Aprendiendo del futuro | Ceibal

Analizamos la inclusión de inteligencia artificial en educación y el marco para su enseñanza desarrollado por Ceibal.
Sumate a la conversación con el presidente de Ceibal, Leandro Folgar, y la jefa de Investigación, Desarrollo e Innovación, Isabel Amigo, para intercambiar sobre este tema tan presente y seguir #AprendiendoDelFuturo.

What is Aprendiendo del futuro | Ceibal ?

Te invitamos a conversar del futuro de la educación en Uruguay.
#AprendiendoDelFuturo es un pódcast de Ceibal para reflexionar junto a personas expertas y con base en datos estadísticos que nos ayudan a entender la realidad de hoy y construir la de mañana.

Se dice que 25% de los empleados
cambiará de trabajo a causa

fundamentalmente de la
irrupción de nuevas tecnologías,

según un estudio del
World Economic Forum.

¿Qué significa esta nueva era
de la revolución digital?

En este episodio hablamos de
inteligencia artificial en educación.

Desde Ceibal, “Aprendiendo del futuro”.

Las conversaciones que nos debemos
en el ámbito educativo.

Con datos estadísticos
como punto de partida

y la mirada de especialistas
en educación, tecnología e innovación,

construimos un espacio de análisis.

“Aprendiendo del futuro”,
un pódcast de Ceibal.

Sumate a reflexionar.

Bueno, para conversar sobre
esto nos vinimos a Ceibal

y estamos con Isabel Amigo,
que es ingeniera en Telecomunicaciones

y doctora en Informática
y fue jefa de Investigación,

Desarrollo e Innovación de Ceibal,
y con Leandro Folgar,

que es docente, licenciado en
Educación y máster en Tecnología,

Innovación y Educación y presidente de Ceibal.

¿Cómo les va?

Muy bien.

Mucho gusto estar acá.

Vamos a arrancar por el principio
y tal vez esta sea una pregunta

para Isabel, ¿qué es la
inteligencia artificial

y cuál es la diferencia entre la famosa
inteligencia artificial generativa

y la que no tiene apellido?

Bueno, podremos decir
que la inteligencia artificial

es una disciplina que
podemos ubicar en el campo

de la ciencia de la computación,
pero también con fuerte intersección

entre la estadística,
la matemática, la ciencia de datos,

y que busca en cierto
modo crear algoritmos

que son capaces de reproducir,
de realizar tareas

que imitan o que pueden reproducir
la inteligencia humana.

Entonces para eso hay gran consenso,
aunque siempre podemos debatir un poco,

pero que pueden corregirse también
a sí mismas utilizando datos.

Mejorar lo que realizan.

Cuando decimos algoritmos, bueno,
una serie de instrucciones

que son capaces de ser implementadas por
una máquina para llevar a cabo una tarea.

Me preguntás también la diferencia,
bueno, la inteligencia artificial

está ahora muy en boga,
pero podemos decir que existe

desde hace mucho tiempo, que desde
1950 más o menos se asocia

el inicio, con la proposición
de la prueba de Turing,

y el término en sí “inteligencia artificial”
se adoptó un poquito más tarde,

como por 1956.

¿Por qué hablamos tanto hoy
en día de inteligencia artificial?

Si bien está presente en nuestras vidas,
capaz no desde hace tanto tiempo

en los usuarios,
pero sí desde hace más tiempo

con traductores automáticos,
con sistemas de recomendación,

con muchas cosa que
hemos ido incorporando

capaz sin darnos cuenta de
que eran inteligencia artificial.

Pero a fines de 2022, así como irrupción
en manos de todo el mundo,

podemos decir la inteligencia
artificial generativa.

Generativa porque es capaz
de generar cosas, generar artefactos

se dice a veces: puede ser texto,
puede ser imagen,

puede ser video,
puede ser código de software.

Trabaja con muchos, muchos datos.

A partir de esos datos
es capaz de, como les decía antes:

seguimos estando
en inteligencia artificial,

entonces, tiene que ver
con la estadística,

tiene que ver con los algoritmos
y es capaz de reconocer patrones

y producir, crear contenido
que es original, pero a partir de datos

que recibe como entrada,
y, algo que es interesante

también o importante, y a partir
de una instrucción

que se le da en el lenguaje
corriente, en el lenguaje normal.

Como que charlamos, como con el ChatGPT.

Por ejemplo. Ahí está.

Y entonces, ahora que en 2022,
como decía Isabel,

irrumpió, ¿no?, ¿cómo
afecta esto? Y no sé si afecta.

