenta de cuántas lenguas implicaba eso. ¿Y cuánto daba? Setenta mil al cubo. Sí, ya sé. Y muchas más lenguas de las que puede haber en el universo entero. Digamos que al sur de la China, en la región de los riachuelos, vivía un animal venenoso llamado yú. Tenía tres pulgadas de largo y vivía al acecho. Cuando alguien pasaba por su lado... ¡Expelí a veneno sobre la sombra! Y te mataba. Operaba sobre tu sombra. Por suerte, en los bosques había un país cuyos ciudadanos eran todos buenos tiradores, pero además, y esto es muy importante, eran seres sin sombra, que podían cazar con tranquilidad a los yú. Lo hacían con gusto, no tanto por hacer el bien, sino porque esa bestia, el yú, era su plato favorito de los comidas. eran los depredadores del lío. Nuestro cronista, este, Búliver de la China, Dayu, con su apariencia de hombre normal, al visitar a tantos fenómenos, se sentía un poco incómodo, porque se veía vulgar, se veía corriente, y entonces pedía disculpas por esta condición, y al presentarse solía decir Disculpen ustedes. No soy un extraño. Continuamos en la venganza, será terrible. Hay gente acá atrás que pueden dar señales de vida. Hemos escuchado los cien. Si no, griten algo. Para que se vea. Hemos escuchado al trío sin nombre. El trío sin nombre con una hermosa canción de Charlie. Sí, sí, usted ha ido a acompañarlos con su percusión. Tenemos algunas... Después van a estar también con el sordo Gansé. Dentro de un rato se viene el sordo. Bueno, ¿usted sabe que acá en el streaming... Sí. hay un chat que se dice, no tenemos los mensajes de la radio... Textos largos. ..escritos desarrollados. El chat está muy activo. Sintético, táctac, táctac. Veo que en este momento hay 21.000 personas. Bien. ¿En el estudio? Sí, acá mismo. No parece realmente. Así que bueno, les saludamos a todos. ¿Qué parecen las estadísticas de las muertes de los norteamericanos por culpa de los delfines? Sí, algo así. Por ejemplo, hacía la zar hermoso por Dios, dice alguien, hay muchos corazones. Qué bien. Bueno, eso no es una información. Tiene que decir qué persona. Vamos a agarrar uno la zar. Y qué dijo, que se identifique con nombre y apellido. A ver, con nombre y apellido, ¿a quién tenemos? A Lautaro Figueroa que dice vamos. Bueno, no dice mucho, pero por lo menos se identifica. Por lo menos es Lautaro Figueroa. No termina gente, esto sigue, dice Fast Edward. Todo dice lo mismo. Vamos, esto sigue, no se termina. Otros dicen vayan, y así. Vamos a dar información de nuestras inminentes hazañas. Bueno, porque atención, además de estar aquí los lunes en Blender, estamos el resto de los días en la radio, en la 750, pero también estaremos muy pronto en El Palomar. Así es, este mismo viernes. Viernes 16 de agosto vamos a estar en el... Atención caseros. Sí señor, caseros. Atención caseros. Palomar, Eulingham. Bueno. Villa María y René, Villa Mateo. Villa Tesei, un poquito más lejos. Bueno, si quiere también. Igual si usted viene también. Va a tener que tomar dos colectivos. Bueno. Vamos a estar en el Cine Teatro Elios a las 21 horas este viernes. Bien, y después en Bernal la otra semana, el sábado. El próximo sábado 24 en Bernal. El sábado que viene, el sábado 17 de agosto, se estrena, atención, Ceremonia Nocturna, que es una obra con dramaturgia de Ivana Szacharski, dirección de Silvina Dattry. ¿A dónde? ¿Dónde? En el complejo teatral. Ítaca, que queda en Humahuaca 4027 al magro. Esto será este sábado y todos los sábados a las 18 horas. Bueno. Si trata de un episodio, el episodio final en realidad, de la vida de la poeta Olga Orozco. Entonces ahí