Parteaguas

Conozcan a Regina garza, quien abrió puertas con sus habilidades en el tenis, adquirió el gusto de la robótica y terminó revolucionando una ciudad, su funcionamiento y a su gente más innovadora. 

What is Parteaguas?

Disrupción contada por mujeres y hombres súper aventureros que no temen dar giros en su vida para mejorar su entorno y hacer negocios que a veces salen bien. Tecnología de punta hablada simple y en español, desde México. Jonathan Ruiz, columnista y directivo de El Financiero y autor de Parteaguas, es el host.

Eres mujer, te encanta el tenis y empiezas a progresar. Te haces campeona en tu escuela, en la región o en tu estado y pues la gente te reconoce precisamente como campeona del tenis. Eso te abre puertas. No te resuelve la vida, pero te abre puertas. Luego notas que te interesan las computadoras y te vuelves ingeniera. Y después de que eres ingeniera, pues empiezas a entender cómo funciona el gobierno y pretendes cambiarlo y lo cambias y empiezas a establecer nuevos métodos en tu ciudad, en tu estado incluso, que organiza mejor a la gente de ahí. Ahora estás organizando a toda la gente justamente en el ánimo, en el ánimo de emprender, en el ánimo de tener proyectos disruptivos. ¿Cómo le haces? ¿Cómo pasas justamente de eso? De una mujer que en algún momento fue tenista y ahora pues golpeas la bola, pero de la innovación. Ella es Regina Garza, soy Jonathan Ruiz, esto es Parte Aguas. Bienvenidas, bienvenidos. Regina Garza, si ustedes están vinculados de alguna manera con la Universidad Anahuac, pues seguramente conocen su nombre. Si están vinculados también con algún proyecto de innovación tecnológica, me refiero a innovación digital particularmente, cualquier negocio, también es posible que conozcan su nombre. Actualmente ella es directora de un proyecto llamado Área 71, es un club de innovación en la ciudad de Mérida, Yucatán? Ella se los va a contar a partir de este momento. Bienvenida, Regina. Gracias, Jonathan. Buenas noches a todos. ¿Cómo eras de niña tú? Quiero que nos cuentes cómo se va trazando la vida de una personalidad que termina en un campo económico muy atípico, ¿no? O sea, estar buscando individuos que quieran cambiar la ciudad, que quieran cambiar los negocios. Pues eso no es que tú salgas del kinder queriendo hacer eso. Empecemos por el principio. ¿Cómo era tu vida cuando llegaban tus primeras memorias? Bueno, primero, yo soy la más chica de ocho hermanos. Entonces, yo creo que lo primero tiene que ver en eso. Que al ser la más chica, como decía la que yo sobreviví en mi casa, a mis papás muchos le decían, ahí se está subiendo una escalera, ahorita se cae y se vuelve a levantar. O sea, no era un tema de cuídala que no se vaya a caer. No, se cae y se levanta, no te preocupes. Mucho fue mi vida así. De la parte que me acuerdo de mi niñez, yo, mis papás son yugatecos y muy relacionados con industria salinera y en muchos tiempos vivieron en México, en Veracruz. Entonces, para mí me tocó nacer en la Ciudad de México y a los ocho años mi papá decide regresar a Mérida y yo pues se viene con los tres más chicos, ¿no? Cinco se quedan en la Ciudad de México y tres venimos a vivir acá. Entonces desde ese entonces eran dos mundos diferentes porque los cinco de México eran cinco universitarios que vivían solo y que ellos se tenían que organizar y nosotros tres pues al aprender a vivir en Mérida, en Yucatán y con diferentes reglas, ¿no? Los más chicos, mis papás ya más grandes, por decirlo así, y yo entro aquí a tercero primaria, literal. Perdón, dijiste algo que me sigue sonando en la cabeza, la industria salinera, o sea, tu familia se dedicaba a comerciar, se comercializa todavía la sal, ¿estoy en lo correcto? Sí, mi familia es... Mi abuelo, Joaquín