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Si se queda dormido escuchando La Venganza Será Terrible por la radio, ahora también podrá quedarse dormido escuchándolo a cualquier hora en formato podcast.
En lavenganzaseraterrible.com puede encontrar los episodios, etc.
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La venganza será terrible. Buenas noches, amigas, amigos. Empieza la venganza, será terrible en este mismo instante. Los periodistas, humoristas, creadores, escritores, músicos y artistas que son Patricio Barton y Gillespi, están en este momento examinando la biblioteca de la radio. No hay tantos libros. La verdad es que yo esperaba una biblioteca... La historia de la radio de Ulanowski... Pero hay dos ejemplares del mismo libro. Hay dos ejemplares. Que no los regalaron, porque eran regalos para oyentes que no vinieron a buscarlos. Está bastante flojista la biblioteca. ¿Por qué hacen eso? Hay oyentes que ganan premios y no los van a buscar. No, por ahí vienen... Es un problema de las radios. Es un problema de los premios, evidentemente. No, bueno, pero... Pero si yo soy de Montegrande y gano un Compact Diss, y ir a buscarlo a la radio. Pero no participe. Pero el oyente es ancurriento. Claro, después se ganan entradas para un espectáculo teatral, por ejemplo, y después no van. Y quedan las dos butacas vacías. Las dos quedan 800 vacías. Bueno, pero esas dos que eran para regalar a otro. Igual no sé por qué estoy hablando de esto. Está hablando de esto porque en la biblioteca hay solo dos libros. ¿Sabes lo que regalaban antes en la radio? No, un compact disc, un auto. Sí, señor. En otras épocas. O'Dol Pregunta por 500.000 pesos. Eso era un premio. Eran pesos muy fuertes. Eso era un premio. Y la de Montegrande para buscar un... Bueno, señor, no lo llamó nadie. Una entrada de un espectáculo de cuarta categoría. No, no, señor, como este. ¿Y entonces para qué se... No regalamos nada a nosotros. No. Hablando de regalos... No sé qué decir. No, sí, bueno. ¿Qué? ¿Que quiere recibir un regalo? No. Iba a agarrar para el lado de los tomates. Sí. Iba a dar información falsa. Esa es la verdad. ¿Usted sabe que ahora que dijo tomates, yo la única vez que gané una rifa? que de algún modo es un regalo. No digo que... Sí, es un regalo. Una lata de tomate. Gané un blister de latas de tomate, como por ejemplo 30 latas de tomate. Una fortuna hoy. Hoy era una fortuna. Yo llegué muy contento a mi casa, era un niño, y digo, mira lo que me gané, mira lo que me gané. Yo gané un despertador. Mucho menos que las latas. Yo nunca gané nada. Hace muy bien. De todos modos no entremos también en esto. Claro, ¿qué ganas? El material central de los contenidos radiales. Sí, bueno, pero... Por ejemplo, ¿usted ganó algo alguna vez en una rifa? Sí, y ahí empiezan los 37 panelistas a contar historias como esta que acabamos de contar nosotros. Sí, nos puede llamar y decirnos qué ganaron en una rifa. Hay unas cosas que se han hecho inevitables en los últimos tiempos. Una, a favor de las circunstancias económicas y políticas del país, es salir a la calle un cronista y ponerse en una estación de ferrocarril preguntar a la gente cuánto pagó por el boleto. O si no, ir a una verdulería y preguntar cuánto vale el tomate o a una carnicería y a ver cuánto vale el azotillo. y eso durante horas, horas, termina un programa y empieza otro, con otro conductor, hacen lo que se llama el pase, el pase, que es que no saber exactamente dónde termina un programa y dónde empieza el otro, cosa que la radio y en la televisión me atrevo a decir también, debería ser como un abismo Debía ser un hachazo inconfundible. Es un estuario de programación que queda ahí mezclado. Y queda ahí, entonces, ya habla... El tipo de programa que acaba de terminar, habla con el que le va a empezar... No funciona eso. No, claro que no funciona. ¿Sabes por qué no funciona? Porque es el que está terminando su programa. ya desagotó todo lo que tenía, el buen humor, el carácter, la información. Se quiere ir a la calle. Y el que recién viene, quiere abusar del que se va haciendo lo que dar tiempo. Es que a veces lo usaban, no nos vamos a poner muy técnicos, a la gente que le importa. Bueno, pero cuando uno tenía mucha audiencia y el otro no. Claro, es para heredar la audiencia del programa más fuerte. La idea central al comenzar la frase termina un programa y empieza otro, era que el otro que empieza hace lo mismo que acaba de hacer. Haciendo con las mismas notas en televisión. A veces con el mismo tipo que sigue ahí en la estación casero, preguntando al tipo que baja del tren a ver cuánto les cobraron, o vuelve esto, o lo que sea. Es un poco descorazonador. Sí, sí. Y si uno, por ahí es televidente de canales o de radio que aparentemente tienen un derrotero de pensamiento, que piensan en un sentido que uno espera que lo hagan. esa especie de argumentación... puede producir fatiga intelectual. El tipo que va buscando una opinión seria acerca de el alcance del Estado, cómo la destrucción del Estado puede modificar nuestras vidas, qué se puede hacer para resistirla, invertirla, evitarla. Por ahí, hay mucha gente que puede tener ese deseo de ver una luz en el camino. Y por ahí, la iluminación del tipo que acaba de comprar una lata de tomate es insuficiente. Nada más que esto. Por ahí hay gente que le gusta. No, y además esto de sumar capas de una misma cosa. acopiar sin conexión entre las cosas. Eso es lo que genera también fatiga intelectual. Aburrimiento genera también. Yo que no sé nada. Cierta vez me invitó un estupendo periodista que no voy a nombrar. Tuvemos un diálogo un poco desagradable. hubo un señor, alguien de la calle, que manifestó una opinión sobre el entonces presidente Macri, creo. Sí. Y entonces este periodista me preguntó qué me parecía la opinión de ese señor que había opinado, incluso creo, en presencia del propio Macri. Y yo le dije que nada, que no me parecía nada. Por ahí uno estaba buscando otras clases, pero no es que uno... Sí. No se trata tampoco de hacer aclaraciones y peticiones de disculpas todo el tiempo. Pero no es que a mí no me importe lo que piense un señor de la calle. Pero en realidad no es lo que yo estoy esperando cuando me sitúo como espectador a ver algo que satisfaga mi curiosidad intelectual. Entonces, lo que había dicho el tipo, que era verdadero... Aunque no brillante, la verdad es que no me interesaba. Y así se lo hice saber a este periodista. Y a partir de ese momento tuvimos un desencuentro. Porque esas otras dinámicas de los programas, de los noticieros, que uno opine de lo que dijo el otro anterior... Claro, porque de eso sacan un recorte. Pero lo más triste de todo eso, que ya no son los de los programas. sino también de los legisladores, por ejemplo, de los políticos, los diputados en sus discursos, buscan la frase que van a usar para el recorte en las redes sociales, y está todo contaminado así, todo contaminado. Y cuando hay alguien que puede argumentar que se necesita más tiempo de algo más largo, porque no hay manera, no tiene ningún tipo de cobertura de nada. Entonces, caen en eso. Bueno, ahora hay algo que se está usando mucho en las redes sociales para invalidar un argumento que es mucho texto. Sí, sí. Usted cuenta un episodio con lujo de detalles que es gravísimo y es invalidado por los seguidores diciendo mucho texto. Como que no lo quiero leer. Sí, habrá espavadas, sí. Bueno... Después de escuchar este dictamen, vamos directamente al tema que nos encomendó la Dirección de la Paz. Que me imagino que después de toda esta perorata debe ser un tema muy profundo. Muy profundo. Y con texto. Sí. Cual cule que se trata de 15, quizá menos, novedades tecnológicas para el 2024. Me da miedo. Me da miedo, porque ya no las cosas que están