Si se queda dormido escuchando La Venganza Será Terrible por la radio, ahora también podrá quedarse dormido escuchándolo a cualquier hora en formato podcast.
En lavenganzaseraterrible.com puede encontrar los episodios, etc.
La venganza será terrible. Buenas noches, amigas, amigos. Este es el comienzo de La Venganza será terrible. Estoy observando con el rabillo del ojo. que están presentes, Patricio Barton, Gillespii, mis queridos compañeros. Vamos a saludarlos inmediatamente. Buenas noches. ¿Cómo están? Buenas noches. ¿Cómo están? Acá tendríamos que poner aplausos grabados de una multitud. ¿Sabes lo que es? Maracas. Sí, pero maracas no es muy festivo. Parece una ovación. No parece mucho una ovación eso. Es tristísimo. Bueno. Escúcheme, hay que decir varias cosas respecto de las presentaciones. Por supuesto, claro. Ustedes saben que hoy vamos a estar muy pronto en Santiago del Estero, en La Banda. y en Tucumán. En Santiago estaremos el día 15, ahora no más. Ahora. El viernes 15 y el sábado 16 en Tucumán, en el Teatro Mercedes Sosa. Mientras tanto, no hay otras presentaciones. No, pero sí hay que ir diciendo que en la Ciudad de Buenos Aires vamos a volver al Regina. El jueves 21 y el jueves 28. Ah, bueno. Sí, sí, claro, claro. También ahorita no más porque es a la vuelta de ahí. Así que atención, el Regina de Buenos Aires. Todo esto está en lavenganzaceraterribles.com. Y vamos a ir anticipando que estaremos... Sí, no tan anticipando porque también... En Bernal... En Bernal el día 22 y en Merlo el día 23. O sea, hace una seguidilla de Regina, Bernal, Merlo. para esta seguidilla. Claro. Bueno amigos, ¿en qué estaban pensando? Estábamos pensando, creo, en planes para el año que viene. Sí, sí, qué rápido se pasó este año. Pero todavía no son... Parece mentira que estuviéramos ya cerca de Navidad. Sí, sí. Sí, quizás... Yo ya salía a comprar turrones. Claro. A mí me gusta el video que ahora... Ahora los pan dulces, los panes dulces. Los panes dulces. Sí, se venden todo el año. Esto es una gran novedad. Todo el año. Antes sucedía eso únicamente en Babieca. Claro. Que es donde tienen los mejores pan dulces probablemente de Italia y la Argentina. Sí, sí, sí. Son artesanales. ¿Pero usted dice que ahora en todos lados venden también? Sí, sí, sí, sí, Pan Dulce, sí. ¿Y para qué quiere Pan Dulce todo el año? No sé, pero hay gente que le gusta todo el año. A mí me gusta todo el año. Las cosas que me gustan en febrero no dejan de gustarme en julio. Claro. A mí me pasaba con los helados cuando era un niño. Yo quería helados en julio. No había en mi tiempo. Claro, debían evitar. La heladería cerraban porque los dueños se iban a Italia a tener una segunda heladería que tenían allá. Eso decían, no sé si la verdad, pero... Lo decían de todos. De todos. Me parecía muy raro, ¿no? De todos. Había una migración hacia Italia y ya la inversa... Bueno, y mi abuela escandalizaba y decía, ¿cómo helados en invierno? ¿Y por qué no? Sí, ahora se ven. Podría decirle ahora a mi abuela. Claro. muy seguido con mis psicoanalistas. Bueno, usted está tirando la plata porque se habla de esto. Sí, además. El otro día me enteré que en Moscú, en invierno, la plaza roja se junta la gente a tomar helado mientras nieva. Claro, pueden hacer de lo mucho más barato. No tienen ni siquiera que Nunca le chorrea el cucurucho. Es imposible. Ahora hay que tener ganas. La verdad que no dan ganas. Si a la intemperie. No dan muchas ganas. Bueno, en cualquier caso, pan dulce. Sí, pan dulce que rico. Bien, yo he recibido aquí de la... directiva de la radio, un asunto un poco complejo. ¿Por qué? ¿Qué problema hay? Porque nos podría traer graves inconvenientes. Ya hemos tenido inconvenientes. Y prácticamente todo el mundo, desde los espiritistas en adelante. A mí no me importa, yo no le saco nada a la jeringa. No se le saca la mano. Ah, sí. Por lo tanto, me hago cargo de cualquier tema que me ponga usted sobre la mesa. Además, quedó... Bueno, estoy disfrutó... Que a ver qué me dice de él. Quedó demostrado que cualquier tema que tratamos, lo tratamos con respeto, con altura. Y con altura. Con nivel. Bueno, el tema es... Coincido para tener dos novios. Atención a nuestras jóvenes oyentes. En simultáneo, ¿no? En simultáneo, sí, sí. Y desde luego, esto es para no ser descubierta, señalada, sospechada. Bueno, ¿puedo decir algo antes que comencemos? Sí, cómo no. No nos pongamos en un lugar moralista. No. De decir que está mal, tendremos no. No, no, no, yo digo. El caso es que si a usted le toca de los dos novios, usted es uno. Y no sabe de la existencia del otro. Bueno, pero... Bueno, pero lo quiero ver. Pero hagamos el informe propiciando los dos novios. Qué buena idea para un cuento que de una mujer que tiene dos novios, un señor sea los dos. Claro, sí. Está muy bien. Disfrazándose, caracterizándose... y siendo tanto uno como el otro. Una idea simpática para el cine americano más que nada. Podría ser. Una especie también de Dr. Jekyll... Y Mr. Hyde. Y Mr. Hyde es novio. Incluso con los mismos actores. Ahora, pero ella no se da cuenta que es del mismo tipo. Eso es lo primero que el espectador dice. Porque el tipo se puede disfrazar. No me daría cuenta enseguida. Se puede disfrazar. Y el espectador también se da cuenta de que el novio siempre Spencer trae eso. Claro. Ella mucho no lo mira, se ve. Claro. Mucho no lo mira. Pero ahí está la habilidad del tipo para cambiar no solo su aspecto. sino también la forma en que la abraza, las formas de labrar sus hábitos, sentimental, su estilo amatorio, o no decir sexual. Sí, su estilo amatorio, el tipo de dos maneras distintas. Se necesita un hombre muy inteligente para eso. Yo creo que la línea divisoria que enmarca los roles actorales de esta persona sería civilización y barbarie. Claro. Bien. En esa línea. Yo tengo un final para eso. que la tipa se da cuenta y no dice nada. No dice nada. Porque le gusta la variedad. Le gusta eso. Sí, es verdad. Siempre lo supo. Siempre lo supo. Siempre lo supo. Bueno, siete consejos o más, porque yo le agregué algunos, para tener dos novios a la vez. Primero, acá también hacen alguna salvedad, porque dicen que se deben aceptar las consecuencias de los actos. Sobre todo cuando alguien sale herido. Bien. Alguien que, por ejemplo, uno de los novios encuentra al otro infraganti, se agarran a trompadas y uno sale herido. No, se refiere a una herida sentimental. Ah, bueno, a alguien que me importa entonces. La infidelidad no distingue géneros ni preferencias sexuales. Qué sabiduría, eh. Hombres y mujeres lo son. ¿Lo son qué? Son infieles. ¡Ah! Son infieles. ¡Ah! Infieles. Por muchos factores. Algunas veces se hace porque se