está ella, próxima a su muerte, con tres sombras y un médico, que tratan de retenerla en este mundo. Como estamos con las sombras hoy. Sí, estamos mucho con las sombras. El asunto es que los textos están construidos con fragmentos de poemas de la propia Olga Orozco. Entonces, los personajes, las sombras, la propia Olga dialogan... con versos de la poeta. Actúan Alejandra Piazzalonga, Rodrigo Dañone, Mara Gutman, Nadia Lewandowski y Cora Barengo. Recuerden ustedes, asistencia a Patricia Testa, esto es en Ítaca, complejo teatral, Humahuaca 4027, Almagro. su casa amiga vamos a decir también que hay gente que pregunta si pueden venir acá al publico porque hoy vinieron algunos fueron expulsados por la puerta hubo un poco de violencia hubo incidentes lo que pasa es que los patóvicas de Blender son los peores ¿sabe quién tiene la culpa? no El señor. ¿Por qué? Porque usted puso en Twitter, venga, y los oyentes entendieron que tenían que venir. No, pero no di ninguna dirección. Venga, puso. Venga a Blender, al espacio digital. Yo cometí un error que le vino en los incidentes que ya son de dominio público. Así empiezan las cosas. Sí, sí. Con usted diciendo, venga. Bueno, pero por ahí más adelante, ¿quién le dice? ¿Dejamos entrar algunos? Sí, no hay mucho lugar en el estudio, pero quizás... Pero no lo sabemos. Así empezó hace muchos años la concurrencia de público a la venganza. Dejamos entrar uno y vio después cómo es. Sí, claro. Y los que ir al ópera. ¿Los metían adentro del estudio de radio? Los metíamos, claro. Y los escondíamos. ¿Por qué? Porque las autoridades de la radio... Imaginen, ¿cómo llega uno a autoridad de la radio? Bueno, terminando al público. Entonces nos obligaban a no recibir a nadie y venían a inspeccionar. Entonces los escondíamos en lugares, por ejemplo, atrás de esa cortina. ¿Atrás de esta cortina qué creen que hay? Millones de personas que ocultamos al señor Blender. Bueno, ya veremos más adelante. Igual de nuestra casa en la ciudad de Buenos Aires, es el Chacarerían Teatres, a donde estamos también. Ya vamos a anunciar próximas fechas en el Chacarerían. Señoras y señores, este es el mejor momento para dar comienzo al siguiente segmento. Esto es para las personas que acaban de comenzar un noviajo o un nuevo amor. Para mí, el mejor momento. Para mí el único. Bueno, cuando empieza un noviajgo? Hay varias doctrinas. A ver. Primer beso. Me parece bien. Primer contacto íntimo. Me parece mal. Echétera. Algunos lo han empezado unilateralmente. Claro, porque... Y la peor manera de establecer un noviajgo. Uno solo de los dos. Está bien. Incluso con esas dos situaciones que usted escribió con tanta claridad, permítame decirle, a veces, aún así, no se inaugura un noviazgo. Bueno, pero puedo decir por qué esto lo trajo la modernidad. En mi época, yo soy de otra generación. ¿Cuál es su época? Otra generación. La edad media. Sí, no es esta. Uno preguntaba claramente a la mujer, ¿querés salir conmigo? Si decía sí, bueno, ya estaba el pacto formado, había una afirmación que quedaba delante del testigo. Yo estoy por la firma incluso de un documento. Y que le llevaba un papel. Y sí. Bueno, pero... Bueno, no importa. Se parece mucho al matrimonio, eso que usted dice. Tiene razón, lamentablemente. El doctor Jiménez Agasti, de la Universidad de Connecticut. donde según parece se rascan a cuatro manos. No, señor, su uniforme es serio. No se acerque a estos consejos de utilidad para cuando empezamos una relación y no queremos cometer errores. Bien. Lo que no debes hacer en los primeros tiempos del no viajamos. No puedes, por