inventando. Usted porque le tiene miedo a la tecnología, como cualquier persona. Pero sí. Sí, siempre la tecnología provoca miedo. Imagínense, en casa habían comprado cuando yo era chico una pava eléctrica. Sí. Y bueno, algunos de mis parientes... Había pabaeléctricos. Pioneros, le digo. Bueno, miraban aquel artefacto con cierta prevención. ¿Qué le parece? No se acosa que me vaya a tomar unos mates y termine fulminado. Claro. Y salimos en todos los días. Yo lo he pensado, digo, por ahí transmite la electricidad al agua. Había unos calentadores, ¿se acuerdan? Que se enchufaban y eran como un... que calentaba. Sí, se ponía el rojo vivo. ¿Qué eso era, Pérez? Esa tecnología te ponía al borde de la muerte tres o cuatro veces por día. Vamos a ver qué es lo que fue con esto. directamente vamos al primero. Lentes de realidad aumentadas. Ah sí, ya están. Eso ya están a la venta. No me digas que usted tiene puesto esos anteojos. No, es muy aparatoso el aparato, valga la redundancia. Pero sabe una cosa que en la prueba piloto que mostraron, usted por ejemplo tiene una novia... Ajá. Sí, es verdad. No, señor, por favor. No hablo de usted en particular. ¿Y le aumenta la realidad? No, no sabe lo que es. No. Usted le puede, dirigiéndose a ella corporalmente, como está en una habitación, usted le puede poner la cara de Angelina Jolie. Y el cuerpo. ¿Qué quiere? Proyectado en eso. Esto es cambiar las reglas del amor. Sí, sí, de todo. Usted le pone el cuerpo y la cara que quiera. Y ella también le pone... No, mira usted. Si tiene los anteojos, ella ve que usted... A mí también me viene bien, digamos. No como usuario de las jafas, sino como novio de la usuaria. Bueno. Bueno, entonces, ¿para qué...? Cuidado, porque esto puede terminar con muchas industrias exitosas. ¿Cómo cuál? Como... la cosmetología, la medicina, todo lo que uno hace para estar más flaco, para lucir mejor, para acomodarse el pelo, todo eso va a decaer. ¿Para qué quiero yo gastar plata? en mejorar mi aspecto, si con los lentes de esos se los doy a cualquiera, a mi novia de toda la vida, y listo. Ni ella ni yo tendríamos posibilidades en el bailongo, en el real. Entonces, ingresamos al mundo de lo virtual y todos contentos. Claro, es un mundo de fantasía. Es nuestra última esperanza. El engaño es la última esperanza. hemos hablado muchísimo aquí, en este programa, acerca de la ínfima calidad de nuestras percepciones, que son, en casi todos los casos, equivocadas. El cielo no es celeste, el calor no existe, el sol es más grande de lo que parece, etcétera. Creo que... vamos a recibir y vamos a tratar no de mejorar las percepciones que tenemos para ver lo que verdaderamente es, sino al revés, empeorar nuestras percepciones o dirigirlas ya no a la búsqueda de la verdad, sino a la búsqueda de un engaño placentero. ¡Sí! ¡Cuidado! Claro que cuidado, lo que acabo de decir es tremendo. Por favor, que cuidado. Es tremendo, yo casi suspendería el programa. Por favor, pero ¿qué pasó? Yo creo que hay que parar la pelota. Yo creo que en la revolución industrial algunos tipos rompían las máquinas. Sí, claro. Bueno, me parece que hay que empezar a romper. Algunas cosas va a haber que romper. Bueno, el otro día entrevistaron a un líder tecnológico, un guru de la tecnología. y le hicieron la pregunta si él tuviera la posibilidad de apretar un botón y borrar de cuajo todas las redes sociales. Y él fue uno de los creadores. El tipo dijo que, sin dudarlo, las eliminaría. Sí. No, justo hoy tiene que ser eso. No, bueno. Acabo de mandarle un mensaje. Listo, no llegó a una mina que me tiene que contestar. No, justo la va a definar. No quiere decir si el tipo te aprieta el botón y no me lo lee la mina. ¿Cómo quedo? Porque es el cumpleaños. Bueno, eliminado el mensaje. Bueno, señores. Entonces, lentes de realidad aumentada. gafas especiales que te permiten ver información adicional sobre el entorno que te rodea. Esto no es exactamente lo que me dijo usted. Esto es otra cosa. Que es información, yo miro una mina y abajo me sale cómo se llama, cuánto pesa, con quién anda. Pero también tiene otras funciones, por ejemplo, al ir caminando por la calle, cada vez que cruza una calle le aparece dentro de la visión un cartel que dice cangallo. con uno, dice Gil, lo pone sobre aviso a usted. Sí, es así, pero también puede ver, por ejemplo, a través de las paredes, usted dice a ver si hay una pérdida de agua y hay un caño roto y usted ve dónde está la pérdida. No, eso no se lo cree. Eso va más allá de un simpliante, ojo. Eso se puede ver. ¿Qué pasa con los plomeros? ¿Sabes cuántos millones de plomeros hay en la Argentina? ¿Cuántos? No lo sé, se lo estoy preguntando. Entonces, para qué me venemos acá. Pensé que usted traía el dato. Estamos con un informe. Bueno, van a quedar en la calle. ¿Para qué voy a llamar a un plomero que me cobre un potosí por descubrir la rotura del caño si estos simples anteojos que tengo aquí me lo informarán al instante? Sí, pero no lo arregla. Sí, pero usted no lo arregla. Le informa, pero no lo repara. es más valiosa detectando la falla que reparándola. Es verdad que el plomero que vio que al primero le... Lo mismo el médico. Bueno, sí también. El médico por qué cobra tan caro? Porque es el que se da cuenta supuestamente. El diagnóstico. El diagnóstico, lo que usted tiene. Después curarlo es fácil. O imposible. Bueno, vamos a seguir adelante. Por favor, me da miedo igual. Dice, tatuajes temporales de pantalla. Ya hay tatuajes temporales. Son las cosas que uno se dibuja con un lápiz. Cuando yo era chico, había un chicle. Comprábamos un chicle que venía con un papel y le ponían un poco de saliva. Y te quedaba fenómeno. Después te lavaba y a las tres, cuatro lavadas ya no lo veías más. Ese chicle tenía el mejor sabor que nunca volví a probar, pero duraba... Lo que una flor. Diez segundos el sabor. Cada vez duran menos los sabores de las golosinas. Pero los chicles siempre estuvieron ese carácter efímero. Y yo creo que era propiciado por el fabricante. Claro, claro. Igual a cinco masticadas ya aflojaba el sabor. Entonces, usted se mandaba otro y se le hacía más chicle. Claro, se metía otro en la boca, que por unos breves segundos lo hacía más sabroso y después también decaía, hasta que usted tenía toda la boca llena de una pasta gomosa, sin gusto a nada. ¡Señor! Bien. a tatuajes temporales. Dice acá, es una tecnología que permite proyectar información visual en la piel, similar a un tatuaje temporal para mostrar datos de manera temporal. Se terminó el colegio. Bueno, pero usted quiere terminar con todo. Claro, se lleva todo. Claro, no se puede tomar examen a un alumno. Olvídese el examen. Si hace un tatuaje de toda la lección. y el tipo hace así, se lee el codo... Sí señor, y... Sí, desaparece... Para no hablar de otros aparatejos que ya deben estar para el estudiante fraudulento... Hay unos mini auriculares que no lo ven nadie... Todo eso, te recibiré de abogado en tres meses. Bueno, no sé si tres meses, pero... Dice... Realidad olfativa. Ah, bueno, cómo me gusta la palabra olfativa. En juegos. La capacidad de experimentar olores en juegos virtuales, por ejemplo, al truco. Usted grita flor y el otro le dice hasta aquí llegó el olor. No, sí, usted huele. Está en ambientes, por ejemplo. ¿Y cómo es esto? ¿Qué es realismo? Eso se propone a una experiencia más realista. Se propone al cine. No sé si se gana mucho. Más bien lo que se pierde, imagínese. Yo creo que al poco tiempo va a decaer, como el cine en 3D. que resulta una apavada, que ya no hay... Un énfasis... A nadie le interesa. Un puntín innecesario. Y ya no está. Claro, la película de vaquero tiene un olor a bosta, que ya es de la presentación. Pero, púcheme, yo vengo de ver la película de amor y ha habido un olor a bosta también terrible