¿Cómo se mete en la educación,
cómo interactúa con la educación?

Yo creo que lo que
trae Isabel es tal cual,

no solo cómo es que irrumpió,
sino que se magnificó.

Veníamos usando y venimos
usando inteligencia artificial

o la tecnología que llamamos
inteligencia artificial

hace muchísimo tiempo
y en muchísimas tareas.

El predictor de texto
de nuestros celulares

utiliza técnicas
de inteligencia artificial

y es inteligencia artificial,
de cierta manera.

Pero antes de eso,
el predictor del buscador.

Y antes de eso, cualquier instrumento
que utilice grandes volúmenes de datos

para tomar decisiones,
si se quiere, que están

mediadas siempre por
una computadora.

En definitiva,
lo que esta tecnología amplifica

es la posibilidad de,
en educación, por ejemplo,

utilizar grandes
volúmenes de información,

que es una capacidad
que el cerebro humano

no hace tan, tan bien.

Llega un punto,cuando
tenemos ciertos volúmenes

de información,
en donde el cerebro humano

ya no es tan óptimo para esa tarea.

Entonces, digamos,
tercerizamos ese trabajo

en un cerebro externo
que es, en definitiva,

un cerebro electrónico,
es la computadora

y su poder de procesamiento.

Y lo que en definitiva
hace la inteligencia artificial

es ponerle reglas
a ese cerebro electrónico

y automatiza algunas tareas.

Entonces, en educación
hay gran promesa, por ejemplo,

y una de las grandes dificultades
que tenemos los docentes

en general es cómo me aseguro
que en un grupo de 20 o 30

o 40 estudiantes todos tengan
retroalimentación oportuna

en el momento apropiado.

Es una cosa difícil.

Están todos a la misma vez
en un mismo salón.

Todos están teniendo
experiencias diferentes,

porque todos proyectamos
sentido de manera diferente

a la realidad que estamos compartiendo.

Y bueno, un docente,
un profesor podrá estar

hablándome de un tema,
pero lo que está sucediendo en mi cabeza

es muy distinto de lo que
pueda estar sucediendo

seguramente en la del
compañero de al lado

o la compañera de al lado,
y eso hace que en el aprendizaje

la retroalimentación sea fundamental
para fijar conceptos.

Y cuando sucede en determinados momentos
y cuando sucede de determinada manera,

es muy muy óptima y los
profesionales de la educación lo saben.

Lo que sí es muy difícil
es hacerlo solamente

siendo un ser humano
contra 40 seres humanos

y es mucho más fácil
de repente para una computadora

brindar ese servicio.

Y ahí viene, digamos,
la gran promesa de la inteligencia

artificial en lo que tiene que ver
con la personalización.

Ofrece la posibilidad
de que estos algoritmos

y este poder computacional
aplicado con estos algoritmos

le dé al estudiante
una experiencia más personalizada

de una disciplina,
de un tema que se pueda tratar.

Pero eso solamente en lo pedagógico,
después habrá aplicaciones

en lo administrativo,
aplicaciones en lo curricular,

aplicaciones a nivel gestión,
aplicaciones a nivel salud.

Hay un montón de aplicaciones
que se puedan hacer de esta tecnología,

como de tantas otras,
que fomenten los procesos

que queramos que sucedan en educación.

¿Y cómo es introducir
la inteligencia artificial en Uruguay,

en el sistema educativo, en el
proceso educativo? ¿Cómo es eso?

A mí me parece que es un proceso,
en realidad, que ahora

hay como urgencias
y hay que atenderlas y está bien,

pero que en sí es todo un proceso.

Y es un proceso que
por ejemplo desde Ceibal

se viene transitando
en realidad hace tiempo,

porque ¿qué elementos necesitamos
para la inteligencia artificial?

Necesitamos todo un terreno
que ya esté preparado

para poder entender,
para poder aplicar, para poder utilizar.

Entonces, por ejemplo,
el caso de Ceibal, ¿no?

En realidad podemos pensar
que este terreno se viene

preparando hace 15 o 16 años.

Empezamos entregando computadoras,
dando conexión a internet,

elementos básicos y fundamentales
para poder utilizar

y explotar esta tecnología,
y luego todo lo que son

los programas educativos
construidos sobre eso.

Por ejemplo, el programa de pensamiento
computacional, que se presta mucho,

digamos, está muy relacionado con lo que es

la inteligencia artificial,
por el enfoque,

por el enfoque justamente
de la lógica computacional,

de cómo se introducen los temas.