busca en otra persona lo que no se tiene en la propia pareja. Claro. Y muchas otras veces. Más, calculo yo. Sí. por malsana diversión. Bueno, pero eso también está estableciendo una regla moral porque a veces todo lo tiene la pareja y busca lo mismo. Cuanto más tiene, más busca. Claro, busca lo mismo. Con esto no queremos decir, porque tenemos muchas salvedades, que engañar a alguien sea algo positivo o saludable. Ya lo dijo. No lo sé. De hecho, existen muy pocas personas que acepten que cometieron un error y, bueno, y pidan perdón. Pero esto no es para ti Dios. No van a pedir perdón, señores. Esto no tiene nada que ver con lo que vamos a hacer. Bueno. No, el informe es otra cosa. El hecho es que hace poco la periodista Romina Sácres, muy conocida... Me suena muchísimo. Sí, sí. público en púrpura, que también es algo muy conocido, que se habría de decir que una lista de consejos para que aquella mujer que pretendiera tener dos novios no sea chapada en el acto. El artículo se ha viralizado. Claro, por redes sociales toda la gente se lo mandó uno con otro. Cuidado porque ha sido recibido con muy malos ojos por hombres y mujeres feministas. así como por mujeres que no están de acuerdo con vulnerar la confianza en las relaciones. Pero han sido más quienes lo han disfrutado y compartido. Bueno, meterse en situaciones comprometedoras y dejarlas atrás en su justa dimensión es parte de la vida misma. Sí, bueno. Tomá, esto me lo voy a notar para cuando me convenga. No sé si le va a servir como argumento cuando llegado el caso. Como respuesta en caliente, no lo puedes decir. Esto es parte de la vida misma, mi amor. Si, si. Venga para casa que te mato. Atención. Lo primero que dice es, diferentes círculos de amistades. fundamental, no la va a buscar a los dos novios en el mismo lugar. Dos parejas es igual a dos universos distantes y muy lejanos, pese a que las ciudades son grandes, por ejemplo, México. Sí, bueno, es enorme, es gigantesca. Pero Buenos Aires mismo es gigantesca. Ah, también, ahora que pienso. Claro. Sí, sí. El mundo es un huevo. ¿Cómo un huevo? Un huevo recién me entero. Espera, por ahí estoy leyendo mal. Ah. No, no. El mundo es un huevo. Así que evita salir con dos chicos que sean amigos o que se conozcan, claro. Ah, pero sí que me hace... ¿Evita salir con dos huevos? Porque no entendí la metáfora del huevo. No, yo tampoco. No, debe ser un... Se usa en otro país, seguramente, como decía, es un pañuelo. Es un pañuelo. Claro. Claro, el mundo es un pañuelo, el mundo es un huevo. Sí. Y... La samba del pañuelo, la samba de... Y todo así. Bien, agenda ocupada. Por mucho que te gusten tus dos parejas, ya que vemos que la mina tiene dos novios. Sí, ya está, le está dando para adelante. Nunca debes estar disponible para verlos diariamente. Exacto. Llevo una agenda estricta de tus actividades y de los días en los que te reúnes con ellos. Eso también evitará... que confundas momentos o situaciones. ¡Claro! Claro, te dice. Esto es la pizza que comimos la otra noche. Claro. ¿Qué pizza? No puede ir a la misma pizzería con los doña Atas. No. Eso es elemental. Cuidado con las redes sociales, amigues. Exactamente, porque si publica fotos y cosas se debe... Si eres del tipo de persona que exhibe todo lo que hace en Facebook, Exacto. y además eres del tipo de persona que tiene dos novios, algo no está funcionando bien. Olvídese. Trata o evita, mejor dicho, divulgar momentos o sentimientos que compartas con uno. y con otros. Claro, por ejemplo, pone un cartel que dice hoy tuve un día inolvidable y nadie sabe, los dos novios leen eso y dicen ah, debe ser por mí. Para mí eso está bien. Claro. Sí, pero... Tener siempre un discurso tan ambiguo que aunque te equivoques, si se lo mandes al otro... Exacto. Es lo mismo. Es lo mismo. No estaría mal, no digo que se llamen igual. Pero que usted les ponga el mismo apodo. Eso también estaría perfecto. Por ahí uno se llama Ernesto y el otro Juan. Pero a los dos les dice Pichi. Claro, eso está perfecto. Pichi, te amo. A veces la gente cuando está en el momento más frenético de Haciendo el Amor, empieza a decir nombres. Pitchi. O se sueña. O sueña. ¿Sabe qué? Se puede hacer un tatuaje que diga Pichi. Pichi. ¿Y un coral ya está? de la mujer amada y dice me quiere solo a mí, piensa el tipo, porque si no, no pondría mi nombre. Claro, exacto. Pero el tipo no, ah sí, porque le dice Pichi. Finalmente resultó un Pichi el tipo. Bueno, cuanto menos gente sepa todo esto... No, nadie tiene que saberlo. Y lo estamos diciendo en un medio de comunicación de altísimo rating. Nunca falta un hueco neta. nunca falta alguien que no sepa guardar un secreto, incluso alguien que no le caigas del todo bien. Claro. Y, a propósito, con malicia, empieza a divulgar... Es que es muy difícil... ..que uno anda con dos tipos. Es muy difícil sostener... Sí. ..esta situación por mucho tiempo. Sí, y sin embargo, ocurre. Ocurre. Cuidado con el manejo de los lugares públicos. Esto especialmente a los intendentes que están escuchando este tema. No, no, a la pareja porque se van a andar mostrando por la vereda y uno no sabe, pasan autos, pasan taxis, pasan colectivos. Aquí hemos, en casos parecidos, hemos recomendado que la infidelidad se cometa siempre en líneas ferroviarias y de subterráneos diferentes. Exacto. Para evitar los encuentros en los transportes. Pero dice esto, siempre... Cuídate mucho porque alguien podría verte en un carro, dice aquí. Sí. Estamos hablando de otro país. Exactamente. Es un auto. Un auto. Imagínese, usted no se va a buscar. Tiene dos novios y uno la lleva en carro. Jajaja. Es botellero uno. Estamos en presencia. ¿Usted le quiere o vendes a? Se trata de un informe en donde llaman carro al auto y... Y auto al carro. Y huevo al mundo. Claro, huevo al mundo y todo por el sentido. Si están en la calle, evita ser cariñosa y melosa. caso de que alguien te vea siempre podrás excusarte diciendo que se trata de un amigo de un señor que trabaja contigo. Compañero de trabajo. Si el tipo se le tira encima. Claro, están los dos tirados en el pasto, esté a medio vestir y el sujeto ahí en unas actitudes. Bueno, que es un compañero de trabajo que me lo encontré justo. Claro, es raro, justo en la plaza. Bien, acá dice... Tener a precaución de no llevar diarios íntimos. Bueno, eso es fácil. ¿Qué van a estar escribiendo? ¿Para quién? Pero usted sabe que... Bueno, hay gente que lo hace. En caso de que sí tengas diarios íntimos, mejor que sean dos. No, no, no. Uno para cada uno. Pero eso es una complicación. Ahora, ¿por qué se complica? Usted asume que tiene una doble vida. Esa persona nunca puede tener un diario íntimo. Sin embargo, es