dentro de la saga. Claro, porque transcurre en un granero. Ah, por favor. Entonces, usted está viendo esa escena erótica que yo, yo... Y... Nota el lujedor. Sí, para mí. Se da vuelta, espía ya, a escudriñar los rostros culpables de alguno de los espectadores vecinos. Y no, resulta que es una tecnología, señor. Lo que pasa es que no se está funcionando mal el software en la sala. Me parece que sí, salió un spray en la mitad de la película. Sí, está fallado. Está saliendo en todas las funciones. Vino el otro día, acá actúa Rolón, a las 9 de la noche. y empezó a salir el olor a Agosta en plena historia de Diván con Rolón y estaban todas las señoras del público. Y horrorizadas. Yo no sabía que Rolón era así. Yo me acuerdo que había una exposición de olores. ¿En dónde? Hace mucho tiempo. ¿Cuándo cundía? el arte más revolucionario, por los 60, 70, y ya cosas del instituto de Itela. Muy pop. Entonces hacían una exposición de olores. Entonces, el aroma, como dice usted, del incremento de los bobinos. Sí, bueno. el aromuno jasmínez o café, ala, unas tazas de capitón tenían un olor exagerado, digamos, un poco aumentado. Pero tiene problemas esta exposición. Primero... No se sabe bien dónde termina la influencia de una obra para dar paso a la otra. Claro, claro, claro. A veces mezclan los que dón't. Tiene que ser distintas salas. Sí, claro. Tiene que tener distintas salas o exhibir las obras en pequeñas cabinas. Claro, está muy bien. Usted meta la cabeza, como eso se acaba de decir. Puede meter la cabeza o puede tener una capacidad limitada para dos o tres espectadores. La exposición se llamaba Yo no fui. Ah, bueno, muy bien. Bueno, mira qué bien, qué bueno. Bueno, señores, ropa inteligente. Chao. Bueno, ahora estamos en problemas y la ropa más inteligente que usted, que la porta, vio que le va diciendo. Le va batiendo cosas, el calzoncillo le va diciendo cosas. La ropa misma le dice estupios. Sí, sí, si lo trata mal. Son prendas de vestir que incorporan tecnología para medir información, como el ritmo cardíaco. ¿Qué le importa a mi calzoncillo? ¿Cuál es mi ritmo cardíaco? Bueno, pero a usted sí, entonces... Claro, claro. Tiene razón. Brindando datos útiles sobre la salud y el bienestar, ¿podría ser... Podría ser. ¿Y cómo el estómago? Usted va corriendo... Pero ya existe. Esos corpiños que usan los deportistas, que usan una especie de sultián. Le dice todo. Y hay relojes ya también que le miden. Creo que hasta la presión también. Pero sí todo. Y le acabó de pegar cuando usted está esforzándose por encima de sus posibilidades. ¿Y los microchips que se injertan? Ni bajo la amenaza de una pistola. Le va largando. Hay unos... Yo no sé si acá se puede hablar de todos los temas. Sí, pero el mal. Si lo hablamos con respeto. De hecho, estamos hablando sobre temas muy ásperos. Hay unos microchips que son exclusivamente para las funciones sexuales del cuerpo. ¿Cómo? Para las funciones sexuales del cuerpo. que usted se lo hace instalar, tiene una instalación vamos a decirle. Es una manera de decirlo, estálemelo. Microcirugía es ahí. Es superficial, no es muy... No, no, muy adentro no se lo puede poner. No es muy invasivo quiero decir, porque bien que uno imagina quizás cosas invasivas que da miedo. Yo conozco una mujer que tiene puesto... Pero es para mujeres me parece. No voy a decir quién porque es una mujer... Pública. No, no es público. No por estatal. Ah. Si no por conocida. Que ese chip no solo le va dando información si lo conecta al celular, sino que le va mandando cosas hormonas, cosas que usted... Claro, le divela. ..de las que puede hacer uso. Y entonces tiene como una... No sé, será una performance superior. ¿Dónde se compra eso? No, no, no. Esto ya está. Bueno, yo tenía algo mucho más elemental que lo había inventado el nuevo. Ah, ¿sí? ¿Qué hizo? Ah, pero esto es genial. Usted nunca vio esos juguetes que eran como un termómetro, entonces usted lo tomaba entre sus manos y... el termómetro iba subiendo su indicador o cambiando de color y te decía cuán enamorado estabas. Ah, mire, qué bueno, no lo vi yo eso. Bueno, a eso yo me permití establecerle una medida. Ajá. Y acordándome de físicos... y matemáticos célebres que habiendo establecido una forma de mensurar algo, reclamaban que su apellido formara parte del nombre de la unidad de medida. Por ejemplo, el colombio, etc. Célsius, por ejemplo. a la unidad de medida del amor. Entonces, apretabas ese artefacto y te da 1.5 dolos. Parece más vinculado al delito, el dolo, ¿no? Sí, el dolo, claro. El dolo y la culpa son conceptos jurídicos opuestos en algún sentido. Bueno... ¿Y cuántos dolos es el máximo de enamoramiento? Y bueno... 100 dolos, por ejemplo, es... 100 dolos no se puede... El cero dolo es que usted no está enamorado. Sí. Entonces... 8, 9 dolos... Sí. ..es un amor normal. Bueno... Un novio cualquiera. Ya... Alrededor de los 20 dolos es un amor apasionado. Sí. más de 25 dólares debería intervenir la fuerza pública. ¡Ay, señor! ¡Por favor! Ahora, cuando usted mide eso con ese aparato, para hacer la medición, ¿se necesita de la otra persona? O usted puede estar enamorado y... No, esto le da su grado de enamoramiento. Ahora, claro, cuando usted se mide y mide, por ejemplo... 19 dólares. Y le dice a su novia, a ver vos, y la novia tiene 9 dólares. Usted dice, claro, yo te quiero más de lo que vos me quieres a mí. Es una de las peores cosas que pueden pasar. Pero es aquí algo peor. Y que es que la mina por ahí acuse 26 dólares. Pero no por usted. De otro. No se lo dice. Claro. Está enamorada de otro. Lo dice, ay, mirá, 26 dólares, qué se yo. Estábamos perfeccionando la posibilidad de que parte de la información fuera la identificación de la persona que hacía subir. la columna mercurio. ¿Y cómo hacen? Tienen que... Están trabajando. El cómo todavía no lo inventé. Claro. Pero hay cosas acá que son bastante más difíciles de hacer. Pero si ella no le dice nada, usted se queda con los 26 dolos y cree que está enamorado de usted. Sí, bueno, pero para creer que alguien está enamorado de usted necesita... algo más que la máquina. Y ahí está donde también el engaño sirve. Pero el engaño bien ejercido. Para mí el verdadero engaño es la persona que te dice que te ama. No te ama, pero... te abraza, te besa, te hace el amor, duerme con vos. Entonces lo ama. Entonces, por más que no te ame, si hace todas esas cosas y parece que te amara, yo digo, ese es el amor. Y sí. Y sí, muy preferible aquella otra forma de amor que quizá es verdadera. pero que no se traducen en hechos. Y la tipa verdaderamente te ama, pero te trata mal, no duerme nunca contigo. Bueno, me ama mucho, pero ¿cómo es esto? Quiere decir que hay que seguir adelante con la investigación. Tiene razón. Doctor. Ropa inteligente. Ya se... Bueno, muy bien. bicicletas inteligentes que generan energía equipadas con sistemas que convierten la energía generada durante el pedaleo en electricidad. Es más dinamo, vale 100 pesos. Eso existe desde... Es más viejo que... La lamparita funcionaba ya con el dinamo. El dinamo te trababa la rueda, había que pedalear y uno sacaba la... La luz con la bicicleta nunca se llevó bien. Yo tenía una bicicleta que tenía el farol torcido. Sí, muchas. Me llevaba siempre por delante el cordón de la vereda. Pero... Y por ahí iba siguiendo la luz. Tenía que enderezarlo. Hay que enderezarlo. Y pero la luz te va señalando el camino. Bueno, muy bien. Es una metáfora de tantas cosas lo que acaba de decir. Tenemos todavía algunas más. Generación de nubes artificiales. En el cielo. Sí, eso se está usando para... Para agregarle un elemento visual a los días soleados. Visual solamente o para tapar el sol. No, yo creo que... ¿Te sirve para vos o molesta a todas las personas? Voy a la Plaza de Mar del Plata y le hago un día