Cuando Ella se despierta sintiéndose mal, se encuentra transportada a un jardín resplandeciente lleno de maravillas más allá de sus sueños más salvajes. Guiada por un pequeño panda llamado Bao Bao, explora este reino mágico y aprende el poder de los deseos y la fuerza interior.
A medida que Ella viaja por el jardín de las hadas, su enfermedad se desvanece, reemplazada por la alegría y una nueva vitalidad. Un anillo mágico sirve como recordatorio de que lleva esta magia sanadora dentro de ella, siempre.
"Cuando te sientas mal, solo recuerda el jardín de las hadas y sabe que pronto te sentirás mejor".
Disfruta de cuentos suaves e imaginativos diseñados para calmar y captar la atención de los más pequeños. Cada historia utiliza un lenguaje sencillo y cautivador, con temas reconfortantes, ofreciendo una experiencia de escucha sin anuncios ni interrupciones.
Se publica un nuevo episodio cada día, trayendo nuevas aventuras para hacer de cada historia antes de dormir algo especial.
Ãrase una vez una niñita llamada LucÃa que adoraba explorar el jardÃn detrás de su casa. Pasaba horas entre las flores, viendo bailar a las mariposas y escuchando cantar a los pajaritos. Una mañana, LucÃa se despertó sintiéndose malita. Le dolÃa la cabeza y tenÃa la nariz tapada. Tuvo que quedarse en cama todo el dÃa, perdiéndose sus aventuras habituales en el jardÃn. LucÃa se sintió triste mientras veÃa bailar la luz del sol en las paredes de su habitación. Esa noche, mientras LucÃa se quedaba dormidita, de repente se encontró parada en medio de su jardÃn. Pero algo era diferente - ¡todo parecÃa brillar con magia! Las flores eran más grandes y brillantes que nunca, y lucecitas de hadas titilaban en los arbustos. Mientras LucÃa exploraba este jardÃn encantado, notó una pequeña criatura sentada debajo de un girasol gigante. Al acercarse, ¡se dio cuenta de que era un pandita, no más grande que su mano! El pandita la miró con ojos amistosos. "Hola,"dijo LucÃa suavemente."¿Cómo te llamas?"El pandita sonrió."Soy Bao Bao,"respondió."¡Bienvenida al jardÃn de las hadas! Aquà es donde los niños enfermitos vienen a sentirse mejor."LucÃa estaba asombrada. Siguió a Bao Bao más adentro del centelleante jardÃn, maravillándose con las maravillas a su alrededor. HabÃa cascadas arcoÃris, flores cantarinas y árboles que daban manzanas de caramelo. Por donde mirara, la magia chispeaba. Mientras caminaban, LucÃa comenzó a sentirse mejor y mejor. Su nariz tapada se destapó y su dolor de cabeza desapareció. Se dio cuenta de que simplemente estar en este lugar especial la estaba sanando. Finalmente, llegaron al centro del jardÃn. Un grupo de animalitos amistosos jugaban alrededor de una fuente centelleante, cuya agua brillaba como luz de estrellas lÃquida."Este es el Pozo de los Deseos,"explicó Bao Bao."Si pides un deseo aquÃ, te ayudará a sentirte mejor cuando despiertes."LucÃa cerró los ojos y pidió de todo corazón volver a estar sana y fuerte. Mientras lo hacÃa, una ola de felicidad la inundó. ¡Cuando abrió los ojos, se sorprendió al ver un hermoso anillo encantado en su dedo! Destellaba con los colores del arcoÃris."Este anillo te recordará la magia que llevas dentro,"dijo Bao Bao con una sonrisa."Cuando te sientas malita, solo recuerda el jardÃn de las hadas y sabe que pronto te sentirás mejor." LucÃa abrazó a su nuevo amigo pandita, sintiéndose llena de alegrÃa y paz. Luego sintió que sus párpados se volvÃan pesados mientras el jardÃn comenzaba a desvanecerse. Momentos después, LucÃa se despertó en su cama, con la luz de la mañana entrando por las ventanas. ¡Se sentÃa renovada y sana, su enfermedad completamente desaparecida! Y ahà en su dedo estaba el anillo mágico del jardÃn de las hadas, reluciendo a la luz. LucÃa sonrió, sabiendo que siempre llevarÃa un poquito de magia con ella. Cuando se sintiera mal en el futuro, solo tendrÃa que sostener el anillo y recordar el lugar encantado que la habÃa ayudado a sanar. Con el corazón feliz, LucÃa saltó de la cama, lista para un nuevo dÃa de aventuras.