así. Pero, ¿por qué? La gente que tiene doble vida tiene más diarios íntimos que la que tiene una sola. Claro, pero es absurdo. Sí, sí. Es raro, ¿eh? Después. Ya hemos dicho que no se deben conocer entre sí, pero hay más. Hay que tratar de que sean muy distintos entre sí. ¿Para qué? Para que tengan actividades tales en las cuales no haya ningún riesgo de que se cruce. Bueno, está bien. Igual le digo que hay una teoría en el mundo, no me acuerdo ahora cómo se llama, que uno está. a una persona de cualquiera. No sé si una, pero creo que dos o tres. Bueno, puede ser dos o tres. O cinco. O cinco pueden ser también. Pero, por ejemplo, usted de Fangio. Presidente de los Estados Unidos. Sí, o de Fangio. No, bueno, pero eso con personajes conocidos. Pero si uno se llama un señor que vive en Senegal... A cinco personas. A cinco personas puede ser. Máximo, sí. Máximo cinco personas. Llamas difícil. Pero con cualquiera de nosotros... sale a tres como mucho. Sí, sí, ahora sí. Sí, sí, sí, por eso. Tito Copán, que uno. Claro. Claro, usted lo conoció. No. Pero una persona... Podría haberlo conocido, pero no lo conocí. Pero ponéle, conocí a Freilán González. Listo, ya está. Sí, ya está, listo. Uno. Y en algunos cayó, cero, digamos. Sí, sí. Muy directo. Bueno, pero entonces, que tengan actividades distintas. ¿Tienen los dos la misma categoría o hay uno principal y otro subalterno? Siempre hay uno principal y otro subalterno. Eso es el comentario de un psicoanalista. Para mí, ¿sabe cómo los eligen? Uno es más completo en términos generales, bonito, interesante, inteligente. Y el otro es más sexual. Y puede ser un talado. ¿Un talado o un taladro? No, un talado. Es mejor un taladro. Sí, un talado, eh. Pero es muy bueno... Un imbécil. Es muy bueno en ese aspecto. Acá dice... Yo no estoy tan seguro de esto, porque creo que a veces oscila el asunto. También puede oscilar, sí. Que el principal... por alguna falla en su comportamiento, empieza a dar mal el taladro ponerle. Y pasa a ser secundario. Puede ser, puede ser. Es mejor, muy inteligente de esto, es mejor que ninguno de los dos vaya a visitarte a tu casa. Y si me permite la exageración... Es genial este consejo. Si me permite la exageración, la tipa que tiene dos novios... o algo así, o que siempre acostume a eso, mejor que no le dé la dirección a ninguno. Bueno, pero eso es muy difícil. Pero cómo hace, es muy difícil. Es dirección falsa, vivo tal... que raro, la dirección vivo con mis padres que son muy estrictos, son polacos y no permite que yo salga con ningún hombre, chao. Qué raro Lorena, pero hace un año que estamos saliendo, todavía no sé dónde vivís, siempre tenés evasivas cuando hablamos de esto. Lorena, cómo puede ser que a esta altura yo no conozca tu casa y a tus padres. Mira Pichi, yo ya te expliqué. Decime Pichi otra vez que me encanta. Tu papá es no celoso, es directamente una persona loca, que tiene unos celos patológicos y si te ve, te va a liquidar, pichi. Bueno, pero no... Pero escúchame, Lorena, ¿vos me dijiste que tu papá es polaco? Sí, pichi, te lo dije muchas veces. Bueno, mi abuela, por parte de madre, es polaca. Y conoce a todas las colectividades. Y el apellido Castro, que tenés vos. Hay muy pocos en Polonia. Bueno, Pichi, ¿qué te pasa? ¿Te agarraron los ceros? Qué raro que se llama Castro. ¿No te basta con que venga yo a visitarte o que nos encontremos en el hotel Dos Miendos? Lore, mi amor. Sí, Pichi, ¿qué? Te propongo algo, te tengo una sorpresa increíble. No me des sorpresas, ya te dije, Pichi. ¿Nos vamos en un viaje en un crucero? a dar la vuelta al mundo, dos meses maravillosos que vamos a disfrutar a pleno. No puedo, Pichi. Pero cómo no vas a poder. No te basta que nos vemos dos veces por semana. No, me parece poco. ¿Qué hacen los otros días? Trabajo, Pichi, trabajo. Atiendo a mi familia. Mi familia es una familia con problemas. Sí, que son polacos, me dijiste. Ese es un problema. Bueno, sí, pero que son muy estrictos. Pero no puede ser que no te tomes nunca vacaciones. se cambiaron el nombre pero eran Kastroski. Ah, Kastroski. En Varsovia. Claro, bueno yo tengo daño volverlo. Te dije que me consultaras. Pero cómo me decís esto. Lorena, Lorena, te quería contar una cosa. Tengo una propuesta... que a mí me interneció y me hizo llorar. No me digas, Pinch. Mi abuela, la polaca, nos invita los dos a la pareja a pasar 15 días en una isla del tigre con ella. Mira, ya te dije que tengo muchos problemas. No, bueno. No puedo abandonar a mi padre, a mi familia polaca, sola durante 15 días. ¿No te basta con las dos veces por semana que nos vemos? No, bueno, pero esto fue una invitación de mi abuela. Me dijo que te iba a enseñar recetas, que iban a hacer mermelada. Deciles que no. Deciles que no. Comunicación. Acostúmbrate y acostúmbralos a llamarte solo lo necesario. Ya te dije que no me llamaras tanto. Nada de llamadas melosas que se extienden por horas. Además, tendrás que hacer uso de tu ingenio para apodarlos en tu celular. Claro. Ahora ese es un problema. No, porque tiene dos números de Pitchi. Ese es un problema. Era Pichi 1 o Pichi 2. Sí, pero él le dice quién es Pitchi 2. Claro, él ve el celular. El tipo está con ella. En el momento se enciende la pantalla y dice Pichi. Mensaje de Pichi. Claro. Y después el celular le dice, este contacto ya existe. ¿Cómo? ¿Qué? Usted le pone Pichi. No, el asunto es escribirlo distinto. Con Y. No, usted lo pone P, dos C, y, Pici, en italiano. Ah, en italiano. Cualquier cosa dice, ¿cómo Pici? Ahora uno tiene que acordarse de quién es quién. Ya están problemas. Ya estamos en problemas. Lo cual es más difícil porque usted va a ver dos Pichis. Bueno, bueno. Fácil de equivocarse. Bueno, ¿y qué pasa si uno está con Pitchi y entra una llamada de Pitchi? Bueno, ese sí es el problema. ¿La excusa de mala señal? Mmm... Claro. Bueno, decida a Dios. Cuando sientas que estás tomándole más cariño a uno, o que las cosas vayan más en serio, es mejor dejar ir a la otra relación. ¿Y qué me estás hablando? Y bueno, sí. ¿No entiendes qué se trata tener dos novios? Sí, es verdad. ¿Qué se trata? De ver a... Cuando está bien con uno, entonces al otro, ¿qué es esto? ¿Así me querés? No, claro. Pero por ahí es lo otro no. Mucho te quiero, te quiero, pero resulta que... Pero puede ingresar un tercero en reemplazo que de a poco se va yendo. Es otra cosa. ¿Qué pasa si aparece un tercero? Generalmente, cuando aparece un tercero, son los otros dos los que salen perdiendo. Porque el otro es nuevo. Salen perdiendo por un rato. Y después... Empiezan a recuperar. Ahora, que no sé de quién te habla. Sí. Pichi, dicen. Pichi tres. Soy Pichi tres. Tiene como 20 pichis de