nublado. Ya es un día nublado y le echa un poco de viento. ¿Usted sabe que están justamente experimentando...? No me acuerdo en qué país europeo. ¿Cómo no me acuerdo? Polonia. Polonia, seguro que Polonia. Sí, para mí es Polonia. ¿No se acuerda de un país europeo? Es Polonia. Es tan... No, creo que sea Polonia. ¿Por qué no cree? Porque no se acuerda. Porque su país... Si no fuera Polonia se acordaría fácilmente. ¿Qué tiene contra Polonia? No, no tengo nada. Y parece que sí. Y nosotros los polacos... ¿Qué? ¿Tiene algo? No, pero... Nos sentimos disminuidos por su discurso. ¿Fuiste a comer en la casa polaca de una vez acá? Ah, bueno, tendría que ir. A ver si se le pasan esos... ¿Usted comió alguna vez un pastel de polaco? ¡Claro! No, que... Perekos. El polaco tiene una dieta seca. Este... vainilla, gorfio... Pero ¿por qué? ¿Por qué? Huevos duros. Sin probar gotas de agua. ¿Están desarrollando un sistema de... una especie de techo? determinadas ciudades por el asunto del calentamiento global. Un techo artificial, que no es fijo. Es como una capa atmosférica nueva. Exacto, para evitar las temperaturas altas, que se quemen las plantaciones, etcétera. Claro, sería más fácil evitar el calentamiento global. Bueno, pero... Sí. A mí, sin embargo, la idea de un techo artificial... las ciudades, me resulta muy favorecedora de la felicidad. Hay vidas que se arruinan porque uno vive donde hay mucho viento. Bueno, usted porque no le gusta el viento, usted es enemigo del viento. Yo soy del club del viento, a mí me gusta el viento. Y bueno, váyase a mudar a otra ciudad. Váyase a Villagese. Pero Villagese no hay viento. Digo, viento, viento. Las gallinas ponen huevo, el mismo huevo varias veces. Pero mire, usted quiere techo para el calentamiento global y el problema es el efecto invernadero que empeora con un techo. Bueno, pero en olas de calor, como las que se están viviendo. Ahora me parece que si usted le pone un plástico arriba, va a ser más calor. Es como una media sombra. Filtra. Hace como el techo de... Capilla del Monte, que tiene la calle... Sí, en Córdoba. Tiene una calle... Tiene una calle techada. Todo de chapa. De chapa, sí, sí, me imagino. Y varias cuadras. Y cuando llueve no se moja. No, tampoco ve la sierra. No, nada. Claro, es ideal para una ciudad serrana. Sí, sí. No ve los árboles. Por favor. Pero bueno, es como estar en la Estación Constitución, pero allá. ¿Tiene algo? ¿Usted en contra de la capilla del monte? No, para nada. No, no, no. Parece genial el techo. Bueno, va a haber pirro robot. Los que nos faltaban. Y encima van a hacer sus disposiciones también en la calle. Sí, pero son de metal. Claro. Son bulones. La esa vieja pregunta, o tiene respuesta, bulones. Con habilidades avanzadas estos perros, ¿no? En realidad son dispositivos robóticos con forma de perro. que realizan tareas complejas como abrir puertas. ¡Ah! ¿Le parece una tarea compleja abrir puertas? Para un perro sí, es imposible. Pero para una computadora no. Claro, claro. Me compré una computadora. Por fin voy a poder abrir la puerta. Además que es la puerta mecánica, puerta automática. Ah, sí, cuando era chico me asustaba yo. Sí. Pasaba frente a la ferretería francesa. Me pasaban horas. pasando en una dirección y otra para que se abriera la puerta. Y bueno. Esto no es bien visto por los propietarios de la franquía francesa. No es para jugar eso. Claro, eso es lo que decía. Váyanse de acá que no es para jugar. Sí, sí. Máquinas de helados instantáneos, esto me encanta. Y eso sí, es genial. Dispositivos que producen helado de manera instantánea, proporcionando un placer dulce de manera rápida y fácil. ¿Qué tiene que ver? ¿Para qué quiero hacer helado en forma instantánea? Es raro. Y además... Y ir a heladería. Otro gremio que junto con los que ya hemos mencionado, plomeros, etcétera, va a quedar sin trabajo. Bueno, no sé... Y sí, son las 2 o 3 de la mañana, le agarro un antojo de helado, aprieto un botón y tiene un helado. Pero hay que ver la calidad del helado, ¿le va a salir un helado? ¿Y solo de la nada sale el helado? No, le tendrá que poner... Usted tiene que tomar la precaución de haber comprado un kilo de naranja, 6 kilos de azúcar, un vainillín... Leche, crema... Sí, se pasa, digamos, una hora y tres cuartos dando vuelta a la mano y es que después la máquina hace el helado de forma instantánea, pero prepararlo son dos... No, un sobre con un polvo y... Pero eso es... Eso no, eso se aprobé, no me gusta, señor. Y agua. Todo alimento que sea, un sobre con un polvo... Sí. Chao. Chao qué? Estoy saludando al heladero de un frente. Chao, señor. El polvo es algo que otro día diremos de los productos presentados en polvo. Aquí están bañeras inteligentes que ajustan la temperatura. Mira si yo me voy a gastar un potosí. Pero usted no quiere gastar nada. No, pero tiene razón. No puedo gastar en alguna cosa. En esa máquina que él me dijo que me va... ¿Qué dijo usted? Sí, los anteojos. No, a ver, los anteojos, por ejemplo, que le van mejorando la novia. Sí. O la máquina esa que le va... El chip sexual. Eso sí, pero una bañadera para que me caliente el agua. Si lo mezcla con la docadilla. ¿Qué me va a pasar si hago eso? Bueno, y en cuanto al perro robot... Bueno, está... claro, ¿para qué sirve un perro? es la pregunta. Bueno, pero yo creo que esto está orientado a niños, por ejemplo. Pero también niños robot podría ser. No, no, pero el niño que por ahí es toda una responsabilidad tener un animal verdadero. Hay que darle comer, hay que cuidarlo. Y ahí mismo tengo un niño verdadero. Bueno. Sí, pero es mejor que se vincule con un animal verdadero y no con otro. Está con el celular todo el día. Le dijo que es mejor. En la computadora todo el día. Sí, es un servidor. Por ahí viven en un departamento, tiene que estar el perro ahí en el departamento. Mejor un robot. Y encima se va a comprar un... Viven en un departamento y se compra un robot perro. Sí. Bueno, esas son las cosas. Espejos. Luces que cambian según tu estado de ánimo. Qué feo eso. Crea el humo. Y es horrible. Además te lo enfatizan. Claro. Cuando te sentís mal a lo mejor no te estás dando cuenta. Todo azul. Y uno que es un poco hipocondríaco. Claro. Cuando ves que se prende la luz roja. Sí, supongo. Si te sentís mal, se siente el doble de mal. Claro, uno se levanta la mañana y dice, bueno, hoy tengo que hacer tal cosa. Se pone en el espejo rojo. No, pero el rojo es la pasión. Bueno, el color que sea. El azul o medio violeta. Y finalmente espejos que ayudan a vestirte bien, que te dan consejos de moda, te dicen qué ropa se ve mejor en ti, como un asesor de estilo personal, robótico. Ya existen unas aplicaciones en el celular que usted se saca, por ejemplo, una foto. Usted está en calzoncillo, supongamos. No me digas. No, digo disculpo. Está en calzoncillo. Se pone una remera supongamos negra. y se apunta con la cámara selfie y... ¿A dónde? Usted se apunta a sí mismo y la aplicación le dice, por ejemplo, que eso puede ir combinado con un pantalón blanco. Pero necesita la aplicación. A más, queda horrible el pantalón blanco con la remera negra. Que es un tablero de ajedrez. Seguimos gastando plata de gusto. Es un asistente, un fashion asistente o algo por el estilo. Bueno, aquí termina el informe. que me pareció que va desde muy interesante hasta absolutamente insípido. Bueno, es un abanico amplio. Sí, sí. Es lo único que mantiene. ¿Sabéis una nueva cosa hablando de abanicos? ¿Qué les parece un abanico que se agita solo? Es el ventilador, ya lo inventaron. No, pero el abanico se mueve solo sin que usted tenga que hacer ejercicio de muñeca. Sí. Si me permite la expresión. No, no, está bien. ¿Sabe qué nombre le pondrían como difuerme? Abanico inteligente. Claro, a todo le ponen. A todo, a todo inteligente. Inteligencia