Entonces, por un lado me parece
que está eso, lo de preparar el terreno,

y que es una oportunidad
el hecho de que se venga haciendo

desde hace tiempo en nuestro país,
y por otro lado

está el sistema educativo
que ya tenemos a través

de los docentes, que son
los multiplicadores

que tenemos, entonces, que
también es un abordaje

que venimos privilegiando
bastante el llegar a través, o sea,

capacitar a los docentes,
formar a los docentes,

acompañar, recibir también
de los docentes...

El feedback.

Exactamente, el feedback,
los requerimientos,

adaptarnos un sistema al otro, bueno,
para que eso sirva de multiplicación.

Y luego está lo de los
diferentes niveles, ¿no?,

porque hablar del sistema
educativo es muy amplio,

entonces deberá adaptarse
según cada uno de los niveles;

desde Inicial hasta Secundaria
o incluso más allá,

según el nivel de cada estudiante.

Para poner un ejemplo
con respecto a lo que veníamos

hablando de lo que decía Isabel,
para cuando los titulares

sobre la inteligencia artificial,
más concreto,

un producto de inteligencia artificial
que es ChatGPT,

llegaron a todos los medios gráficos,
medios audiovisuales

de prensa, Ceibal ya hacía dos años
que estaba desarrollando

dentro de su propuesta de pensamiento
computacional modelos de aprendizaje

automático que son,
en definitiva, inteligencia artificial

dentro del programa Pensamiento
Computacional en las escuelas

públicas de Uruguay, o sea que no era
una tecnología que era nueva

para los estudiantes de Uruguay.

Entonces, todo lo que explicaba Isabel
se traduce en esas cosas concretas.

Es decir, tenemos una estructura
y tenemos el beneficio de contar

con una organización como Ceibal,
que facilita que estas tecnologías,

que son normalmente disruptivas
y disruptoras,

lleguen al sistema educativo
más acolchonadas

de alguna manera, más abarcable,
si se quiere, o más apropiada

para contextos de educación,
y además en un entorno

protegido donde tenemos;
en educación y en aprendizaje

siempre decimos que lo fundamental
para que sucedan aprendizajes

es poder asumir errores en ambientes
de riesgo controlados.

En definitiva, lo que Ceibal
está procurando hacer

con estas tecnologías es crear
un ambiente de riesgo controlado

donde todos puedan probar,

tocar, romper

estas tecnologías
para saber de qué se tratan

y cómo se crean cosas
con estas nuevas tecnologías.

Es interesante eso del ambiente controlado

y el del poder probar, porque
tenemos como estas dos realidades

que ocurren en tiempos
bastante diferentes.

Los avances tecnológicos
tienen como una vorágine muy marcada

y los tiempos de la educación
naturalmente son otros.

Entonces poder tener un ambiente
en donde se pueda probar,

donde se pueda realimentar el sistema,
donde se pueda rectificar en caso…

Es como una manera de poder,

no llegar al ideal de pronto de
acompasar esos dos tiempos, porque

son de por sí diferentes, pero sí
que se pueda beneficiar

y que se puedan contener los riesgos
también, que los hay.

Y vos decías, Isabel,
parte del proceso de llegar hasta acá

implicó entregar dispositivos.

Pero ¿alcanza con entregar dispositivos?

¿Qué otras cosas? No alcanza.
Leandro se ríe, no alcanza.

Lo que pasa es que acá se sigue
materializando esta alegoría

o esta metáfora que usamos
de la maratón perpetua, ¿no?

O sea, esto de, en tecnología
y en tecnología digitales más,

está la meta, uno va trabajando
por, no sé, por ejemplo,

acortar la brecha digital
con respecto a algunos aspectos,

la brecha en acceso a dispositivos,
en acceso a internet, pero después

llega la inteligencia artificial
generativa de manera

masiva al sistema y tenés una nueva
potencial brecha digital que atender.

Y, bueno, tenés otros desafíos.

¿Qué pasa con el tema dispositivos?

Bueno, los dispositivos al final
del día; veía hace unos días

una campaña que lanzamos
para los docentes en la que se refuerza

esta idea de que los dispositivos
son un medio,

son un medio, son una ventana,
son un vehículo para poder lograr cosas.

En definitiva, ¿qué es
lo que nosotros estamos haciendo

cuando estamos poniendo dispositivos
en manos de los estudiantes?

Estamos poniendo poder computacional
en manos de los estudiantes

y estamos poniendo una
ventana a la información

en manos de los estudiantes
a través de internet.

Y estamos poniendo, además,
un tipo de dispositivo

que favorece determinadas habilidades.