anteriores. Claro. Bueno, como verás, estos consejos limitan mucho la vida diaria. Sí, la verdad. Se vuelven mucho trabajo. Restringen la actividad social. Pero así es como se maneja el arte de la discreción y el engaño. Dice el miserable que escribe este artista. ¡Es un arte! Es tu opción decidir si quieres tener una vida anónima o no. ¿Qué es anónima? ¿Qué tiene que ver anónima? No, anónima no, pero bueno, sí, es su decisión, eso por supuesto. Además, siempre y sin excepción, protegete con algún método anticonceptivo. Siempre lo las tinencias. No, bueno, pero me parece un detalle... Un detalle de mal gusto que no hacía falta... Y en el último párrafo lo tiró. Y en el último párrafo. Cuando ya estábamos... Ahora, esto no... Usted no se lo puede contar a nadie. No. O siempre hay que tener un amigo que en contarle las cosas. Mentira. Este es otro problema. No, es un problema, porque usted... Usted tiene... alguien en quien confía y le cuenta... Tenía, pero desde que tengo dos novios, ya no confió a nadie. Usted le cuenta el secreto a esa persona, pero ese no es recíproco, esa persona no es usted el destinatario de su confianza, sino otra persona. Claro. Y el tipo le cuenta a otro, o la mina le cuenta a otro. Bueno, pero usted... Entonces se va trasladando el secreto... Pero entonces no puede... Bueno, pero es muy difícil. Cuando uno necesita un amigo que lo aconseje, no contarle lo que está viviendo. Y claro. Que te van a hablar, no sabes el momento que estoy viviendo. Pichi. Sí. Igual estaba pensando, por ejemplo, Rolón sí sería una persona adecuada, porque Rolón hizo un juramento. que él no puede contar lo que le cuenta. Ese juramento vale para las confidencias amorosas, amistosas, iba a decir, que es mejor, o solamente profesionales. No, solo profesionales. Y le digo más. Usted sabe que tengo el mejor de los conceptos de Gabriel Rolón. Sí. Es el que tenemos todos. Bueno, pero... Como conceptos. Sí, no hay problema. Pero su actividad profesional lo expone... Claro, lo hace un poco boquiflojo. No, claro, lo expone a una abstinencia tal del secreto. Cuando sale de consultorio se raja. Pero sí... Sí. Pero sí no da más. Dice, mira, te tengo que contar una cosa. Yo cada vez que lo veo a Rolón... Sí, te cuenta algo. Me dice, te tengo que contar una cosa, pero te pido por favor... que no se la cuente esa dolina, me dice así. Entonces, y ahí me larga una. Claro, que fue lo que me contó usted el otro día. Claro. Ahora, estaba pensando también. La persona que se hace destinatario de ese secreto, el confidente. Sí. tiene algo para en el futuro echarle en cara. Y bueno, sí tiene un poder. Tiene un poder, además. Hay gente que cuando se ve en una situación económica apurada, pierde cualquier sugerción moral y viene un día, te invita a tomar un café y dice, bueno, mira, si no me das 45.000 pesos... Voy a contar el secreto. Voy a contar que vos tenés dos novios. Pero eso es una extorsión de lo más miserable. Es... Ya lo sé. Pero estoy en una situación muy difícil. Bueno, pero en tal caso pedíme los 40... Estoy debiendo 40.000 pesos... Sí, 40.000 y pediste 45.000. Bueno, algo me tengo que quedar pagando. Bueno... Por favor. Si me lo hubieras pedido bien, yo te daba los 40.000 pesos. Te lo pedí muy bien. Pero, ¿pedirlo así? Yo voy a negar todo lo que digas. Voy a negarlo todo. Bueno, va a ser tu palabra contra la mía. ¿Incluidas las fotos y las pruebas? Perdón, ¿usted quién es? Yo soy el confidente del Señor que me contó todo y me pasó las fotos incluso. Pero ¿cómo puede ser? Lo traje para que vos vieras que se trata de una cosa seria y que no tiene nada que ver con nuestra amistad. Y usted se lleva algo... Como una cosa aparte, por eso lo traje al señor. ¿Usted se lleva algo de los 45 mil pesos? Sí, por eso le pedí 45. Claro. 40 pa mí y 5 pa' señor. Pérdase ese aberrante, lo que está ahí. Sí, así es. Es aberrante. Me hago un aberrante. Es aberrante. Mr. Slip Rojo. Los compré de ese color porque no había otro. Bueno, espectacular. No olvidemos que se trataba de una dama. Tiene razón. Los hombres no hacen estas cosas. No, no, no hacen estas cosas, no. No. No hay registro, quizás lo hagan, pero no hay un registro. Quizás lo hagan, pero no sabemos. No lo sabemos. Tampoco sabemos que lo hagan las damas. Esto es un informe que estamos leyendo. Impotético. Sin que nos conste. Bueno, pero son fuentes calificadas. Al principio, para nosotros, nadie hace nada. Bueno... Es un marco teórico. No quiere decir que alguien lo haga. Claro, una situación hipotética que establecimos. Ahora, al psicoanalista. Usted no sé si lo pregunto o no. ¿Al psicoanalista se lo decimos o no se lo decimos? Sí. Sí, psicoanalista, sí es un compil. ¿Y si no, para qué va el psicoanalista? Eso es lo que me pregunto siempre. Porque voy al psicoanalista porque yo en realidad, le miento. Sí. No, está mal. No, bueno, pero no. No se va a curar nunca. Pero el tipo como es un poco con padrón... A mí me dan no sé qué, entonces yo le redoblo la puesta. Me dice, el otro día me fui a Luján en el auto que tengo, Mercedes Benz. Sí. Entonces yo le digo que me fui a Chivilcoy, que es más lejos, en un auto que tengo, que es Mercedes, pero más grande. Bueno, pero eso no es ridículo. Pero el tratamiento, si está mintiendo, no se va a curar nunca. Igual es una mala praxis que le diga eso a su psicoanalista. El psicoanalista no tiene que hablar. Pero si no habla, ¿qué hacemos? Sí, pero no de su vida y del auto que tiene, qué le importa. ¿Y de qué me va a hablar? ¿De Freud? Yo una vez me encontré, esto es verdad, me encontré con mi psicoanalista en un shopping. Se estaba por suicidar. ¿No lo salvó? No, no tuvo otra alternativa, porque me encontré frente a frente. iba con la esposa y... ¿era la esposa? y después en la sesión le dije... le dijeron que no me vio... no le dije... no sabía que estaba casado Y el tipo no me contestó nada. No me dijo que sí ni que no. Ese es un buen psicoanalista. Claro, no dice nada. Me dejó al vacío. Lo que puede hacer es, si usted es muy desconfiado, tener dos psicoanalistas, por cada pitch y un psicoanalista. Ahí está. Por cada pitch. Y le cuenta uno a cada uno. Las cosas de pitch, claro. Le cuenta su pitch, el pitch que le corresponde. Claro. Lo que pasa es que en realidad para tener dos objetos de amor, dos amantes... Objetos son... ¿Dónde los compro? Dos amantes. Sí. Usted necesita tener prácticamente dos cerebros. Sí. Todos dos. Dos corazones. Sí. Dos continuos. Etcétera. Y sí, porque tiene que pensar doble todo. Sí, es todo todo. Sentir doble. Sí. Todo doble. Bueno... acá estamos llegando muchos mensajes habla fulano o fulana que no vayan a pensar que están hablando de