artificial. ¿No vio los cantores que salen ahora por inteligencia artificial cantando tangos que nunca cantaron? Sí, sí. No se parecen ni por casualidad. Ni por casualidad. falta ahí la intervención de la inteligencia verdadera. Claro. La música es increíble. Increíble. Dice ahora Gardel va a cantar Garúa. Y usted que conoce más o menos la música, él está acuñido. Primero, se alarma porque la introducción es por una orquesta igual. a la que acompaña Gozeneche. Sí, y porque seguramente usaron la versión de la que la versionaron. No es que lo tocaron de nuevo y alguien cantó y calculó las formas estilísticas, el tempo, la clase de acompañamiento que conviene. No, agarraron algo que es un disco de Gozeneche grabando garuma, le cambiaron alguna frecuencia y lo pusieron así. Y sigue siendo Gozeneche. Lo que pasa es que la computadora identifica la voz del cantante, en este caso, Yeneche, y le reemplaza por el timbre de voz de Gardel. Como si cantar fuera eso. Claro. Bueno, claro. Como si cantar fuera una cuestión de timbre de voz o de registro. Claro. Ay, no, muchachos. Si esa es la inteligencia que me están prometiendo... No. Esmeren, yo no estoy en contra, eh. Estoy a favor de la idea de una inteligencia artificial. Por ahora, la inteligencia más bien es Kazani. Sí, pero le digo todavía. Todavía, claro, tengo esperanza. Yo no soy de su favor. Porque yo creo que eso es acedero. Sí, sí, sí. Que aparezca un cantante fallecido, cantando canciones de ahora, y a vos te parezca, que es el tipo. Yo creo que es acedero. que se puede hacer y que incluso hay los elementos tecnológicos. Bueno, hay que trabajar un poco más. Hay que trabajar. Si vamos a poner un disco de Charlo, le cambias el timbre y el tipo hace los guille de Charlo y no lo de él, es Charlo. Sí, sí. Es Charlo. Señores, creo que es hora de oír... la opinión de nuestros oyentes. ¿Mensajes de oyentes de carnibuesos, espero, reales? Espero que sí. No de inteligencia artificial. Hola Barton, Dolina, Aguiléspi, qué placer volver a escucharlos. Gracias por darnos tan lindos programas. Quiero solicitar una canción si me lo permiten. Será para mí un honor. Le da que elija la que quiera, maestro. Es la abuela del fondo que vive en Aedo, no pide, elija la canción que quiera. Muy bien, acá dice, soy Néstor de la Plata. Hiciera peligro a Dolina que cantara un poco del tango Infamia de Enrique Santos de Isepro. que también interpretara el mundo rivero, efectivamente, una gran versión. Muy bueno el programa, sobre todo la parte... la primera parte, un humor incomparable, es bueno poder reírse, bla, bla, bla. Muchísimas gracias. La gente que es brutal cuando se ensaña La gente que es feroz cuando hace un mal buscó para ser escliterecer su guiñol la imagen de mi amor y tu esperanza a mí que me importaba tu pasado si tu alma entraba pura un porvenir dichoso abrir los brazos a tu afán y con mi amor solimos de pasazos a vivir. Muy bien, muy bien. ¿Queres que cante un pedacito más? Bueno, bueno, a ver, a ver. Dice... Salimos de payasos a vivir entonces. Fue inútil gritar que quería ser buena fue estúpido aullar la promesa de tu redención la gente brutal y odia siempre el que sueña lo burla y con risa hace ceña su intento mejor Tu historia y mi amor desnudados en la feria bailaron su danza de horror sin compasión Un día lo vamos a cantar todo. No, ya no estoy... No es un tango muy transitado en este programa. No, lo cantan poco ellos. Uno de los más lindos tangos de Giseppu, es uno de los más dramáticos. Bueno, discúlpeme. Nos escribe Pablo de Barracas, dice, escuché en un programa viejo el informe de Los Corzos, y los quiero felicitar, fue extraordinario. No, no era un programa viejo. Sí, hace un tiempo. ¿Cuándo hablamos de esto? Tenemos que hablar otra vez de los coros. ¿Sabe lo que le sugiere? Usted debería haber aparecido con el disfraz de Dios, como en las puertitas del señor López. No me hables. O hubiera ganado el premio, dice. Estimados, por favor, envíen saludos a mi hija que vive en Trinilachi, en el estado de Río de Janeiro, que los escucha todas las noches. Y de parte mía para ustedes, Roberto de Golondrinas Chubut. Sí. Bueno, cariño para usted y para su hija que está ahí en Trinidad. Enzo Pagliuca escucha desde Italia, en la provincia de Treviso. Pero es nacido en Lomas del Mirador. Sí, pero apellido italiano. Con un corazón. Pagliuca. Enzo. Es de los más italianos que puede haber. Y de nombre Enzo. Ustedes son la parte más divertida... ¿De qué? Claro, no es clara de qué somos la parte más divertida. Bueno. Y en sus pensamientos más cultural, acá dice... de mi día a día. Ah, qué bien. Bueno, muchas gracias. De sus días. Dice, ¡viva las cuatro salsas! Nunca escuché una programa así. En Pancho, que las cuatro salsas. Sí. ¡Viva! Buenas noches, saludos desde la ciudad de Todos los Santos de la Nueva Rioja. Cuando vuelven por estos lados, recuerdo su última visita como si hubiera sido ayer. Fue ayer, señor. Era una parte de nuestros radiocines, que siempre hacíamos ese chiste. Alguien decía, pero qué hermosa que está Julieta Capuleto. Me parece que fue ayer que la tuve entre mis brazos. Fue ayer, fulano, dice la gente. Bueno, le pido al sordo, dice este hombre, Coplas del Base, del maestro Ramón Navarro. Un abrazo a todos. Aquí Walter que es de Santa Cruz, no a Clara D., que Ciudad dice... Dolina, lo consulto por... El libro, el diccionario de mitología grega y romana de Pierre Grimal describe al minotauro como un ser con cabeza de humano y cuerpo de toro al revés de como generalmente se lo representa Me voy a fijar ahora mismo. Dice, ¿por qué cree que esto se modificó? A ver. Es raro. Vamos a fijarnos ahora. ¿Acerca del Minotauro en el libro de Pierre Grimal? Sí, en el diccionario, a ver si es cierto lo que dice. ¿Qué casualidad que tiene el libro acá? Hay gente que está tratando de menoscabar la figura de, no sé si de Pierre Grimal o del Minotauro. Además que nada, menos que el Minotauro, que es una de las estrellas del diccionario. Sí, sí, por supuesto. Bueno, último mensaje. Soy Carlos de Colazo. ¿De dónde? Colazo. Debe ser muy lejos. Provincia de Córdoba, trabajo en seguridad. Estoy toda la noche. Gracias por estar. Hace diez años que me acompañan todas las noches. Le quiero pedir al maestro un pedacito del tango 1. Tiene que ser un pedacito de la más porque hemos cantado mucho. Bueno, ya está. Muy bien. Estamos muy disciplianos hoy. Sí, sí. Buenas noches, soy Constanza. Tú eres constanza, yo soy paciencia. Tú eres ternura, yo soy bondad. Tú representas la independencia, yo simbolizo la libertad. Escribo desde la capital nacional del carnaval, corriente. Este año, una de las comparsas tenía un personaje representando al Papa Juan Pablo. que endefilaba por el zambódromo dando la bendición. Y detrás de él iba una mujer muy ligera de ropas, lo cual despertó muchas críticas. ¿Ustedes qué opinan? Nosotros no opinamos absolutamente nada. Pero una falta de respeto teniendo su santidad ahí. Nada. Pero además es un Papa que ya nos papa mucho. Sí, pues lo pusieron a prasito. No nos opinó nada. Se saltearon. acá dice, saludo vengadores, pero en especial a Guilespi, mire, ¿quién es? Dice, queremos verte con la trompeta en la mano por Montegrande, como dudando de eso. Por favor, no puedo hablar con la trompeta en la mano. Va en su estuche correspondiente. Esto lo dice, Sebas Teclafarías de Montegrande. Bueno, qué grande. Es un vecino de Montegrande. Un abrazo. Sofía de Madrid dice que le encanta el programa y que lo escucha con su madre por Onda del Plata. En Madrid. Fernando de Catamarca, que no es San Fernando del Valle de Catamarca, sino un señor que vive ahí y se llama Fernando, pregunta cuándo vamos a ir, que escucha programas. Alguna vez estuvimos por ir y se suspendió. Sí señor, tiene