ejemplo, acá dice, no vayas demasiado rápido y enseguida dice, no vayas demasiado despacio. No, no, bueno. Bueno, ¿qué quedamos? ¿Puedo? Sí, por favor. Bueno. si uno va demasiado rápido, por ejemplo, la gente que dice te amo el primer día. Se la gastó toda el primer día. Por eso. Son como esos que toman el ómnibus y llevan un montón de cosas. Sándwiches, entretenimiento, libro. A los 10 kilómetros leyeron el libro, se comieron los sándwiches, jugaron los juegos y ya tienen. mil kilómetros sin nada. No le queda nada. Salió en retiro en Pacheco. Guarde algo para mañana. Por eso. Pero también es malo ir muy lento. Claro. Pero acá dice no intente esforzar las cosas porque si vais, esto lo dice Jiménez Agasti que habla así, si vais a ritmos diferentes, alguien se terminará. agobiando. Si se te ocurre irte a vivir juntos, claro. Vos vas a... ¿Conocés una mena en el Roxy? Sí. A bailar, ¿no? Y a la segunda pieza decís... ¿Qué se me merece si nos vamos a vivir juntos? No, no. Es que ahí... Se va a apurado. Se va a asustar ella. No es normal. Para mí hay otras clases de consejos que hay que dar. Bueno. El primero es no revelarse como el imbécil que uno es. El amor necesita, y especialmente al principio, un grado muy grande de ocultamiento. Sí, pero discúlpeme si uno... Imagínese, usted es un imbécil. Pero sí, si uno es un imbécil, ¿cómo oculta? ¿Por qué es un imbécil? Bueno, con maniobras de ocultamiento, disimula, no contesta las preguntas difíciles... Hay una fórmula. Todo lo que usted piensa o todo lo que usted va a decir... Diga lo contrario. Entonces va a ser un genio. ¿Te gusta el jazz? Sí. ¿Qué cuánto? Que tardó eso ni vez. Tardó mucho. No, porque, pere, yo soy ella. Yo soy ella. Un minuto, tardó. Yo se lo voy a decir. Usted no tiene manera de ocultar nada. No, bueno, por eso le digo. Yo se lo dije. Pero sí, yo soy la señorita. Sí. ¿Qué tal? ¿Cómo te llamás? Ana. ¿Cuánto tardaste, mamita? Me van a buscar otra. Perdón, ¿usted quién es? Yo soy un amigo de él. ¿Estamos juntos? Venimos siempre al Roxy. Venimos a bailar. Bueno, pero no sé, yo pensaba que iba a bailar con él. No, acá el tema es entre ustedes dos. Yo lo estoy acompañando a él. Bueno, sí, pero... El tema es entre ustedes dos, yo lo acompaño a él. Bueno, como quiera que sea, oculte. Sí. Pero la ocultación también es sobre detalles personales. No le diga dónde vive. Está bien, me gusta. No le diga dónde vive. Está bien. Pero si le pregunta, ella le pregunta concretamente. ¡Miéntale! ¿Dónde vivís? Miéntale, vivo en el Palomar. ¡Uy, yo soy del Palomar! Mentira. Estamos mintiendo todos o en qué quedamos? No será que me mentís porque recién nos conocemos. Salí tonto. Bien, si usted tiene otra relación, eso es fundamental. ¿Cómo? Sí, pero... Si usted tiene novia... y va a comenzar con otra no. No lo tiene que decir. No se lo diga. No se ponga confidencial a los cinco minutos. Mira, quiero decirte algo. Yo estoy saliendo con otra chica, pero ahora que te conocí... ¿Qué es eso de esos movimientos, señor? Ahora que te conocí. ¿La va a dejar inmediatamente? Lo voy a dejar inmediatamente. Bien. No le diga nada. No le diga nada. Dígale. En realidad estoy completamente solo. Bueno, igual no... al menos hasta ahora. No le había preguntado. No, es que está soltero. Por eso yo lo acompaño, porque está soltero. Hace más de un año que está. Y... la verdad que vos caíste como del cielo. No, perdón, yo no caí de ningún lado. Bueno, bueno. Estoy acá parada. De casualidad. Después, otra cosa, no trates de cambiarla. No. ¿Cómo la va a cambiar? Y, no sé... A mí me parece que... Vos deberías