mí no bueno están diciendo lo dicen por mí no lo decimos por nadie en particular aclaren soy fulana de tal lado aclaren que yo... No tengo otro amor. No, bueno, pero por qué se ha por aludido. También estoy recibiendo mensajes en mi celular de conductores de esta radio. Claro, claro. Que están diciendo lo mismo, que no están hablando de mí. Claro. No, bueno, no. Bueno, ¿qué les parece si vemos los mensajes de nuestros...? Hoy no, hoy no. Entonces no le damos ningún mensaje hoy, porque si va a ser tan problemático que todo nos suenan los... Entonces la audiencia no está preparada para estos temas. Bueno, pero todo el mundo se siente aludido. Bueno, listo. Y hay muchos mensajes, incluso algunos que han llegado en este mismo acto. Sí, pero quedarán para otro día, les digo. Quedarán para otro día, miren la hora que es, además. Así que hagamos una tanda, por favor. Continuamos en La Venganza, será terrible por IM 750. Recuerden que nos pueden contactar en el WhatsApp de los oyentes de La Venganza, que es 1165855580. Hablaremos esta noche del gigante de Cardiff. Cuidado, es una historia espeluznante, en cierto modo. El 16 de octubre de 1869 se descubrió en Cardiff, Nueva York, no confundir con Cardiff en Inglaterra, que es un lugar donde según tengo entendido hay minas de carbón o algo así. No. Se descubrió, digo, el cuerpo de un gigante de más de tres metros de altura y de 1.360 kilos de peso. mucho peso. Es un merecoso piso. Porque debería pesar 300 y pico de kilo. Claro. Si se dice que hay que pesar los centímetros que uno mide por encima de un metro. Por ejemplo, mide un 80 tiene que pesar 80 kilos. Está muy bien. Y un poquito más. Bueno, en ese caso este hombre tendría que pesar 200 kilos, 230, pero no 1360. No. Acá hay algo raro. Está gordo. Bueno, este gigante estaba totalmente petrificado. Ahí puede ser. Es petreo. Porque cuando un señor se convierte en piedra. En piedra, así pesa un montón. Pesa muchísimo. Bien. Esto se fue mientras se excavaba un pozo de agua en la granja de un tipo llamado William Newell. Era de Rosario Central. La noticia se hizo pública y en poco tiempo miles de personas acudieron a ver al gigante pagando 50 centavos por persona. hubo polémica acerca de si el gigante era un hombre petrificado o directamente una estatua de piedra. Exacto, era lo que yo estaba pensando. Hubo quienes llegaron a pensar que era uno de los gigantes mencionados en la Biblia. Ahí está. Entre ellos debía estar el pensador von Däniken, que entre varios centenares de teorías elige... la más improbable y descabellada. Cuenta el antiguo testamento que en tiempos antediluvianos la tierra estuvo habitada por hombres gigantescos. Dice, por aquel entonces había gigantes en la tierra y también los hubo después que estos gigantes se unieran a las hijas de los hombres y ellos les dieran hijos. No sé si me interpreta lo que les quiero decir. Sí, se entiende perfectamente. Eso no decía en la Biblia. No sé si me interpreta lo que les quiero significar. Es un agregado mío. Se entiende perfectamente. Imagínense, en la Biblia no va a decir... No. En el principio era el verbo. No sé si me interpreta lo que les quiero decir. No pasa nada. Bueno. Esto sigue diciendo la Biblia. Estos fueron los héroes de la antigüedad. Hombres famosos. Y dice, es el pasaje 6,4. ¿6,4? Del génesis. Señor... ¿Qué es un número decimal? ¿Por qué no le pongan aquí? Son versillos... párrafo... Versillos, señor. Versículo. No tenga miedo a llamar a las cosas por su nombre. No use eufemismo. Si es versículo, versículo. Caiga quien cayere. Yo no tomé la comunión. Me salió un forún, si yo, dice usted. Hay un paleontólogo de la Universidad de Yale, o había un paleontólogo, que estudió al gigante y lo declaró un fraude bastante burdo. En realidad, cuando estuvo a cuatro metros del gigante, comenzó a insultar a los que lo llevaron. y dijo que eso no era ni siquiera un fraude, sino una porquería insignificante. El llamado Gigante de Cardiff fue una creación de un tipo llamado George Hull junto con el tipo William Newell. Todo empezó un año antes cuando Hull, un tabaquino de Binhampton, se encontraba de visita en casa de su hermana, no de su hermana, no, señor, la hermana de él. en Acre, Iowa. Allí se enganchó en una discusión con un predicador. Qué bueno estar en Acre, Iowa, enganchado en una discusión con un predicador. Dice, discutían un pasaje bíblico, que es justamente el que acabamos de citar. Y... Dicen que era la existencia de gigantes. Discutían sobre eso. Aquella noche, este señor, este tabaquero de Ben Hampton, no pegó un ojo. Quienes decían que no durmió. En su cabeza se estaba gestando la idea del fraude. Bueno. En una cantera cercana a Fort Dodge, en Iowa, se hizo con un bloque de yeso macizo de 3,65 y que pesaba más de dos toneladas. Y bueno, se lo llevó diciendo que quería construir un monumento conmemorativo de Abraham Lincoln. Ajá, perfecto. Dice el presidente asesinado pocos años antes. Era lo que fue llevado a lo del escultor alemán Edvard Burhardt. que fue el encargado de hacer el gigante. Le llevó dos meses. No es tanto. Bueno, no es tanto. Burhard trabajó la figura como si hubiera muerto, agonizante, una agonía tremenda. Simuló venas humanas con rayas oscuras en el yeso. Estuvo ahí trabajando con un martillo toda la superficie. Usó agujas de acero. clavadas en bloques de madera para formar lo que parecían poros de la piel. No me digas que estuvo poro por poro, trabajándolo. Y bueno, es un artista. Y por último, roció la estatua con ácidos, ácido un gusto, para darle un aspecto más amarillento, antiguo. Hull colocó la pieza en una caja y la transportó en tren hasta la granja de su primo, William Newbell. ya mencionado, en Calif. Canalla. Con ayuda de dos niatos que juraron mantener el secreto, enterraron al gigante detrás del establo en una sepultura poco profunda y lo dejaron allí durante casi un año para no levantar sospechas. Bueno, en ese tiempo ocurrió algo insólito. Un granjero que araba la tierra a menos de un kilómetro de distancia que según algunos científicos de la universidad de por ahí cerca, identificaron como fósiles auténticos. Newbill y Hull aprovecharon esa fortuita aparición de huellos y tal como habían acordado, llevaron a unos trabajadores a su granja para cavar un pozo. Eso, a poco de empezar, las palas chocaron con algo. ¿Qué hiciste? Dijeron. Los hombres siguieron excavando, hasta que quedó al descubierto la enorme silueta de lo que parecía un hombre petrificado de tres metros de largo. Todos los diarios de la época hablaban del hallazgo. Cuando uno lo mira, no puede evitar sentir que está en presencia de un ser grande y superior. No es la