Pero el tema es que no alcanza
con eso, porque hoy,

juntando esa capacidad
de las tecnologías digitales

más internet, el poder computacional
que antes solo estaba presente

en el dispositivo
se aumenta con la nube,

por ejemplo, y es bueno
que nuestros estudiantes

cuenten también con la posibilidad
no solo de tener el poder computacional

de su dispositivo, sino el de
la nube, para poder utilizar,

por ejemplo, tecnologías
como las asociadas

a inteligencia artificial,
que es grandes

procesamiento de datos,
aprendizaje automático

y más procesadores
al servicio de determinados proyectos.

Entonces no, la respuesta es no,
no alcanza con dispositivos,

no alcanza solo
con un tipo de dispositivo.

Tenemos que mirar el problema
desde una perspectiva más compleja,

que son los dispositivos
en un contexto determinado,

con una conectividad determinada
y con mediadores muy, muy preparados,

que son nuestros docentes,
al servicio de favorecer habilidades

que les permitan a los estudiantes,
apalancándose en esas tecnologías,

lograr sus objetivos.

Yo le agregaría también la dimensión
que también se viene haciendo

y que prueba que no
son solo dispositivos,

que es todo lo relacionado
con ciudadanía digital

y bienestar digital,
que es parte fundamental,

que no es tecnología en sí,
pero que es un acompañamiento

y unas habilidades que son
necesarias hoy en día

en nuestra vida, rodeada de tecnología.

Entonces es un ecosistema
completo que se necesita.

Y vos, Isabel, que una de tus áreas
es la innovación, ¿no?

Y todo proceso de innovación
genera preguntas,

inseguridades, miedos,
un montón de cosas.

Y esta explosión de 2022
generó preguntas en,

por ejemplo, en los docentes.

¿Cómo se articula
el trabajo en inteligencia artificial

con los docentes,
que, como decía Leandro,

son quienes están ahí,
son aliados, etcétera?

Bueno, ahí es un poco,
como veníamos diciendo,

los distintos frentes, ¿no?

Todo el frente de acompañar
a través de lo que

como el gran desafío que decimos:
alfabetizar, alfabetizar en lo que es

inteligencia artificial,
que se puede dar

a través de los programas
específicos que se vienen

manejando y ampliando para adecuarse
a este ritmo rápido de la tecnología.

Alfabetizar con distintos objetivos, con entender,

con entender el cómo lo uso,
pero con entender el qué es también,

el qué hay detrás de la tecnología,
el qué problema supone,

el qué riesgo supone,
obviamente que oportunidades también,

y para poder sacar
esos miedos, para poder,

un poco retomando una idea
que decía Leandro antes… A ver,

yo estoy convencida,
pero también estoy segura

de que no soy la única,
de que una excelente

docencia o un ingrediente muy importante
es el contacto directo

con los estudiantes.

Si pudiéramos conocer uno
a uno qué necesita,

qué feedback le tenemos que dar,
cómo se vino manejando,

en qué momento de su desarrollo
está con respecto a ese contenido,

bueno, sería genial.

También sabemos
que esto no es escalable,

o sea, no lo podemos llevar…
no tenemos los recursos necesarios

para hacer eso.

Entonces, ¿por qué traigo
esto de vuelta?

Por lo de los miedos que planteabas,
que sí, y por la idea

de acompañar al docente
y reforzar que no,

la función docente
no es la que está en juego.

Al revés, a los docentes los necesitamos
más que nunca

porque, además ahora de enseñar
en habilidades fundamentales,

en habilidades
de la inteligencia artificial,

como decíamos,
el qué y el por qué también

y el cómo funciona; además de eso,
tenemos que reforzar un montón

otras habilidades: las habilidades
de trabajo en equipo,

de pensamiento crítico, de uso responsable.

Entonces, para mí viene más de la mano
de acompañar al docente

en esta alfabetización y decirle:
tomemos las oportunidades

que puedan servir para de pronto,
trayendo algunos de los otros ejemplos,

alivianar algunas tareas
administrativas,

liberar más tiempo
para que este contacto directo

se siga manteniendo
y se siga garantizando.

Seguro tenés algo para agregarle.

A ver, la investigación
solo refuerza lo que traía Isabel.

El factor fundamental
en aprendizaje es la cantidad

y la calidad de interacciones
que tienen los estudiantes

con los adultos entrenados
para esos fines.

No hay más misterio
y es ahí donde se juega el partido.

