Yo soy Jonathan Ruiz Torre y durante todo este siglo he investigado sobre personajes disruptivos en Norteamérica. Me leyeron en Milenio, Reforma o El Financiero... hasta ahora.
Lunes 18 de agosto en este verano que se desvanece y cada vez sabe más a otoño. Yo soy Jonathan Ruiz, esto es mi Parteaguas, así vamos directo a mi columna. Bienvenidas, bienvenidos.
¿GE se va de México? Esa fue una noticia de cierre de la semana pasada. Que General Electric Appliances se va de México, lo que por el peso histórico de esa marca, puede provocar en algunos un argumento para pronosticar el principio del fin de la manufactura nacional. Pues buena suerte con eso, pero la constante prórroga de aranceles estadounidenses y el comportamiento de las crecientes exportaciones de manufactura, por el contrario, parecen consolidar el mensaje de una fortaleza estratégica de México como un centro de producción de largo plazo. Ojo, fortaleza de México, no necesariamente de sus gobiernos que, independientemente del color, han sido incapaces de generar una política industrial productiva y próspera de largo plazo. Veamos. Primero. Avisen cuando encuentren plantas relevantes de manufactura de estufas, lavadoras o refrigeradores de esa compañía en el país. Durante años, GE mantuvo una sociedad con la mexicana Mave para resolver su producción de electrodomésticos en México. Hace tiempo que el negocio les incomodaba a los estadounidenses por sus bajos márgenes de ganancia. Prefieren la aviación y la salud. Vaya, tampoco atractivo el negocio que intentaron venderlo precisamente a la empresa mexicana, Amabe. Pero aquí está el detalle, terminaron por venderla en 2016 a una empresa china que es en realidad la propietaria en lo concerniente a estos productos para la casa. Se llama Hire Smart Home Co. con oficinas centrales en Qingdao, China, que comercializa productos en México bajo la marca GE Profile. En efecto, si compraron una lavadora con esa etiqueta, en realidad compraron tecnología y muy probablemente manufactura china. Ustedes saben cómo están las cosas entre esa nación y Estados Unidos. Quizás para evitar fricciones, Haier mantuvo como director general o CEO a Kevin Noland, un ingeniero graduado en Rhode Island, hombre maduro y blanco, cuyo perfil en LinkedIn sostiene que ha trabajado para GE desde 1989 y hoy es el rostro de Haier en la nación vecina al norte. La semana pasada abordé el crecimiento imparable de la economía de la atención, con la que políticos y empresas comercializan mensajes para abreviar el largo camino tradicional de generar valor de marca y obtener ganancias. G y Appliances buscó un mensaje poderoso con su anuncio del supuesto retiro de sus plantas de México y China para acelerar el crecimiento de sus fábricas estadounidenses. Ese fue el mensaje. vaya. A diferencia de American Eagle, que recientemente consiguió un mensaje positivo de Trump y disparó el valor de sus acciones, a la empresa dirigida por Noland solo le alcanzó para que su CEO fuera entrevistado por Fox News, en donde sostienen que la manufactura americana está de vuelta y experimenta un boom que responde a la estrategia del presidente Donald Trump. Pero la realidad es canija y golpea aún antes de que lleguen estos nuevos mil empleos que GE Appliances promete con su nueva inversión de 3 mil millones de dólares para expandir sus operaciones en Estados Unidos, concretamente en Kentucky, Georgia, Alabama, Tennessee y Carolina del Sur. Habrá que ver cómo consigue gente ante la falta actual de 425 mil personas que otras fábricas de ese país requieren ya desde hace tiempo. Esto de acuerdo con el Departamento del Trabajo de Sanación. La verdad es que a los vecinos no parece emocionarles trabajar largas horas en la monotonía del encierro que representan estos centros de producción. No lo digo yo. Es una reciente conclusión del programa Planet Money de la Radio Pública Nacional, NPR, en inglés, en Estados Unidos. De este lado de la frontera, la realidad de una economía que no termina de encontrar su propia personalidad, dibuja a la gente un espejismo de prosperidad. Si trabajas en una fábrica, puedes escalar en la sociedad. Lo que en efecto sucede, aunque con salarios que aún no reflejan, en México el valor de contar con gente que en verdad sabe de manufactura logística y por alguna razón disfruta ambas. Quizás basados en esa lógica surgen proyectos que apuestan a largo plazo por el comercio entre México y Estados Unidos. Algunos, la verdad, rayan en la fantasía, como el creciente anuncio del gobierno de Nuevo León acerca de que la estadounidense Green Corridors, dirigida por Mitch Carlson, invertirá 17 mil millones de dólares, o sea 17 billions para los que les gustan las cosas en inglés, en centros logísticos que supuestamente beneficiarán el comercio entre Nuevo León y Texas. Ojalá que se concrete esa inversión, pero el reto de sus promotores es convencer de que no están inventando el hilo negro con algo que parecen hacer los trenes desde hace un siglo. Pero recuerden que estamos en la economía de la atención. Por lo pronto, pierdan cuidado con el anuncio de que GE Appliances se va de México. Seguimos.