Biblia. Son los diarios de Carlos. La multitud que se reúne a su alrededor parece casi emberezada. La gente viene de todas partes para curiosear. Esos decían los artículos de los diablos. Hull y Newell trabajaron o tramitaron una licencia para exhibir a este Goliath petrificado de Cardiff. Así lo llamaron. y se montó una especie de carpa alrededor, se armó como una feria, servicio de carruaje, un local de comida, un puesto donde se servía sidra fría. Lo de dueños de los únicos dos hoteles del pueblo no habían tenido nunca tantos huéspedes. Las ganancias fueron enormes, no sólo por las entradas de las miles de personas que acudieron, sino porque terminaron... vendiendo al gigante por 37.000 dólares a un grupo de empresarios de Syracuse. Los científicos, por su parte, discutían sobre si era una estatua antigua o un humano fosilizado. Como dijimos al comienzo, para el señor Oteniel Marsh, el paleontólogo aquel de la Universidad de Yale, El gigante era un simple muñeco de yeso. Y fue la prensa la que siguió con detalle las pistas hasta llegar al origen de la historia cuando Hull compró bloque de yeso. Y a Hull no le quedó más remedio que dar la cara y confesar el engaño. Pero lo extraño de esta historia es que una vez confesado el engaño, la gente empezó a ir más todavía a ver al gigante. Resultaba interesante ver al falso gigante de Cardiff porque se había vuelto famoso. ¿Cómo pasa ahora? Claro, claro. Ahora era famoso. Ahora sí. Incluso el dueño del circo, el famoso Phineas Barnum, ofreció a los nuevos dueños 60.000 dólares para pasearlo durante tres meses. Barnum era, ustedes saben, un empresario, principalmente el dueño del circo más famoso de los Estados Unidos, pero también fue empresario, político y recordado por sus célebres engaños en el mundo del entretenimiento. los trucos del circo Barnum eran generalmente fraudulentos, lo cual no está mal. No, no, claro. Que de eso se trata, como si usted quisiera que un mago de verdad se ruchara a una persona por la mitad. Bueno, este... Según él decía, Barnum, el propio Barnum, su único objetivo en la vida era tener los bolsillos llenos de dinero. Entonces Barnum hizo su propia copia, la expuso, o sea, el tipo no se lo quiso vender. Y Barnum dice, no me importa si no me lo vendés. Hizo una copia y proclamó que el suyo era el auténtico gigante de Cardiff. Y la copia tuvo más visitas que la original. Es un delirio esto. Y Hull lo denunció. Y el asunto terminó en los tribunales. Ahora fíjese qué interesante. El juez, el juez, determinó. que no se podía inculpar a nadie por la falsificación de una falsificación. cosa en la que yo no estoy tan de acuerdo. Es decir, el demandante se quejó ante la justicia por la aparición de una copia fraudulenta de un fraude original. La justicia le respondió que no podía ayudar. Yo creo que la denominación fraude original es incorrecta, porque un gigante de yeso es un gigante de yeso. Claro, es original. Es original. Ese no pretende ser otra cosa. Una vez que el tipo incluso ya confesó que sí que era una copia, digamos, de lo que podría haber sido un gigante. Pero esa copia la inventé yo. Si vos me haces copia de copia, estás falsificando lo que yo hice. Pero, bueno, la estatua siguió apareciendo año tras año, en ferias, carnavales, hasta que la Asociación Histórica del Estado de Nueva York la compró en 1948 para exponerla en el Museo de los Granjeros en Cooperstown, en Nueva York. Estado de Nueva York. y recreó incluso el entorno en el que fue hallado. Aunque resulte curioso, cada año miles de visitantes siguen pagando entrada para ver de cerca al gigante de Cardiff. Mark Twain escribió dos historias aludiendo al célebre fraude. La Venus Capitolina se llama una de las historias que le escribió en el mismo año que comenzó esta farsa. Es un relato teatral que incluso menciona a Barnum en el desenlace. Y después también escribió un cuento de fantasmas en 1888 donde el protagonista tiene una entrevista con el fantasma del supuesto gigante de Carlos. Esto es todo lo que sabemos. Es una historia muy interesante. Vamos a escuchar a Juan Carlos Baglietto en la canción que se llama El Gigante de Ojos Azules. Continuamos en la venganza, será terrible, señoras y señores. Este es el mejor momento para dar comienzo al siguiente segmento. Entre la espada y la pared. Bueno, qué título. Sí, es un título no muy justificado. pero que alude a situaciones sociales tan incómodas que uno no sabe cómo salir de ellas. Ah, bueno, bueno. Sí, sí. Metidas de pata. Por ejemplo, debes empezar con una liviana. A ver. Me encontré con un amigo que no me invitó a su boda. Ah, bueno. Él no lo invitó. Bueno, eso... Yo le digo. Yo creo que es mejor eso que uno no lo haya invitado. Claro, claro. Eso es peor, claro. ¿Qué le dice? Claro. Me gusta más incluso como situación. Sí, bueno. Que sea uno el que no lo invitó. Pero bueno... A mí si no me invitó el tipo yo se lo digo. ¿Y para qué se lo va a decir? ¿Cómo le dice? A ver... Así que te casaste. Bueno, casarse, casarse. Bueno, sabes lo que tiene que hacer, no hacerle regalo. ¿No me invitaste? No te regaló nada. No, no regalé nada. No, por supuesto. Hace mucho que no lo veo, además. Y por ahí ya se separó. Sí, vio que a veces... No crea que no me di cuenta del desaire que me hiciste. No, pero Ricardo, no es un desaire. No sabés cómo son las familias de mi novia. Es una familia polaca. Ah, sí, ¿cómo se llaman? Kastroski. Que son muy severos, no quieren a nadie que no sea polaco. Ah, te entiendo. Es así. Te entiendo, ¿sabés por qué? Porque entiendo a cualquiera. Estoy acostumbrado a que me enviantan. Gracias, Pichi. ¿Pero qué dice el informe? El informe dice, olvida y perdona, tu círculo de amigos de la escuela juró amistad eterna. No. Yo me olvidé de jurar eso. Yo no lo hubiera jurado tampoco. No, Eterno no le juró nada. No, no. No es algo de lo humano. Sí, lo que creo que todos juramos es vernos más seguido. Sí. Y no se cumplió. Yo ni siquiera juré eso. No se cumplió. Es más, me fui antes de que terminara el acto. Pero decimos que no se corte y dijimos, bueno, ¿saben qué, muchachos? Todos los años nos vamos a juntar a comer. No, no, nos vamos a cierre de la ventana tres días. A cerrar la ventana. A cierre de la ventana. Nos vamos tres regios días a cierre de la ventana todos los años de nuestras vidas, hasta que nos vayamos muriendo de a uno. ¿Y cómo se van a morir pronto, por qué? Con esa clase de obligaciones. Acá dice, tu círculo de amigos juró a amistad eterna y, por ello, te sentiste herido cuando, cinco años después de graduarse, uno de ellos invitó a todos a su bado, a su bodo. Eso es peor. Excepto a vos. Lo dejó afuera feo, sí. Te