Roche Martínez, es un fundador de Sal Sol. De Sal Sol. O sea, aquellos que conocen las Colorados o piensan en las Coloradas como un punto de destino turístico, pues están hablando de una zona turística, sí, pero principalmente industrial, Salinera de Yucatán, que pertenece a tu familia. Es correcto. Ya, ok. Y entonces, tú a los... regresas aquí a los ocho años, ves a tus hermanos universitarios lejos de ti, ¿a qué zona llegas? O sea, ¿en qué zona de la ciudad vivías? ¿Cómo era tu ambiente? En ese momento vivíamos en Progreso. Ah, mira, en el mar. Ok. Vivíamos en Progreso, no teníamos casa en Mérida porque nosotros normalmente veníamos los veranos como se dice a pasar temporada y esa temporada mi papá decidió que nos quedamos a vivir en Mérida yo estudiaba en México en el colegio Regina y aquí el similar es el colegio Mérida ¿no? y yo llego al colegio con mi uniforme del Regina que eso tiene que ver porque la gente se acuerda de mí por eso porque venía con un overall, no con una falda de tirantes, como se usa el uniforme en el colegio. Entonces me veían diferente, pues así llegué. ¿Con qué uniforme vas a ir? Pues con el de Regina. Oye, pero no hay relación entre tu nombre y el nombre del colegio. No, no, no. Eso fue circunstancial. Eso fue circunstancial y para mi mamá después de siete hermanos, todos con dos o tres nombres, cuando llegó el padre le preguntó ¿qué nombre le ponemos? Con uno es suficiente. Entonces, así fue, con uno es suficiente, que es Regina. Entonces, cuando llego yo acá, pues realmente la vida era, vivíamos en progreso, entonces veníamos tempranito a clases, y de clases era toda la tarde con actividades, porque regresábamos a progreso a dormir en la noche. Entonces, no era un tema de, voy a la clase de ballet y regreso, voy a la clase, no, no, no, no, entonces mi vida era venir a clase y jugar tenis, venir a clase a medida y mi vida era jugar tenis. Ok, entonces jugar tenis durante toda la tarde, o sea, eran tres, cuatro horas. Yo jugaba de tres a cuatro horas, empecé jugando clases particulares, luego con entrenador, con Patricio Espinosa, luego en el club campestre, o sea realmente si jugaba mucho tenis, no tengo una figura deportiva. Dos cosas no sabía de ti, me acabo de dar cuenta, una que eres paisana mía porque naciste en la Ciudad de México y otra que eras tenista, esa no me la sabía. Estamos hablando con Regina Garza, una emprendedora innovadora, reclutadora de talento de de innovación quien tiene un proyecto llamado Área 71. De ese club de innovación hablaremos más tarde. Hoy estamos hablando de Regina. Esto es Partaguas, yo soy Jonathan Ruiz, regresamos después del corte. Regina, estábamos platicando de que eras tenista por obligación y por no perder el tiempo, porque vivías en Progreso, pasabas las noches ahí, venías en las mañanas a la escuela y tenías que pasar la tarde haciendo algo, ¿correcto? Entonces, tú decidiste hacerlo con el tenis. ¿Qué tanto progresaste con el tenis? Pues mira, sí progresé un poco, fui en algunos torneos estatales fui campeona, torneos regionales igual, nacional no, pero esto te estoy diciendo muy chica, pero tiene una historia esto porque mi papá, mi papá se llamaba Pablo Garza Torre y mi papá era de los primeros impulsores del tenis en Yucatán, entonces de hecho la Copa Yucatán que va a ser pronto la próxima semana, antes inicia con otro nombre y la inicia mi papá. Mi papá entre todas estas cosas que estuvo en México, él estuvo trabajando mucho en la Federación Mexicana de Tenis. Entonces el tenis en mi casa era así parte del ADN, pues porque mi papá era muy tenista en su juventud, estudió en Tec de Monterrey, en su internado, todo alrededor del tenis. Entonces realmente el tenis lo traemos mucho en la sangre. Sí. Y además dicen