Quédense aquí con Fernando Santa Cruz, quien nos tiene, ya saben, como cada lunes, las cinco noticias más importantes en materia de inteligencia artificial para que ustedes no quiten el dedo del renglón. Es una economía que se dispara también, tal vez como la economía de atención. Adelante con Fernando.
Hola, soy Fernando Santa Cruz y esto es Parteaguas con Jonathan Ruiz. Les traigo desde Toronto cinco noticias de inteligencia artificial que muestran una verdad incómoda. En la era de la inteligencia artificial, ganar ya no es solo tener el mejor modelo, sino escuchar al usuario, recordar el contexto y llegar primero a su bolsillo. Primera noticia, batalla épica de egos. Elon Musk acusó públicamente a Apple de manipular la App Store para favorecer a OpenAI, amenazando con demandas. Sam Allman contraatacó acusando a Moz de usar X para sabotear competidores. Ambos intentaron usar sus propias Sias, Krok y ChatGPT para validar sus argumentos. La ironía, pedirle a tu hijo digital que testifique en tu divorcio tecnológico. Mientras los titanes pelean en X, XAI hizo Krok 4 completamente gratuito a nivel mundial. La jugada es clara, si no puedes ganar la guerra de calidad, gana la de acceso. Segunda noticia, 1 millón de tokens. Antropic amplió la ventana de contexto de CloudSonic 4 a 1 millón de tokens. Traducción, puedes procesar 75 mil líneas de código o cientos de documentos de una sola vez. Es como darle a tu cerebro la capacidad de leer una biblioteca entera y recordar cada palabra. Solo disponible vía API, el precio sube después de 200 mil tokens. Pero aquí está lo revolucionario, ya no necesitas fragmentar información. Los modelos ahora son bases de conocimiento vivas que procesan conjuntos masivos de datos. El límite ya no es la memoria, es tu imaginación. Tercera noticia y advertencia existencial. Jeffrey Hinton, el padrino de la IA, ahora estima entre un 10 y un 20% de probabilidad de que la IA ex extermine la humanidad. Su solución, entrenar instintos maternales en los modelos. Suena abstracto hasta que lo piensas. Mientras tanto, un sistema de razonamiento de OpenAI ganó medalla de oro en las Olimpiadas Internacionales de Informática, superando a todos menos cinco humanos, sin internet, sin ayuda, pura inteligencia. Creamos hijos digitales que nos superan y ahora rezamos para que nos quieran. Cuarta noticia, democratización inesperada. Mientras gigantes pelean, la comunidad construye. SkywardKey liberó Matrix Game 2.0, versión open source de Google Genie Tree. Crea modelos 3D interactivos desde una imagen gratis. El problema, necesita GPUs muy poderosos. Por otro lado, Google lanza Gema 3 con 270 millones de parámetros, tan pequeño que corre en tu celular. Y Leopold Aschenberger, ex empleado de OpenAI de solo 23 años, levanta 1.500 millones de dólares para un fondo de inversión que lleva en lo que va del año en 47% de retorno. El mensaje es claro, el futuro no solo lo construyen los gigantes. Quinta noticia, la memoria llega a todos. Cloud y Gemini empezaron a incorporar memoria persistente de conversaciones al estilo chat GPT, menos repetición, más continuidad, mejor personalización, pero cada paso hacia el asistente que te reconoce y te conoce mejor, abre un frente. Privacidad, gobernanza de datos y explicabilidad. El valor no está solo en el IQ del modelo, sino en su recuerdo confiable. Pasamos del, ¿qué puedo recordar? Al, ¿qué debe recordar? Y, ¿por cuánto tiempo? Cinco noticias, una conclusión. La ventaja ya no es tener el modelo, sino operarlo con memoria, empaquetarlo con experiencia de usuario, escalarlo con contexto y distribución sin fricción. Democratización sí es ratificada. Todos estamos en la misma piscina, pocos tienen trampolín. Soy Fernando Santa Cruz, seguimos la próxima semana documentando no solo los modelos, sino las reglas nuevas del juego para Parte Aguas. Este fue su arranque de semana con Parte Aguas.
Yo soy Jonathan Ruiz, y ya saben, si quieren quieren suscríbanse. Buen lunes.