mudarte. ¿Por qué? Si toda mi familia es del Palomar, siempre vivimos ahí. Pero si vamos a estar juntos, tal vez no convenga que vivamos cerca. Bueno, pero no vamos a estar juntos. Me invitaste a bailar ahora. Imagínate dos horas de bondi para visitarse uno al otro. Él va a hablar toda la noche. No, no, yo ya me voy. ¿Qué problema hay? ¿Sabes qué? Yo ya tuve otras experiencias. Estuve de novio con una vecina. Y la contiguidad... es fatal para el amor. Sí, sí. Gracias. Bueno, no está bien. Pero yo simplemente quería divertirme un rato. No digas tantos adverbios. Pero dije simplemente. Simplemente, sinceramente. No dije sinceramente. Estúpidamente. Uno que quiera cambiarte, pero en realidad sí. Sí, me parece que... Si vamos a estar juntos, comendría que cambiaras un poco. Sí. Menos... Menos palabras. Ese traje negro con esa remera no te queda muy bien. Bueno, pero... Ana. Silvia me gusta más. No, bueno, entonces salí con Silvia. Entonces tienes que salir por encima. ¡Qué carácter! ¡Vas a seguir hablando! ¡Qué carácter mamita! No seas tan personal. No, bueno, no lo tomes todo tan individual. No, no es individual. Es mi nombre. ¡Afirmar tu personalidad! ¡Ana, la realidad cada dos minutos! A mí me espanta. No, bueno, no sé qué te espanta. Tengo ganas de ponerme de novio con otra persona. Y bueno, ponete novio. Perdona que te lo diga. Ponete con tu amigo de novio. No hay que hacer eso. No. La civilidad es la peor enemiga de la humanidad. Muy bien. Yo creo que hay que también aprovechar el primer momento para jugar un personaje un poco. Claro, lo que a uno le hubiera gustado ser. Yo como profesor de física. Ah, sos profesor de física. Sí, de la Universidad Nacional de la Matanza. Ah, qué bien. Es una de más prestigiosas, justamente. ¿Te puedo hablar tanto? Pero vos sos, por ejemplo, más de Newton, de Copérnico o de Einstein. A mí me mata Copérnico. Pero no es medio atrasado? Sí, estoy un poquito atrasado. Yo lo cuestiono un poco a Copérnico. Voy más por el geocentrismo. Sí, pero ese no es un vos. A mí me llaman el geocéntrico. En la Universidad de la Matanza. No será el egocéntrico. Cuando no, el egocéntrico. Y lo mismo. Bueno, no sé si exactamente igual. El geocentrismo es el egocentrismo llevado a la física. Bueno, contale Rubén que estás escribiendo un libro copérnico. ¡Contale! Estoy escribiendo un libro sobre si hay vida en el resto del universo. ¿Pero qué tiene que verlo? Ahí está, como se llama el alemán ese que es coreano. Sí. Ha dicho una frase extraordinaria. Bidu Chang. Sí. Parafraseando a Descartes, ha dicho, muero, luego existo. La muerte es la vida. Que si no hay vida, no hay muerte. Entonces el libro que yo estoy escribiendo se llama ¿Hay muerte en Saturno? No, pero eso sí. Es genial. No hay vida en Saturno como todos los documentales que ve usted. Sí, pero se entiende eso. ¿Hay muerte en Saturno? ¡Ah! ¡Ah qué, señor! ¡Ah! No, te digo una cosa, dentro de dos años... alfombra roja cuando saque el libro. Ah, pero ya sabe que dentro de dos años lo va a sacar. No, no estamos viendo editoriales. Ah, todavía no lo tiene. No lo tiene. Nóbreme un editorial. Planeta. Otra nombre. Sudamericana. Bueno, muy bien. Tampoco esto es a la defensiva. ¿Qué es estar a la defensiva? Nunca he entendido. A la defensiva es muy sensible a los comentarios. Conoce a alguien y se pone de acá. ¿Qué comentás vos? ¿Qué comentás? Eso es a la defensiva. ¿Eso? Después poner etiquetas. Exacto. Sí, por ejemplo. ¡Imbecil! Y yo le pongo una etiqueta que dice, peguen que no duele. muchos oxistes. ¿No se hace más? No, ¿por qué? No sé, debe ser