razón. Entonces dice cuándo vamos, bueno, no sabemos. Estamos organizándonos. Acá lo tenemos al maestro con el libro en la mano. Aquí está el libro de Pierre Grimal y dice Minotauro, se da el nombre de Minotauro a un monstruo que tenía cabeza de hombre y cuerpo de toro. Mire como dice el oyente. Y no como dicen las tradiciones. Fíjese que curioso que enseguida dice. En realidad se llamaba Asterio o Asterión. una gran astucia de Borges que tiene un cuento que se llama La casa de Asterión y empieza a describir el laberinto. Empieza a describir el laberinto, pero lo hace de un modo tal que vos no sabés si realmente está hablando del laberinto, pero ves algunas coincidencias. Al final claro que te das cuenta y te das cuenta que creo que incluso el sujeto de enunciación es el propio Asterión, es decir, el Minotauro. Pero si Borges le hubiera puesto ese cuento, la casa del Minotauro, las metáforas que al final resultan sorprendentes, hubieran sido tan cercanas como ineficaces. Claro, claro. Bueno, tiene razón. Ha destruido para siempre a Pierre Grimal... Pero justo está con el libro encima. Nosotros tenemos todos los libros cuyos efectos nuestros oyentes se apreciulan a indicar. Sí, señor. Y no otros. Así que tiene razón Walter. Mira usted, qué cosa extraña, ¿no? Bueno, no tengo más mensajes. Yo tampoco. Bueno, entonces hagamos una pausa. Continuamos, en la venganza será terrible y como siempre renovamos la invitación de que ingresen a la venganza, será terrible. punto com porque ahí encontrarán nuestras presentaciones, las formas de sacar entrada. Se podrán suscribir a nuestro canal de YouTube, al canal de Spotify, dejar mensajes y tantas cosas más. Lave Es cierto que este sábado vamos a estar en el Gran Vía de Madrid. Sí, señor. Así es, nuestro debut en el viejo continente. Estamos en el Teatro Gran Vía, ya recuerdenlo. El viejo incontinente, ¿no? Bueno, entonces es el sábado, teatro Gran Vía. Sí, señor. ¿A qué hora, señor? Es muy tarde, a las 23 horas, 23.30. Pero no sé por qué dije pero, las entradas están en lave ¿Y estamos? Y si no, si usted está en Madrid, están en el teatro. Me imagino que alguna le van a vender. Sí, en grupos medios o en el teatro. Yo ya tengo... mire el traje que me hice. ¡Qué divino! ¡Mire cómo me queda! Mal. Precioso. Bueno, así que el sábado estamos en Madrid. Atención y, bueno, por supuesto que ahorita no más estaremos también en Valencia y en Barcelona los días 21 y 25. Hablaremos hoy de Anfiarao, uno de los siete contrategas. Claro, antes de hablar de Anfiarao, recordemos que el conflicto de los siete contra Tebas, siete jefes que lucharon contra Tebas, se desprendió de la historia de Edipo, de Edipo de Tebas, justamente. ¿Saben ustedes que Edipo, por razones que sería largo explicar, terminó casándose, sin saberlo, con su madre? No con mi madre, sino con la madre de Dipo, ¿verdad? Claro, no con su madre. Sí, como me miró a mí. Con la madre de él mismo, Jocasta. Que, bueno, fue entonces madre y esposa. Cuando Jocasta se enteró de que era en realidad la madre de su esposo, se ahorcó en su palacio llena de vergüenza. Y... Todo esto de Dipo, por los mismos motivos, se había quitado los ojos. Creonte, el hermano de Jocasta, tomó entonces las riendas de la ciudad, es decir, de Tebas, y desterró a Dipo. Ciego y todo. Si me decimos que ya se había arrancado los ojos, el tipo lo destierran, que es una de las peores penas para un ciego. Muy bien. Entonces, los hijos de Edipo, que cualquier... cualquier oyente rápido habrá conjeturado que eran también sus medios hermanos, bueno, los hijos de Edipo decidieron hacerse cargo del trono de Teoas, alternándose un año cada uno en el poder. Eteocles y Polínices eran estos chicos. Pero empezó a Eteocles, dice que primero yo, Pris. Pris para hacerme el cargo del trono de Tebas. Pero una vez pasado el primer año, Eteocles se negó a delegar en su hermano Polinices y lo desterró de la ciudad, alegando que no era apto para reinar. Si fueran a desterrar de la ciudad, a todos los que no son aptos para reinar... Estamos listos. Bien. Ahora vamos a ver qué relación tiene Polinices con Amfiarau. Amfiarau era el hijo de Oicles y de Hipermestra. Sus hijos eran Alcameón y Amfíloco. Amfiarau era un mago, mago muy famoso, protegido por Seth, por Apolo, y también era un jefe guerrero reconocido por su honradez y su bravura. y también era muy piadoso, un buen tipo, un gran tipo. Cuando comenzó a reinar en Argos, en una ciudad también griega en la que reinaba Anfiarao, Anfiarao que era, como hemos dicho, muy bueno, muy piadoso, mató a su tío Talao y expulsó a su primo, Adrasto, que es otro de los siete jefes. Posteriormente los dos primos se reconciliaron, me refiero a... ..a Drasto y a Anfiarao. Pero mientras Anfiarao era sincero en sus sentimientos, habrá matado a su tío pero era sincero, a Drasto siguió guardándole rencor. Bueno. A Drasto le dio a Anfiarao a su hermana Erifila. o Herífile, como usted le quiera llamar, en matrimonio. ¿Por qué? Calculando que ambos deberían someterse alguna vez al arbitraje de esta chica en caso de que se produjeran querellas o diferencias de opinión. Entonces, lo casó con la hermana de él, con Herífile, y dice... me viene bien tener a mi propia hermana en el lecho de Anfiarau para que llegado el caso de que resurjan nuestros inconvenientes ella interceda en mi favor. Está bien. En realidad sucedió algo parecido y no quiero anticipar el final de la historia pero por culpa de este detalle se murió Anfiarau. ¡Oh! La cuestión era que a Drasto le había prometido Apolinixes, el hijo postergado de Edipo, que lo volvería a sentar en el trono de Teba. Ya sabemos que está el hermano. Y entonces le pidió a su ahora cuñado, Amfiarao, que participara en la campaña que preparaba contra la ciudad. Y yo voy a armar una campaña y lo voy a poner a Apolinixes en el... trono de Teba y te necesito a vos, Amphiarau, que eres tan bravo y además mago. Ahora bien, claro que era mago. Era mago y tenía el don de conocer el porvenir y entonces cuando a Drasto le dijo voy a hacer una campaña contra Tebas para restituir a Poliniches en el trono, él ya supo que eso iba a terminar mal. y trató de disuadir a Drasto de su propósito. No, le dijo, mirá, esto yo no lo veo, qué sé yo. A todo esto, Polinices, aconsejado o mal aconsejado, le ofreció a la mujer de Anfiarao, que ya hemos dicho que era herifila, la hermana de Drasto, Y este regalo es el collar de armonía. Homero cita a Erífila como una reina célebre por su carácter trágico. Dice, la torva Erífila, que por oro vendió a su marido poniéndole precios. Eso dice Homero. El collar de armonía era un objeto mágico, pero... parece que traía mala suerte a cualquiera que lo poseía. Pero sobornada por aquel regalo, sería un conser muy valioso, me imagino, Erifilia, que había sido elegida como árbitro entre Adrasto y Amfianado, en una querella. ¿En qué querella? Vamos o no vamos a la guerra. Ese fue el desacuerdo que apareció. Y, entonces, bueno, que decida Erifilia. Ella decidió que la guerra se llevara adelante. Y su esposo, como hemos dicho, atado por su promesa, debió marchar hacia Tebas, muy a su pesar, desde luego. Pero antes de partir, le hizo jurar a sus dos hijos, que ya hemos mencionado al principio, al que el meón de Anfilo le hizo jurar a estos dos chicos. que llegado el caso lo vengarían más tarde, matando a su propia madre y fila. Digo, chicos, ahí se han fierao. Me voy acá a la guerra. Les voy a pedir una cosa nada más. En la guerra me van a liquidar. Ustedes a mamá la liquidan. Ah, bueno, listo. Hasta luego. Suerte. sus dos hijos efectivamente lo vengarían más tarde, matando a su madre y organizando contra Tebas otra guerra, otra guerra donde ahí sí alcanzarían la victoria. Pero ahora estamos con Anfiarao. ¿Cuándo