encuentras con él en una reunión... y te sientes incómodo. En este caso, compórtate con altura y no menciones el hecho de que fuiste invitado a la boda. Directamente vas y le metes un piñaz. No, no, bueno. Señor, ¿qué tanta explicación? Es una situación un poco angustiosa. Bueno, pero el que se casa también tiene derecho a dejar afuera a aquellas personas que no... Para mí, si habéis lo que fue, la novia. la novia. Cuando un amigo se aleja de otro amigo, empieza a no saludarlo, a no visitarlo, a no llamarlo por teléfono, es que se casó con una a la que le cae grueso. Sí, sí. Ya le llena la cabeza. Es así. Le llena la cabeza y le dice no, mira. Ese no te conviene. Bueno, tal vez tu amigo, dice aquí. A ver. No quería comprometerte a comprar un pasaje aéreo. sabiendo que vivís muy lejos de lo que vivo al lado. Claro, vivo al lado. No me vengas con cosas que no son. Claro. ¿A dónde se casó el tipo? Algunos se casan lejos para eso. Lo que dicen, no, nos casamos en Mendoza. Sí. Bien. O quizá el resto del grupo mantuvo un contacto más cercano con el novio que vos. Cualquiera que sea el motivo. Ah, que es cualquiera que sea el motivo. No hagas un escándalo por eso. Cuando veas a tu amigo, felicítalo por tu boda y deseále lo mejor a él a su esposa. Está muy bien, me gusta el estilo. Por altura. Así son todos los casos. Quedó atrás el problema. Bueno, tenemos uno que tiene una estructura distinta, pero resultados parecidos. Estás en la caja rápida del supermercado y aparece una persona delante de ti con el carrito lleno. ¿A ver? Bueno, sí. El máximo dice 15... Unidades. ..15 unidades. Y el tipo tiene el carrito rebosante. Y pero... No, pero ahí le indica... ¿Qué hacéis? ¿Le decís? te acerqué y le dije ¿por qué no me invitaste a tu casa mía? No, no, este es otro, este es otro. Igual tendrían que decírselo los del supermercado. Hay que acusarlo ante las autoridades del supermercado. No, bueno, no, pero usted... O llamar a la policía y... ¿Por qué va a llamar así, señor? Usted le puede decir... Pero ¿qué problema hay? Con buenos modales nos vamos a entender. Por eso, ¿qué problema hay? Cuando un tipo me dice algo así, agarro... ¿Qué? Una botella de detergente y se la parto. No señor, porque usted le dice... Son cinco unidades, son 15 unidades las que tengo. No, pero usted sabe... La primera unidad, un pack de seis botellas de gaseosa. Bueno, sí, hasta ahí sí, porque es un pack. Segunda unidad, una bolsa de carne de 15 kilos para el asado. Pero lo peor es que, ¿sabe qué? Que van a hacer 15 unidades, lo que me estás diciendo. Porque tienen precios unitarios. Claro, bueno, por eso. Con eso estoy de acuerdo, pero usted tiene más. Claro, tiene mucho más. Tiene mucho más que eso. No trate de... No, tengo sí, tengo tres frascos de mermelada porque la oferta era 3x2, lo cual se considera una unidad. La oferta. Acá tiene un montón, por lo menos 20 distintos objetos. que no están dentro del PAC, ni de unidades colectivas. Nosotros, yo... Todo lo que me sobre... Vine a comprarme dos míseras bananas. ¿Son estas? No, señor, por favor. Tengo la cena vacía en casa. Trabajé todo el día. ¿De qué trabajo? Lo único abierto. ¿Pero qué le importa? No entiendo. Entonces, ¿para qué me lo dice? Ahí está. Bueno. No debe tener un gran trabajo. Si tú haces la casa para dos bananas. Es una porquería trabajo que tiene. No, señor, lo pasa. Llego cansado. Cansado. No tengo nada para cocinar. No quiero cocinar. Y dije, ¿qué está abierto a esta hora? Bueno, me vine aquí a Coroto. Hay muchas cosas abiertas, señor. Son las seis de la tarde. Está todo abierto. La peruquería, por ejemplo. No, pero yo lo necesito para comer y soy vegetariano. Yo no me pienso correr de la fila y, en todo caso, dejaré todo lo que sobre en la caja registradora. No, bueno, pero cómo vas a dejar una montaña de cosas ahí. Escúcheme, ¿y el señor que tiene en el carrito? ¿Qué es eso? Todavía nada. Bueno, pero ¿por qué hace la cola entonces? Porque voy a agarrar una vejita de afeitar cuando pase. No. ¡Comprale a Nunquiojo si son las 6 de la tarde! Está cerrado. Pídale al peluquero que está abierto. A ver si le da una... Bueno, a ver qué dice aquí. Dice... Habla con el encargado. Exactamente. No sé si hay encargado. Hay uno, pero igual no conviene decir... Disculpame. Pero se pelea usted con otro... Es la pelea de pobres contra pobres. No, pero qué pobres contra pobres. Claro. Disculpeme señor. Yo no es que no lo voy a agarrar a trompada de usted por más que insista. No, bueno, pero... No, esto mire, se lo digo con la mejor intención y la verdad de mil amores. De mil amores. Bueno. Pero usted está usurpando nuestro espacio, nuestros derechos. Tengo una solución. Porque vivimos en democracia. No te olvides de eso. Vivimos en democracia. No tengo ningún problema. Y esto es una república. Sí. ¿Ah, sí? Es una república. Así que la división de poderes establece que si no, ¿qué voy a ir al Poder Judicial a demandarlo a usted con leyes que ha hecho el Poder Legislativo para paliar en esta situación? Claro. La solución que yo le ofrezco, lo dejo pasar a usted adelante. No, no es esa la solución. No es que me diga. No es una cosa personal nuestra. No, lo dejo pasar. No quiero beneficiarme. Quiero que la ley se cumpla, señor. Quiero que se cumpla la ley. Así que voy a ir a la Corte Suprema. Sí. Y voy a llevar este caso allí. Acá dice, habla con el encargado. los compradores que se colocan en la caja rápida cuando no les corresponde, enfurecen a cualquiera, sí señor, en los Estados Unidos, 42% de los asesinatos que se comenten son por tiempo que se te meten adelante con muchas cosas en la caja rápida. Claro, y sobre todo tienen una escopeta que compraron en el supermercado. Por una parte, una de las 15 cosas es justamente una escopeta. pero otros podrían estar cometiendo un error sin intención alguna, no depende de vos confrontarlos, es responsabilidad del supermercado. Hay que ver quién es el dueño de esta cadena de supermercados. No lo conocemos, el dueño, qué vamos a conocer. El dueño de Croto. Lo que yo le digo es que los casos más difíciles... son cuando tiene, por ejemplo, 16 unidades. Claro. Y sí, porque evidentemente no se dio cuenta la persona. Y bueno, pero ¿qué hacemos? Ahí sacamos uno de todas estas cosas. ¿Cuál es la que menos le interesa? El paquete de hierba. ¿Le parece? Mira que por ahí esta noche usted quiere tomar unos mates. Bueno, tiene razón. La lata de arveja. ¿Le parece? Mira que por ahí esta noche se quiere hacer un guillo de arveja. ¿Con qué se lo hace? ¿Con porostro? Si no se lo puedo pasar yo, yo le puedo... con la lata de arvejas. Yo tengo la diferencia de pasárselo. Usted tendrá alguna