Ahora, es cierto que estas tecnologías
les permiten a esos adultos entrenados

para esos fines poder ofrecer
mucho mejores resultados

y hay una gran diferencia
entre un docente

que puede aprovechar estas
tecnologías a favor de sus objetivos

y la de los estudiantes
y los que no, y en ese sentido

yo tengo mucha confianza
con respecto a los docentes

en general, porque cuando un docente
termina de identificar

“bueno, esto es muy importante
para las futuras posibilidades

de mis estudiantes”,
se arroja frente a eso y realmente

trata de controlarlo lo mejor que puede,
entenderlo lo mejor que puede,

pedir por todos los medios
las formaciones

que necesita para poder acompañar
mejor a sus estudiantes.

En definitiva, lo que esta
tecnología trae como desafío

también para la educación
son problemas viejos aumentados.

Son problemas que ya teníamos
pero, claro, fuertemente aumentados.

Los problemas que antes
de plagio eran chiquitos,

con esto son bastante más
voluminosos, los problemas

con respecto al desarrollar
las habilidades propias

y no tercerizarlas
en una máquina también,

pero lo eran antes, y ya lo eran con,
bueno, los buscadores,

lo eran con la posibilidad
de pedirle a alguien más que te hiciera

las tareas. O sea, seguimos
con los mismos viejos problemas

de la educación un poco magnificados.

Y en concreto a lo que
tiene que ver con el lugar

desde el que Ceibal se para
con los docentes,

es esto de ser una agencia de innovación
con tecnologías al servicio

del sistema educativo
y encontrar tanto sea en la formación

como en la disponibilización
de tecnologías, como en asegurarnos

que la innovación
esté equitativamente distribuida

en el territorio nacional, y que no
alcanza con que Ceibal sea innovador

para que el sistema educativo
sea innovador,

sino que tiene que haber innovación
descentralizada

sucediendo en cada comunidad educativa
del país y para eso se necesitan

docentes que se arrojen,
que innoven, que indaguen,

que prueben, que rompan y que traten
de estar cerca de estas nuevas

posibilidades para ver cuáles
son las maneras de enseñar

en el siglo XXI y después.

¿Y si pensamos en los estudiantes?

Porque también se ha hablado
con este boom al que volvemos,

esta cuestión de “ahora lo importante
es saber preguntar”,

el prompt famoso, saber promptear,
hay que saber preguntarle,

porque la respuesta no es la misma

si uno pregunta bien que si pregunta mal.

Y también yo te escucho, Leandro,
y pienso: siempre fue ese

el quid de la cuestión,
pero ¿qué cambia?

¿Cambian cosas? ¿Cómo se trabaja
con los estudiantes en esto también?

Y bueno, cambia, desde un
momento en el que cambiamos,

como decía Leandro,
la escala del problema.

O sea, capaz que
siguen viejos problemas,

pero que vuelven a estar sobre la mesa
porque ahora están amplificados

en manos de todo el mundo.

Entonces sí, claro, es un objetivo en sí
ahora poder saber preguntar,

pero para yo saber si estoy
preguntando bien también tengo que

saber leer e interpretar la
respuesta que estoy obteniendo.

Y eso es lo que también
siempre ha sido un objetivo.

Y es más aún hoy en día un desafío
el fomentar ese pensamiento crítico,

el no me quedé con la
primera respuesta que me dieron.

Y yo lo que le agregaría también es,
que eso es parte del rol también,

del acompañamiento
que se les da a los estudiantes,

¿cuándo es seguro utilizar una
herramienta y cuándo no?

¿Yo soy capaz de, con los conocimientos
que tengo actualmente,

soy capaz de, sobre este tema,
interactuar con esta herramienta

y tomar la información que se me da?

¿O no voy a ser capaz de saber,
de comprobar la veracidad?

O la calidad de esa respuesta.

Ahí está. Porque todos sabemos,
hoy en día son muy coherentes

las respuestas que obtengo.

Entonces, me parece que viene
por ahí también, por continuar

y por redoblar los esfuerzos
en generar esas habilidades

de pensamiento crítico
y de también adaptar el uso

de las herramientas a la edad
que corresponda,

cuando el uso sea seguro,
y al contexto en que se usa.

Sí, yo creo que tiene mucho
que ver también con cómo

los estudiantes… Es una tecnología
que está ampliamente disponible

hace poco, digamos,
entonces tendrá que ir ubicándose

en el continuo de herramientas
de cada estudiante

y también para las particularidades
de cada estudiante.