Anfiarao y los otros seis? ¿Cuáles eran los otros seis? ¿Cuáles eran los siete contra Tebas? Bueno, Anfiarao, Adrasto, otro adivino y pomedonte, Por inicio de Tebas, Tideo de Calidonia y el último era Partenopeo de Arcadia. Cuando los siete partieron hacia Tebas, los esperaba una primera aventura. A su paso por Nemea, aquel lugar donde estaba el león que mató Heracles, la primera de sus hazañas. Al llegar a Nemea, los muchachos, los siete jefes, sedientos, pidieron a una muchacha que se llamaba Ypsipila y que era la encargada de la custodia de Ofeltes, que era el hijo del rey de Nemea, la chica que cuidaba al rey de Nemea. Llegan a Nemea, encuentran a la piba que cuida al hijo del rey, con el chiquitito, ahí el pibe. Y dicen, ¡ay, una sed tenemos! Y le piden agua. Y para atenderlos, Ipsipi la dejó por un momento al niño, al que un oráculo le había dicho que no lo depositará nunca en el suelo antes de que pudiera caminar solo. Bueno, ella lo dejó, junto a la fuente, en el suelo. Y una serpiente que estaba en la fuente saltó sobre la criatura y la ahogó. han fiarao, entonces les reveló el funesto significado de aquel presagio. La expedición sería desastrosa y todos los jefes morirían. Pero sus compañeros desoyeron la advertencia y siguieron en su ruta. Intitulleron, así eran los griegos, unos juegos en honor del pequeño Ofeltes. y ellos mismos participaron en las competencias que fueron más tarde unos famosos juegos de Nemea. Y Anfiarao ganó los premios de Salto y Disco. De las dos disciplinas. No, eran más me imagino. Con sus hábiles razonamientos y su prudencia, consiguió el perdón de Ipsípila de parte del rey de Nemea. Que imaginate. y que cómo vas a dejar al chico en el piso, no te dijeron bla bla bla bla. Amfiarao consiguió que el rey de Nemea perdonara a Ipsipuila. Y... Eba. Llegaron a Teba final. En Teba, en los combates desarrollados frente a las siete puertas de la ciudad, Amfiarao desempeñó un importante papel. Habiendo caído Tideo, uno de los jefes... Herido en el vientre. Lo iría un tal Melanipo, lo hizo un agujero en el vientre. Anfiarau lo mató a Melanipo y le cortó la cabeza y llevó la ensangrentada testa al moribundo Tideo, que estaba ahí por morir, quien la abrió y se comió los sesos. pensando que con eso iba a revivir. La diosa Atenea, que tenía pensado conceder la inmortalidad a Amfiarau, se horrorizó ante aquel acto de canibalismo y renunció a su intención. Y en la derrota que puso fin a la expedición, Amfiarau huyó. hasta el borde del ismeno, que es un abismo, donde en el momento en que iba a ser alcanzado por Periclímeno, era un héroe de Tebas, viendo que Amfiarado ya iba a ser víctima de sus enemigos, Zeus abrió la tierra ante él con un trueno. un trueno fragoroso y la tierra se tragó a Anfiarao junto con sus caballos, su carro y su coche. Lo que pasó después fue que Zeus finalmente le confirió la inmortalidad. la que le había negado, primeramente, a Atenea. Y Anfiarao siguió formulando sus oráculos en Oropo, en Elástica, no lejos de Atena. Esta es la historia de Anfiarao y la trágica historia de los siete contrategos, cuyos nombres vamos a repetir. Anfiarao, Adrasto, Hipomedonte, Capaneo. Polinices, Tideo y Parthenopeo. Yo me los aprendía cuando era chico, como si fueran la mitad de un equipo de fogos. También parece un calendario, podría ser, como meses me la tenen a mí, un calendario. También, sí, sí. Bueno, hermosa historia. Y como todo proviene, todo el origen de esta... Esta conexión de desgracias proviene de la primera desgracia, la de Dipo. La de Dipo de Esteva, que tiene la mala suerte de enfrentarse con su propio padre, Lallo, en cruce, ahí en el camino, unas compadradas, bueno... la del oráculo que había predicho que Edipo se iba a casar con su madre. que se cumple y todo esto es la consecuencia. Vamos a escuchar la canción que se llama Edipo de Tebas en la versión de Le Luthier. Continuamos, la venganza será terrible. Señoras y señores, este es el mejor momento para dar comienzo al siguiente segmento. Cursos que uno debe seguir si se propone impresionar a las damas. No ser el curso para levantarse a las damas. No, no. Si no, mejorar sus conocimientos, incorporar a su dotación mental. los conocimientos impartidos en los cursos que ahora vamos a elucidar. Esto está garantizado lo que usted dice. Sí, sobre su uniforme. varios de estos cursos. ¿Cuántos? Y acá tenemos muchos, hay unos 15. No, pero no puedo hacer 15 cursos. Yo casi diría que con 7 de estos cursos. Es mucho 7. Bueno, ¿usted quiere levantar una mina gratis? No. Vaya, vaya a ir al sonda. No, bueno señor. A ver qué cursos hay que hacer. Vamos a ver. Cocina gourmet. Esto yo estoy de acuerdo. Yo también. Porque especialmente en los últimos tiempos, los hombres que cocinan, que saben de cocina, que hablan de cocina, y que describen adecuadamente los platos que van ingiriendo o pidiendo, Chao. Chao qué? Se levantan a la mina. No, bueno. Y sobre todo, ¿sabes qué? Que tiene algún ingrediente, algo exótico. Claro. Sí. No, porque para cocinar un huevo frito, cualquier. Claro, no, no. Pero a ver. Amada mía, cocinaré para ti. Sí. Tengo aquí unos bulets. que he traído especialmente de Barcelona. ¿De dónde los traes los buleets? De Barcelona. Perdón, ¿son buleets o sí buleets? No, buleets. Bueno, bueno. Cuando pasen las planas, van a buscar buleets. por la sortita. Bueno, aprender a preparar platos sofisticados, como dijo el señor, puede ser una habilidad impresionante, es decir, que impresiona a la dama. ¿Será cierto que uno puede torcer un rechazo? Sí. Bueno, no. Pero si no, con un buen chorizo. No, no, no. Vaya, mamá de mía, cocinaré para ti este chorizo partido al medio con chimichurri. Pero sí es cierto que una comida rica, exótica, acompaña todo el cortejo. Sí, pero el señor habló de torcer rechazos. Yo creo que no hay forma de torcer un rechazo. ¿Ni con una buena comida? No, no, no. Cuando el rechazo ya se consumó... No, no, no. No hay vuelta atrás. No. Usted tiene que evitar que llegue el salón. Eso sí puede. Usted viene mal aspectado. Sí. Viene mal aspectado, la bebería, la bebería... Usted puede mientras va desarrollando lo que podríamos llamar su propuesta. Claro. Usted se propone. Pero usted ve que viene mal. Usted ya se da cuenta que... Pero no, ahí tampoco la poderá... No, pero sí, sí, todavía tiene. Ahora, si el rechazo se consumó... Si viene mal... Si ya le dijo no... No, olvídese. Eso no es forro. Segundo curso. Enología o degustación de vinardos. Eso ayuda. Eso ayuda mucho. Ya me estoy enamorando. Saber sobre vinos. El Rolón, por ejemplo, a las menas, no les habla de chicoanálisis y nada. Claro, es un plomo. Les sabe sobre vino. Claro. ¿Sabe de vinos, Rolón? No, qué va a saber. Ah, bueno, y entonces... Pero sí, sabe, en teoría sabe de vino. Claro. Después se lo toma y no le distingue un neviolo... Bueno, pero entonces, la teoría en un momento va a chocar. No, pero además, en la ceremonia de estar... Claro, él habla. Él, por ejemplo, le trae el vino, lo cachas así con la mano, lo mueve. Lo mueve en la copa. Le siente el olor. Dice, qué sé yo, después se toma un poquito y dice... No, no sé si eso... Sí, las minas se vuelven no. Bueno, por lo demás... Y dice cosas como las que dice usted. Habla de que el cuerpo... Claro, el nariz... Tiene como sabe el nariz... Pero además, el mismo vino va haciendo su trabajo. Sí, señor. A la segunda copa de ricino que usted le encajó, la mina ya agarra viaje con coquilla. Empiezan las risotadas, despierta. Y además que hay algo de la cata que tiene que ver... ¿Cómo la cata? De la cata de vinos. Cata se llama la mina. Es como le dije yo. No, señor. De la cata de vinos, que se trabaja mucho sobre la lengua. Entonces, usted le dice, profundo que sabe mejor hacia atrás, tenelo hacia atrás. Disculpe