porque ya no se usa el papel para nada, tampoco para eso. Pero fue a etiquetar a las personas, como dice, porque diga dos palabras uno no va a ser de una cosa política o de la otra. Qué lindo que todas las cosas del universo tuvieran etiquetas. Mas ordenado. Ayudaría mucho al aprendizaje. Por ejemplo, usted sale a la calle, árbol. Hay un árbol, un arquitecto que te dice árbol. Sí. Un auto pasa, auto. Sí, también. Pero, ¿sabe cuál es? Un caminado desconocido. Sí. ¿El inconveniente cuál es? Que usted ve el árbol y el cartel de árbol, y en algún momento alguien va a poner tronco, hoja, rama. Sí. El inconveniente es el sinónimo. y el nivel de particularidad. Hay que abolir la sinonimia, que una lengua que... Un árbol es solamente un árbol. Pero, ¿y qué pasa con el análisis? Claro, jacaranda. Claro, las clases de árbol. Disculpeme, fue una mala idea. Bueno, no, pero se puede empezar así. Pero en todo caso, no haga esto. Cuidado... Cuidado, no le dé todo de entrada. Exacto. Antiguamente las madres le aconsejaban a las hijas, no des todo la nena la primera noche. ¿A qué se refiere? ¿Usted está seguro de lo que está diciendo? Las madres aconsejaban que vayan dejando capítulos para el futuro. Es lindo ir descubriendo la persona de a poco. No le prestes dinero. La primera vez. Sí, porque... Ustedes todavía no han terminado de bailar la pieza. Y la mena le dice, no tendrías 500 bancos. No, no. ¿Sabes qué pasó? Que me tengo que tomar un auto. ¿Un auto? ¿Qué es? ¿Un taxi? Sí, me tengo que tomar un auto. ¿A dónde va? Y resulta que llegó mi tío. Ajá. Que es de Chivilcoy. Ni una palabra más. Bueno. Ni una palabra más. No tenés que explicarme nada. Bueno. Bien. No tengo plata. Pero cómo, no tenés para darme 20.000 pesos. No, no llevo plata encima. Yo tengo 20.000 pesos. Pues, decíle a tu amigo. Porque es mi amigo el que lleva la plata. ¿No es cierto? Sí, sí. Yo no tengo problema en darle los 20.000 pesos. Bueno, ahora sí. Ah, bueno, perfecto. Ana, toma... ¿10.000? ¿Ahora? y tomado 10.000 ahora, 20.000. Ah, bueno, 20.000. Por eso, sí, sí, sí. 10.000 y 10.000. ¿Cuándo me los pensás devolver? A mí. Bueno. Sí, bueno. ¿Me los pidió a mí? Bueno, bueno, bueno. ¿A qué estamos jugando? No. ¿Quién sale con ella? Bueno, bueno. Yo hablé con él. Sí. Entonces, nada, no que estemos los rangos. Lo que sí te voy a combinar. ¿A combinar? No. a que le devuelvas el dinero a ver cuando pueda. La verdad que estoy decepcionada. ¿Por qué? Voy a pensar que me... ¿Qué rápido te decepcionás, Ana, eh? Bueno, bueno, pero... ¿No hace cinco minutos que nos conocemos? Sí. Y ya estás decepcionada. Y yo he tenido novia. Disculpa que hable de mí. Bueno, sí, pero... Que tardaron... Eh... Semanas. Sí. En decepcionarse. No me importa lo que hicieron el resto de las novias, pero la verdad... Ah, no te importa, claro. ¿Sabes qué siento? ¿Qué? Que tuviera... como si tuviera un cartel que... que... soy 20.000 pesos. Una etiqueta... Árbol, dice. No. ¿Puedo hablar un segundito? 20.000 pesos. No me llamo 20.000 pesos. ¿Puedo hablar un segundito con mi amigo? Sí. Perdón, Ana. Ningún problema, ¿eh? ¿Qué? Escúchame. No me gusta nada la onda que tiene. Ya me pidió plata... ¿Cuánto hace que la conoces? No, no, pero aparte es un no constante. No, no, no, no. Es la negatividad caminando. Bueno, chico, me voy, ¿eh? Perdón, me voy, ¿eh? No, espera, espera. Sí. Decíselo vos. Perdón. Sí. ¿Qué le teníamos que decir? ¿Qué le digo? Ah. ¿Queremos que se vaya o que se quede? No, no, bueno, vos déjame ver la última oportunidad, a ver si podemos levantar esto. Bueno, bueno. ¿Cómo sigue nuestra