Vos lo traías muy bien,
la pregunta siempre fue el asunto,

desde Aristóteles, Sócrates
para acá creo que ha quedado clarísimo

que la pregunta siempre fue
el asunto en educación y en aprendizaje.

El tema es quién la hacía,
en qué momento y para qué fines,

y creo que lo que va cambiando
es un poco eso.

Ahora tenemos que efectivamente,
si los estudiantes

se tienen que volver mucho mejores
en preguntar y en hacer preguntas,

pero no solo en hacer preguntas
a grandes modelos de lenguaje

para que les dé una respuesta,
sino en hacerle la pregunta al resultado

que le dio y decir “pará,
esta respuesta que me estás dando,

¿dónde pueden estar
los posibles… las posibles faltas,

dónde pueden estar los posibles sesgos?

¿Cómo fue construida esta herramienta
y qué le puede estar faltando

y qué lugar dentro de mi
jerarquía de información

y dentro de mi jerarquía lógica
le doy a este input

que estoy obteniendo, a este pedazo
de información adicional

que voy teniendo?

Y de nuevo la respuesta ahí está
en cómo los adultos a disposición

de esos estudiantes,
tanto en los centros educativos

como en el hogar, no olvidemos
que 70% de los aprendizajes

suceden fuera del centro educativo,
van a tener que poder apoyar en cómo

ir armando el modelo racional
en el que yo voy sopesando

todas las herramientas a mi disposición
para tener mis opiniones propias,

y eso es un proceso que se va dando

a lo largo de la vida y que
no deja nunca, además,

de ser un proceso
fundamental del ser humano.

Bueno, ¿cómo me hago preguntas,
cómo proyecto sentido?

¿Qué tanto estoy apoyándome
en estas herramientas?

¿Qué tanto son preguntas genuinamente
que salen de mí,

de mi curiosidad
y no de la que está dada?

Y ahí es donde me parece
que viene la clave

de cómo formar a nuestros estudiantes
para, en ese contexto

de esas tecnologías,
aprovechar al máximo sus posibilidades

y continuar desarrollando
las habilidades

que son críticas para
su proyecto de vida feliz,

que es, en definitiva, poder hacerse
preguntas, poder encontrarse,

poder aprender, poder persistir,
poder soñar, poder imaginar.

Ahí es donde está, me parece, la clave.

Bueno, Leandro hablaba de
cómo funciona la familia en esto

y ¿hay también en este proceso
que incorporar a la familia?

¿De qué manera, Isabel?

La respuesta creo que sí,
que sin duda que sí,

que la formación es un proceso
integral y cuando hablábamos

hace un ratito de alfabetización
y de qué es inteligencia artificial

y de entender cómo
podemos beneficiarnos,

cómo tenemos que prepararnos,
cómo tenemos que mitigar

los riesgos, ahí también
podemos hablar de alfabetizar

también a la familia para el
crecimiento personal de cada uno

y para vivir hoy en día,
como estamos rodeados de tecnología

de cada uno, pero también
para acompañar a sus hijos

o hijas en este proceso, entonces sí,
y también como traíamos los que decíamos

antiguos problemas
que hoy están sobre la mesa,

bueno, todo ese acompañamiento
y ese trabajo en pensamiento

crítico, en cómo nos enfrentamos
frente a la unicidad

de las cosas que hacemos,
bueno, esos valores

que llamamos a veces
van mucho por el lado de la familia

o del entorno que tenga el niño
y la niña fuera de la escuela.

¿Y cómo se trabaja
en estas cuestiones en Ceibal?

¿Cuáles son los programas?

Nosotros lo que procuramos
es entender que los aliados

para trabajar con los
estudiantes son múltiples

y tratamos de llegar a cada
uno de ellos de manera diferente.

Por lo pronto, una de las primeras
cosas que hicimos durante,

por ejemplo, la pandemia,
que fue un momento

en el que tuvimos que recurrir
muchísimo a la familia,

fue crear un área de experiencia
de usuario dentro de Ceibal,

que tiene que ver con, más allá
del título, tiene que ver con entender

a nuestros públicos, a las personas
que usan nuestras soluciones,

entender qué les está pasando,
qué les duele, qué quieren resolver,

cuál es la manera como se están
aproximando a la tecnología

y cómo nosotros les
estamos dando respuesta

en cada una de las áreas.

Primero y principal es eso: entender,

y en eso estamos haciendo mucho esfuerzo.

Lo siguiente tiene que ver
con informar y colaborar.

Nosotros el siguiente mecanismo
que utilizamos muy a menudo

es asociarnos con socios
que están en los temas

y que están todos los días
con esas personas.