si puedo decirlo lo que voy a decir, antes de tragártelo, le dice... Acabo de llegar. Lo frena, lo distribuye por la boca, hágalo circular. Hágalo circular. que se detenga un poco ahí, y luego sí lo dejamos ir. Sí, muy bien. Al tipo. No, al tipo no, al vino. O, si está en una cata, lo escupe. ¿Cómo lo va a escupe? No va a desperdiciar un vino de tanto dinero. Yo soy el tipo, me escupe. No, bueno, pero... Digo, no sabés con quién estás hablando. Para no emborracharse, porque a veces por ahí prueba 60 vinos. Es cierto que el vino ataca principalmente a la lengua, como órgano sensorial, y que muchas veces entre los mismos catadores, y por ahí una pareja está catando vinos. se exhibe la lengua uno a otro para ver cómo se va tiñiendo de colores rojizos, violacios, negro en un caso muy extremo. Sí, yo he visto. Enpetrolado. Otro curso, bueno, clase de baile. Eso también permite ya irse la levantando a la mena si ella también tomara clases allí. Habíamos dicho que teníamos que... No, dijimos que no nos metiéramos en eso. Aprender a bailar puede ser una habilidad divertida y romántica para ocasiones especiales, estoy de acuerdo. Y además, en casi todos los establecimientos que propenden al conocimiento de hombres con mujeres, se baila. Se baila. Además, hombre o no, existen también lugares donde se aprende el baile del caño. Sí, pero el hombre no quiere pasar el lento. ¿Voy a ir yo a levantarme una mira, guardándome... arraganándome de los caños que hay en la galería del patio? No, digo, es un lugar también muy... Yo mujer... Sí. ..lo veo a un tipo... No me diga. No, señor, lo veo a un tipo colgado de un caño, la verdad que no me da ganas de nada. No me da ganas de nada. Son bailes de sensualidad... Prefiero el tipo de la lengua negra. Idiomas extranjeros. Sí. Ah, está muy bien. Decir cosas en idiomas extranjeros. Usted sabe que hay mucha gente estudiando idiomas orientales, japonés, chino, por ejemplo. Ahora, perdona, ahí hay un tema. Uruguayos. ¿Se puede hacer trampa? Y seguro. Porque usted puede decir... Me está hablando del punto central del amor. ¿Usted puede decir que sabe que está aprendiendo a hablar noruego? Y entonces, ella le pregunté, ¿cómo se dice en noruego? vamos a tomar algo y usted le dice Heidensstruttenbach. Ah, sí. Heidensstruttenbach. Ah, bueno, y así todo. Offenbach, dice usted. ¿Cómo? Offenbach. No, Jadestrutenbach. Ah. Jadestrutenbach. Ahora se lo tiene que acordar por si ella le vuelve a preguntar lo mismo. Claro, pero usted al final, a lo largo de los años, va inventando un idioma nuevo. Sí. Que no es el noruego. Pero es válido igual. Pero es un idioma que lo ha inventado usted. Para sostenerlo lo tiene que recordar, pronunciar, inventarle sus reglas, su gramática. Debe incluso escribir una gramática. A todas las minas con las que usted sale y hace lo mismo y cambia de idioma, se va a volver loco. Y bueno, sí, es más fácil decir que usted habla castellano y nada más. Pero salud se dice Skål. Eso ya me lo enseñaron una vez. Ah, qué bien. Una amiga de Noruega que le mando un beso. Tóngel. A Érica. Tóngel es gracias. Sí. Así, dígame salud. Skål. Tóngel. Claro, ah, bueno. No, pero... Tener un amigo... que finge que los dos hablan... Claro. Llega en el medio y se pone a hablar. Sí, a ver y qué hablan. Has to do them back as an open. Oh, don't get that. I did it wrong, oh, you got that. I did it wrong, stango. Uh-uhm. Uh... Very well. She did it right. She did it wrong, but I didn't ask. Yeah. Por favor. Eh... ¿Idiomas extranjeros? ¿Fotografía? No. No, bueno, sí, puedes arreír, pero... A veces los cursos de fotografía implican salidas grupales, supongamos, a la boca, de hombres y mujeres mixtas. Sí. Y bueno... Imagínense. Mujeres, mujeres, dejen de molestar. Venimos de la boca. Y así. Señores, etiquete y protocolo no está mal, eh. Saber cómo comportarse en diferentes situaciones sociales puede ser valioso. No me parece algo erótico. No, no es erótico. A mí lo contrario. Además, yo creo... Usted... La mina le pregunta a usted... ¿Qué es tu idea? ¿Qué se dedica? Bueno, yo soy... experto en protocolo y etiqueta. Sí, un plomazo. No, señor, no es un plomazo. Aparte no se usa más. Vamos a llegar al momento cúlmine de la relación y usted va a empezar con Bulevú, con Silbú Ple, con todo, de que se les broma. Sabe que es el monio. Bueno, sin embargo, esto no. ¿Escritura creativa o poesía? Eso sí. ¿Escritura creativa o poesía? Sí, bueno. Sí, poesía, poesía. Ahí está. Mire... Primera clase. Sí. Llovía torrencialmente en la estancia del mojón. Mateando junto al fogón, estaba tuita la gente. Dijo un viejo, de repente, se dio un cuento que da miedo. contra el recuerdo no puedo luchar en esta ocasión y cortando la ilación un gaucho se chupó el dedo. No es una poesía de... Si es espamiche, compadre, y ya que te sentís potro y sigue así. No, pero... Usted a una mina le empieza a decir eso. No, pero por ejemplo, el ejercicio es escribir un cuento. Ah, ya está. Sí. Y usted le dice a su compañera... Yo la protagonista. Pensé en vos para escribir este cuento. Bueno, cuidado el cuento que vas a escribir. No, resulta... Escribí este cuento. ¿Ves? ¿Por qué? Sí, ¿qué dice? Escribí este cuento para ti. Claro. Resulta que había un señor que se llamaba Pascual Angúl. No. Primero, que un cuento no puede empezar diciendo resulta. ¿Cómo vas a escribir un resulta? A mí me enseñaron que todos los cuentos... No. Empieza resulta. Un libro que empieza diciendo resulta. No, un poco literario. Habría que probarlo. Como se ve que tomé muchos cursos de escritura. ¿Resulta qué? Bueno, últimos cursos a los que conviene asistir. Astronomía u observación de estrellas. Sí, muy bien. Te les empieza a señalar estrellas. También puede no tomarlo el curso. y siguiendo la política de los idiomas. No, pero necesitamos... Claro, inventa. Un instrumento. Vean que es el Sirio que está allá. Ese Sirio, la estrella más brillante del firmamento. Sí, y de hablar de las estrellas que ya no están pero uno las ve y todo esa cosa. Ah, de la materia oscura. Usted nunca, Esthercita, nunca oyo hablar de la materia oscura. Y puede que se ríe, no entiendo. Mire, allí está la constelación de Orión y hay una estrella de la constelación, quizá la más brillante. Orión es el de los... está muy de moda en estos días porque se han enterado de que esa estrella tiene los días contados y cuántos son esos días? está por 365 está por explotar así que yo la invito a ver si tenemos suerte esta noche puede tardar hasta 100 años la verdad y bueno pero yo no tengo tanto tiempo para Intimamos ya directamente. Pero usted tiene... Quemando etapas. Por ejemplo, la explosión de Betelgeuse. ¿Pero tiene telescopio usted? Bueno... Por favor, estamos en un informe serio. Dijimos que lo encarábamos de forma seria. Le pido por favor. Bueno, curso de astronomía entonces sí. Sí, ese era el último. Bueno. mucho mucho. Me dieron ganas de hacer. Sí, sí, bueno. También se rinde mucho lo de todo lo que es plantas, cursos de plantas. Ah, sí. Jardinería, paisajismo. Paisajismo, siembra. Paisajismo. Sí. Hay que hacer correr la bola de que usted le habla a las plantas, no está mal tampoco. Claro, pero con un poco más de un perfil, un poquito más, algún dato. Por ejemplo, yo sigo las monocotiledonias. Soy loco de las monocotiledonias. A mí en cambio yo prefiero las bicotiledonias. Ah, vos sos de las bicotiledonias. Como sin ir más lejos, el poroto. El poroto es una planta, yo recuerdo... Una samba que cantábamos nosotros, muy ilustrativa. El poroto es una planta más bien de Cotileonia ¿Le gustó? ¡Pero bien! Se llama la germinación del poroto Hermoso, uno se enamora al instante Bueno, ¿qué les parece si hacemos una pausa? Muy bien Y para finalizar, dos palabras bastan Gracias oficinanerd.com. Pasión por el podcast.