relación? Eso es lo que queríamos hablar. Eso, ¿cómo sigue nuestra relación? Ana, esto es sin compromiso, es una pregunta que te hago, vos podés decirme sí o no. ¿Te gusta Rubén? Un momento, un momento, no le contestes todavía. Y sí, estamos definiendo esto por penales, ya no hay tiempo. Definición por penales. Tanto que tenés que pensar. Bueno, gustar... ¿Te gusta el jazz? Gustar, gustar. Gustar. Sí. A veces uno va... Voy a hablar con metáforas. Exacto. Voy a hablar con metáforas. Estás loca por mí, me recuerdas. No, no, no. No, pero... Me ama. No, no, tiró una punta... ¿No la viste? ¿La expresión de los ojos? No, no, tiró una punta pero con esperanzas de que esto puede crecer. Es decir, hay una simpatía, hay algo que se está llevando bien. Lo voy a decir con una metáfora como si hubiera entrado en un restaurant. Sí, sí. La cocina es arroz. Sí, sí, no hay ningún problema. Quedan tres platos. Sí. Uno me da asco. No seré yo, que te presto la plata. El otro no me gusta. No seré yo. Y el otro podría comerlo con alguna arcada. Es él. ¿Cómo? ¿Con una arcada no me gusta tampoco? Torerable. No me digas que soy yo. Sabía, no bueno, bueno. Lo adiviné en la mirada. Sabía que estaba conmigo. Me dijo que estaba conmigo. ¿Cuánto hace que haga que muere? A una mera no lo doy a tu. Ah, está bien. Es genial. ¡Semanas! Un segundito, voy a hablar un segundito con mi amigo. ¡Gol! ¡Qué bien! Venías de un año y hoy sí. Rechazo, rechazo, rechazo. Hoy se te dio, hoy se te dio. Hay una luz de esperanza, dejó la puerta abierta. Chicos, tuve un inconveniente porque me llamó mi hermano. Sí, te vi con el celular. ¿Estabas hablando con tu hermano? Sí, estaba hablando con mi hermano porque... ¿Me llama tu hermano Amor? No, es el sobrenombre, le decimos Amor en casa. Sí. Y ¿sabés que cuando estaba hablando por teléfono con él me robaron los 20.000 pesos? ¿Cuándo? Parece que se puede venir a más a este boliche. Así que voy a necesitar 20.000 pesos. Yo no tengo más. Yo te voy a prestar otros 20.000. No, es que tenía justo, los guardé para... Bueno. ¿Somos amigos o no somos amigos? La verdad es que... Rompemos aquí, ¿eh? No, no hay ningún problema. Yo tengo otros amigos también. Yo lo que te puedo dar, pero esto con todo mi corazón, son 15.000 pesos y después 5.000, 20.000. 20.000 pesos. Bueno, muy bien. Bueno. Acá están. ¿Cuándo me lo vas a pagar? Acordate que ya me debes 20.000. Claro, son 40.000 ya. La verdad me decepciona lo que decís. ¿Es lo único que tenés para decir? ¿Cuándo te lo voy a pagar? ¿Qué tengo un cartel que dice 15.000 más 5.000, 20.000 pesos? No, tenés otro cartel más que dice veinte mil de antes. No. Son cuarenta. Bueno, se ve que es lo único que te importa. No, no, no lo único. No lo único. No, bueno, pero parece que sí. Me parece que te estás llamando tu hermano porque ahí la pantalla dice amor. ¿Qué me ibas a decir a tu hermano? Amor, dice. A ver. Sí, tengo que atender a mi hermano. Bueno, no hay ningún problema. Sí. Sí, ya está. No me llames más ahora. Sí, dulzura. Bueno, nada, yo estuve escuchando la conversación. Utilizaste la palabra dulzura. Me llama poderosamente la atención esto. Lo que pasa es que mi hermano me pidió... ¿Por qué me tomaste? ¿Tengo un cartel aquí? Sí, que dice imbécil. Mi hermano me pidió que por favor si podía llevarle unas bolas de fraile, por eso digo dulzura. Ah, bueno, bueno, bueno. Es el loco de la bola de fraile. ¿Querés que nosotros te la proporcionemos? ¿Ustedes tienen bolas? Mi papá tiene una panadería. Ah, lo felicito. ¿Oíste hablar de Froilán? Sí. Sí, Froilán. La bola de Froilán. Sí. Son las