Por ejemplo, en el área de información,
fake news, formación de audiencias

y demás, estamos colaborando
con los medios gráficos más importantes

o más populares en trabajar en concreto
cómo nos informamos,

cómo deberíamos informarnos,
cómo se ve una noticia cierta,

cómo se ve una noticia
falsa y por qué es importante

que yo pueda decir la diferencia,
que eso es lo otro que es fundamental.

Lo mismo tratamos de hacer
en todas las áreas,

en estándares de educación.

Lo mismo tratamos de hacer
también en inteligencia artificial,

donde colaboramos con
organizaciones prominentes en el área

que están tratando de ver esto
mismo: “Bueno, ¿cómo hacemos

llegar inteligencia artificial
de manera segura a educación?”.

Es cierto que va a ser una tecnología
que va a cambiar muchas cosas,

pero hay maneras de aprovecharla
a favor de los aprendizajes.

Y lo otro tiene que ver con el informar.

Bueno, poner información
de calidad a disposición.

La inteligencia artificial es bueno
juzgar en el momento en el que estamos

por la cantidad de gente
que piensa que es magia.

En la medida en que la gente que piensa
que la inteligencia artificial es magia

o es mágica disminuya,
estamos en el buen camino.

Porque si nos relacionamos
con esta inteligencia

desde un lugar supersticioso,
estamos entregándole todo el poder

no solamente a esta tecnología,
sino a las personas

que desarrollan esta tecnología.

Estar informado, poder usarla,
usarla a mi favor

da un nivel de soberanía tecnológica
que es el que en definitiva Ceibal

procura ofrecerle al país.

Ceibal está trabajando
por ofrecer autodeterminación

digital al nivel
de los sistemas educativos

y básicamente eso
es lo que procuramos hacer.

Las familias tienen un rol fundamental
en esa autodeterminación digital.

Si ellos no son empoderadores,
facilitadores de que sepamos

que estas tecnologías están al servicio
de lo que queremos construir,

entonces vamos a tener
un problema más grande.

No alcanza solamente
con lo que pasa en la escuela.

Se trabaja también mucho en territorio.

Ceibal tiene, o sea, estamos
acá muchos, pero también

muchos trabajadores
y trabajadoras en territorio

que son como ese feedback,
ese termómetro o sensor

que también puede devolver
hacia aquí las cosas que están pasando,

las preocupaciones que están habiendo
y los problemas que hay que atender.

Entonces es como parte del sistema.

Es que yo iba a ir ahí,
porque un poco aparecieron algunas cosas

durante esta conversación,
pero me gustaría saber, Isabel,

qué acciones, qué planes,
qué trabajos concretos,

en qué está trabajando… esto que vos
decías de probar cosas, ¿no?

¿Qué cosas están pasando en relación
con la incorporación de inteligencia

artificial al proceso educativo?

Te lo podríamos contar, pero no sé
si te podemos dejar salir de acá.

Es verdad que contamos ya más
de los programas

que hay de cara a los beneficiarios,
pero no nos hemos metido nada en bueno,

en qué estamos investigando.

Bueno, tenemos varias,
varias líneas abiertas

y varios proyectos en curso.

También, como decía Leandro
hace un rato, en realidad

en Ceibal en particular, bueno,
en varias áreas dentro de Ceibal,

desde 2017 podríamos decir
que venimos formando,

tenemos profesionales que se vienen
formando en inteligencia artificial.

Entonces, desde ese punto de vista
estamos preparados,

aunque siempre, como siempre decimos,
cuanto más aprendemos,

más sabemos que nos queda por aprender.

Pero tenemos esas capacidades internas.

Entonces, a ver, me voy a organizar
porque hay bastantes cosas.

Por un lado, hablando
de capacidades internas,

estamos todos en un plan interno
de hacer esa alfabetización

que hablábamos hoy
de inteligencia artificial

de cara a estudiantes,
docentes y público en general,

sociedad en general,
también a la interna.

Estamos en un plan de capacitación
de todo el personal

en inteligencia artificial
ocurriendo este año,

sin distinción de áreas técnicas,
no técnicas: de todo el personal.

Estamos también desarrollando proyectos
en línea con partes operativas,

porque Ceibal es una gran institución
que tiene grandes posibilidades

de beneficiarse
de la inteligencia artificial,

y también, para hacer más
de lo que nos interesa acá,

de cara a la educación,
como ejemplo de cosas

que están muy en curso,
así como decía Leandro,

cosas que están en proceso, que no son,
que no es que van a salir

mañana, porque los procesos
de investigación, bueno,

algunos llegan a buen puerto,
otros se quedan por ahí,

pero habremos aprendido.