gentileza. Yo le pago la lata de arvejas. Y esta... Y las pasas a mí. Entonces me la estás regalando. No, le pago cuando usted pasa, en vez de pagar las tres cosas. Por supuesto, pero como mínimo. Yo me compré unos higos. ¿Eso son higos? ¿Me entiende lo que le digo? ¿Quieres que le pase el higo con las bananas? ¿Por qué no me pasa estos higos? Sí. Pásenmelo con las bananas. Y yo le paso las zanahorias al señor. Bueno, sí, si no espera del otro lado de la línea de cajas... Claro, y usted me hace una... No se le ocurrirá huir, huir con los sigo. No, señor, por favor. Antes de eso creo que... no sé. Bueno... Me tiro bajo el tren. Dice... Vamos a otro caso. ¡Uy, esto es tremendo! Me olvidé el nombre... de un conocido y me lo encontré. Bueno, esto pasa. Pero se le puede hacer una laguna. No, sí, ahí está, laguna. Laguna, sí. ¿Qué dice laguna? Qué cosas tristes, es río, quién pudiera ser laguna. Señor. No, acá dice. Reconócelo con una sonrisa. No te mortifique si te olvidas el nombre de un conocido o compañero de trabajo. Claro, ves todos los días y te olvidaste el nombre. Yo creo que hay que seguir la conversación y tratar de ir evitando el nombre. Claro. A usted, por ejemplo, ¿cómo le dice su mujer a usted? Pichi. Dice, bueno, no, simplemente di, me olvidé tu nombre. No, depende de quien sea. Si hace 20 años que no lo ve, puede ser. ¿Por qué no es necesario decir el nombre? Usted puede mantener una conversación de una hora. Flaco, para eso está... ¿Qué haces, Flaco? ¿Cómo te va? Bueno, no, pero, Flaco, depende... Quizás fue jefe suyo. ¿Qué tal? ¿Cómo le va? Me encuentro con Dorio en la calle. Yo no estoy diciéndole... Hola, Dorio. ¿Cómo te va, Dorio? Dorio, ¿cómo andás? ¿Qué tal? Pero son cosas distintas. Si usted sabe... Ya ubicó a la persona, se acuerda el nombre, pero otra cosa es que no se acuerde de dónde. Claro, no se acuerda ni el nombre ni el apellido. No, ni de qué ámbito lo conoces. No, tampoco. Le suena a la cara. No, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, Y si es una dama, peor todavía. Sí, sí. Por eso una dama que anduvo con uno. Mirá lo que te digo. Sí, puede pasar. Sí, ¿cómo te va? Bueno, ahí un té le puede decir hermosa, que se yo, pero... y por ahí usted no se acuerda si es que anduvo con eso lo peor. Claro, o si a usted le gustaba... Y vos no te acordás si anduvo y resulta que por ahí es la mujer de un amigo que vos no la reconocías. Eso es terrible. Y vos te haces ser lindo y la mina es la mujer de tu jefe. Eso es la peor situación. Claro. Esa es la peor situación. Bueno, después confundir el nombre. O sea, si hay algo peor que olvidarse el nombre de alguien es llamarlo con el nombre equivocado. Sí, eso es peor. Oh, Dios mío. Ya sabía, Miguel. No, Tomás. Claro. No, pero no. El tipo te dice, no, me llamo Miguel, Tomás. Eso pasa mucho. Sí, sí. A mí no me pasa, pero otras personas sí. Sí, sí, pasa. Hay gente que tiene eso, ¿eh? Yo estoy pensando en alguien que lo hace todo el tiempo. Todo el tiempo. Bueno, vamos a un último. ¿Qué es? Redactaste un mensaje de correo electrónico, ofensivo sobre alguien, y después se lo mandaste a esa misma persona, de manera accidental. Eso tiene un anclaje psicológico. Sí, un psicoanalista tendría muchos pares. Muchas veces es el propio inconsciente. el que le hace mandar el mensaje al enemigo. Claro, eso pasa también, es parecido, y me parece que es más dramático, si te burlaste de un conocido o de alguien que justo estaba parado a tu lado sin que tú lo supieras. Claro, y lo escuchó. ¡Oh, eso es terrible! Debes ofrecerle una disculpa. No, pero ya no es... Quiero que sea buena. No digas, no he estado hablando en serio. No lo arregla más. No hay retorno de esa situación. Mira quién viene ahí, mira. Mira. Este es un... No, el asunto es este. Vamos a significarlo. A ver, cómo... Para que quede claro al oyente. ¿Cree que te digo una cosa? Sí, decime. Mamone me tiene podreído. Sí, sí, sí, sí. Hola, muchachos. Mamone, ¿qué tal? ¿Dónde estabas? Estaba acá, se ve que estabas hablando de mí. Estabas atrás en la cola. ¿Tenés algo para decirme? Eh... ¿Acerca del Estado? No, estaba hablando en serio. ¿Cómo? No sé, se te veía muy serio hablando de tu estado de putrefacción. Por un momento, olvidé tu nombre. No, eso de otro... Si quieres... te doy estos higos que acabo de comprar. ¿Pero para qué quieren los higos? Y bueno, estoy ensayando respuestas que ya servían para otros casos. No, no sirve ninguna de estas, por eso los casos perdidos. No, lo único, hay gente que reacciona de una manera que es insólita. Sí, estaba hablando mal de vos. ¿Y qué? Bueno, por eso. Bueno, pero está bien encarna la situación. Yo fui testigo de un episodio, si quieren se lo voy a contar. Sí, sí, qué problema. Yo trabajaba en teléfono. siendo muy jovencito y salíamos en parejas muchachos y recorriamos a veces arreglamos un teléfono a veces era un cable en el poste alguna cosa una vez que terminábamos de hacer cada arreglo por las casas andamos no nos llamaban teníamos una lista de lugares donde teníamos que ir una vez que terminamos cada trabajo reportábamos a la oficina que ya estaba el trabajo terminado. Muchas veces los inspectores recorrían las calles para ver si efectivamente los tipos estaban donde decían que estaban, si no los encontraban por ahí en un boliche jugando al billar, que eso, cosas así. En esos casos, cuando vos llamaban a los tipos de la oficina, te decías, guarda, Ah, dando vueltas por ahí. Mi compañero estaba arriba del poste y yo abajo. Y habló con la oficina. Sí, sí, ya terminamos acá, qué se yo. Ah, bueno, sí, sí, sí. Y de espaldas mientras bajaba. No. Dijo, cuidado, me dijeron que andan con una gran siete de fulá. Me acuerdo perfectamente, ¿no? que andaba por ahí alcahueteando. Terminé de bajar y estaba el tipo... Estaba a mi lado, yo no podía... No podía decirle, guarda que está... Claro, irremediable. Yo nunca me voy a olvidar la cara que puso el tipo cuando se dio vuelta y lo vio. No... El jefe, el inspector, el fulano... Estaba en el río con la sonrisa así. Claro. Y este estuvo bien porque puso una cara así. ¿Cómo? ¿Como? Se rió como el dios de Chauro. Por lo menos no estaban en un billar. No, estaban colaborando. Así que está bien. Y no pasó nada. Qué fantástico. Fue gracioso. Sí, sí. Bueno, discúlpeme por haber contado una intimidad. Este muchacho me dijo, por favor, no lo cuentes nunca. pasaron muchos años. Igual ni dijo los nombres. No dijo los nombres, pasaron muchos años. Y los recuerdo perfectamente. Claro. Bueno, ¿qué le parece si pasamos...? Hacemos una pausa. Hacemos una pausa, por favor. Y para finalizar, dos palabras bastan. Gracias. oficinanerd.com pasión por el podcast