mejores. Sí, sí, sí. Avenida Juan B. Justa y La Carra. Sí. Se cortan. No, pero... Pasando la tablada. Bien. Bueno... Se cortan en el infinito. Jajaja. ¿Me podrías traer algunas bolas? Sí, sí, no tengo ningún problema. Un segundo, voy a hablar con mi amigo. A mí me caía pésimo. Cuando la conocimos me pareció que estaba en otra que nos estaba tomando el pelo. Se ve que es buena mina. ¿Sabés que me empecé a ver que tiene sentimientos lindos? Le dijo dulzura al hermano. ¿Sabes qué lindo que llevarse con un hermano a decirle dulzura? Es lo más lindo, es una bendición. Le gustan las bolas de fraile. Es de barrio. No pidió sushi. Pidió bolas de fraile. Ya me encantó la pizza. ¿Tenés en el auto vos? Sí, sí. ¿Tenés auto? Sí, sí. Vinimos en mi auto. ¿En el baúl? Tengo una docena de bolas de fraile. Y bueno, tráelas. Bueno, bueno. Ahí vengo un minutito. Se quedan hablando entre ustedes. Sí, sí. ¿Dónde vas tu amigo? ¿Siempre es así? ¿D Así como. Y así... de imbécil. Perdón, me voy a ir a buscar las bolas de Frélix. Me quedé. No te habías ido todavía. No, escuché toda la conversación. No me gusta lo que estaban hablando. Un momento, voy a hablar con él. Todo lo que dijimos recién... No, bueno, pero no me... Se vino abajo. Ni tiempo. Se vino abajo. ¿Qué hacemos? Bueno, chicos, yo me voy a tener que ir. Andate. Andate, mira. ¿Pero por qué? Ahora me tratas así. ¿Quieres que te diga una cosa? No vuelvas más. ¿Cómo no vuelva más? Pero si estamos en un boliche. Se terminó. ¿Cómo? ¿Terminó lo nuestro? Muy bueno, mientras duró. Pero no duró nada. Pero todo tiene su tiempo. ¿Entendés Ana? Todo. Empieza, llega a su ápice y termina. Ah bueno, no sabía que iba a ser así esta relación. Ay, pero ¿qué? No me extrañes. No, no, no es que te vaya extrañando. Luego por tu bien. No sos vos. Soy yo. ¿Cómo no vuelvas más? No, no, no es que te vaya extrañando. No, no, no es que te vaya extrañando No, no, es él. Ah. Ahora, discúlpame. ¿Me podrías prestar 10.000 pesos? Ana, me debes 40.000 a mí. Estoy hablando con él. Qué mal carácter, por favor. Ya, yo tengo... 9.000 aquí. Sí. Sí. Menos 8.000 que le debo a él. Sí. Tengo 1.000, toma. Pero con 1.000 no voy a hacer mucho. ¿Sabes qué? ¿Te devuelvo mil? Sí. De los 8.000 que me prestaste. ¿Cuándo? Ahora te debo 7.000. Y estamos a mano, ¿les parece? ¿Qué mano? A mí me debes 40.000. Estamos a mano, 7.000. Te acabo de dar mil. De los 8.000 que me diste, ya estamos a mano. Ah, tienes razón. Hasta luego. Hizo mal la cuenta, me parece. No, a nosotros nos engañó. No. Y sí, yo le di 40.000 pesos. ¿Estás seguro? Creyendo que iba a ser tu novia, y vos terminás echando todo a perder. ¿Qué necesidad tenías de romper la relación? Si ni habían comenzado. Y si corro tras ella. Bueno, vamos, vamos los dos. Ana. Ya es tarde para todo. ¡Ey, Ana! ¡Por favor! Mirá, de rodillas, te lo pido. ¿Qué tengo? Un cartel pegado. Sí, un cartel que dice... Música. ¿La música? Dice música. ¿Sabes qué? Yo te diría que primero nos acomodemos un poco y seguramente en un rato te voy a presentar a unos tipos que son más en un trío. Sí, que están ahí. No será el trío de tu hermano. El trío de mi hermano, que es el trío sin nombre y que viene con el sordo ganse. Pero nos acomodamos un poco y los vas a escuchar. Te van a gustar. te amé mucho, eh. Sabés que fue lindo, no? Te quise mucho, te quise mucho. Quizás haya sido el amor de mi vida. Sí, te voy a recordar siempre. Yo también le voy a recordar siempre. Cuarenta Lucas Mendo tengo. Gracias muchachos. Adiós. Adiós. Y para finalizar, dos palabras bastan. Gracias. oficinanerd.com. Pasión por el podcast.