Tenemos algunos proyectos relacionados
con esto que decíamos de asistir

a los procesos más
administrativos de aprendizaje,

por ejemplo, hay programas
de Ceibal, como ser PC,

Pensamiento Computacional,
y Ceibal en Inglés,

que se dan a través
de videoconferencias,

con intervenciones
de docentes tercerizados

y hay toda una evaluación
que existe de esos programas

y de si se están realizando
correctamente, de cómo es el nivel,

de las interacciones que hay.

Entonces, estamos desarrollando,
y este proyecto es en colaboración

con la Universidad de la República,
herramientas para facilitar

la evaluación automática de
todas esas horas y horas y horas

de videoconferencia, que permiten,

como siempre, no sustituir
la evaluación humana,

pero sí facilitar el proceso.

De pronto discernir en dónde
hay que focalizar la atención,

por ejemplo, por traerlo
muy, muy a tierra,

cuántas interacciones
hubo de docentes y estudiantes,

qué tanto tiempo de palabra
tuvo el docente,

qué tanto tiempo de palabra
tuvo el estudiante,

qué temas se tocaron, qué tanto
se habló; si estamos hablando

de Ceibal en Inglés, qué tanto se habló
en inglés, qué tanto se habló en español.

Son todos indicadores que se
pueden sacar de manera automática,

es el objetivo de este proyecto, por ejemplo,

y que permitan a quien
hace la evaluación

poder ir rápidamente al grupo
que es de más interés para evaluar.

No sustituir, sino agilizar.

Eso más de cara a la parte
más de gestión.

También tenemos otro proyecto,
más de cara a la educación directamente,

por ejemplo, la evaluación de lectura,
que se pueda de manera automática.

Existen aplicaciones de esto, pero bueno,

tras estudios de lo que
existe en el mercado,

lo que queremos, lo que nos parece bueno
para el sistema educativo,

se desarrolló un proyecto,
de momento está en modo de prototipo,

pero nuestras etapas
son siempre ir de menos a más,

pero con bloquecitos
que luego permitan construir

lo grande, que permita
de manera automática y que pueda

finalmente ser vista,
por ejemplo, de manera lúdica,

el aprendizaje de la lectura, por ejemplo.

Como esos proyectos que son
más técnicos a la interna,

también tenemos proyectos,
por ejemplo, de escribir una guía,

un manual para educadores
y para directores de centros educativos

respecto de con qué intencionalidad
se puede utilizar la inteligencia artificial

y la gran diferencia que hay, hay un montón
de investigaciones en esa área también,

entre un directivo de centro educativo

que tiene una intencionalidad
concreta en el uso de la tecnología

o de la inteligencia artificial
y uno que no,

y lo que logra en su equipo docente,
y al mismo tiempo

de lo que traía Isabel,
que es muy importante

en esto de contextualizar
esta tecnología a la realidad uruguaya.

Ya trae sus propios sesgos,
trae sus propios problemas.

Bueno, por lo menos
carguémosle los nuestros,

nuestros propios prejuicios,
que nos ha costado tanto tiempo

crear acá en Uruguay,
pero que en definitiva

hacen un poquito más contextualizada
esa tecnología a la realidad.

Y más allá de la broma
del prejuicio, en definitiva,

los sesgos en inteligencia artificial
son muy parecidos

también a viejos problemas
que tenemos a nivel social.

Entonces, también son aspectos
que tenemos que mirar,

observar, estar atentos y corregir.

Y en ese sentido también,
desde el equipo de Isabel,

pero de muchos equipos dentro de Ceibal,
crear este espacio seguro

que es efectivamente
tecnológicamente un espacio seguro,

es decir, en una plataforma,
un lugar donde hay otras plataformas

que se pueden usar y que están
cuidadas para que se puedan

utilizar en educación,
es parte fundamental del esfuerzo.

Y lo otro que es importante
es muchas de las cosas que…

todavía no sabemos lo que no sabemos.

Y entonces es muy importante
que podamos seguir experimentando.

Y es parte de la ventaja
de tener una organización

como esta que se puede permitir
hacer estas pruebas

y colectivizar los resultados.

Y compartir lo que aprende.

Muchísimas gracias a los dos, Isabel,
Leandro, por ser parte de esto

y me quedaron ganas de seguir.

Muchísimas gracias.

Gracias.

Bueno, hasta la próxima entonces.

“Aprendiendo del futuro”,
un pódcast de Ceibal.