que el deporte de raqueta abre en tu cerebro áreas que otras personas que no lo jugaron no las tienen abiertas, ¿no? Bueno, tú de eso debes saber más que yo, pues. Lo leí recientemente porque soy defensor ahora del pádel, ¿no? OK. Entonces me estoy buscando pretextos, pero bueno. En fin, ahora, ¿eras tú la única que practicaba el tenis dentro de tus hermanos, quiero decir? No. Los tres que vivíamos aquí en ese momento que te digo, los tres empezamos cada quien en su nivel a jugar tenis y lo teníamos muy arraigado. Y mi papá empezó... hoy existe una academia muy importante en Florida que se llama IMG, que estoy haciendo un comercial. ¿Cómo se llama? IMG. Pero no se llamaba IMG en ese entonces, era una escuela de tenis de Boca Ratón más chiquita pero el que era el entrenador de allá era muy amigo de mi papá entonces en alguna época decían cómo hacemos para que los tenistas de acá pues vayan probándose con otras raquetas, así decía mi papá entonces hicieron una, me acuerdo bien que hicieron una ida a Boca Ratón a jugar a un club que se llamaba Labors, ¿no? Y era el primer como campo de verano especializado en tenis que no se usaba lo de ahorita oímos tantos intercambios, tantas cosas, era como que vamos a hacer un grupo, sale el grupo. ¿A los 70's, los 60's? Habrá sido como 70's algo, casi 80's, ¿no? Sí, 81 específicamente. Ah, bueno, inicio de los 80's. Sí, y entonces nos fuimos un grupo grande del Club Campestre, donde estaba Patricia Espinosa también, y yo era la más chica del grupo, la verdad. Iban mis hermanos más grandes, pero yo no llegaba ni a la categoría de 10 años. Tú les debiste dar un montón de ternura a todos ellos, ¿no? Pues al que ganaba el premio era la más chiquita. Pero ahí empecé a jugar tenis, y voy a decir otra cosa, que empecé a relacionarme mucho. Porque tener a mis hermanos te genera una ventaja o sea, la ventaja es, eres la hermanita de... que para muchos es desventaja, pero para mí yo siento que fue una ventaja porque realmente los amigos del tenis de allá, de mi papá, de mis hermanos pues hoy en día son gente que me conoce, que me conoció de chica entonces eso facilita mucho las relaciones para varias cosas, ¿no? Sí, además de que el tenis se asocia también con gente que tiene acceso a muchas puertas, ¿no? A diferencia de otros deportes que son más populares, ¿no? Exacto. Yo creo que también eso, que me di cuenta también con los años, porque jugábamos mucho. Ya vi que el esquema cambió ahorita. Antes jugabas el estatal, del estatal te ibas al regional y en ese entonces el regional era el camión llenote y toda la gente llenote al torneo de reines pero era un torneo que yo ahorita lo puedo decir mucho se juega el torneo de la amistad por ejemplo del torneo también de los maristas que hay diferentes no que van en ese entonces lo hacían los clubs o lo hacía el deporte entonces iban en una excursión a Orizaba Veracruz que nos tocaba ir muchos en sus diferentes categorías, pero era un viaje padre hijo, o sea, y se ponía muy divertido, muy padre, porque independientemente que jugaras, ganaras o perdieras, pues había todo este entorno deportivo familiar, ¿no? Ahora es bien importante que lo menciones porque el deporte, sea cualquiera, cualquier deporte te ayuda a vencer muchos miedos, o sea, el hecho de entrar a una cancha de tenis si es correcto decirle cancha? si, si es correcto es que como a mi me gusta el baseball y le decimos de otra manera pero... y las canchas pues están rodeadas de tribuna hacia poca o mucha la gente que este ahí pues es gente que te esta viendo y tienes que vencer un monton de miedos y luego tienes que por principio vencerte a ti mismo si porque tienes que pensar que realmente lo puedes hacer y pensar que tu oponente tiene la misma sensación que tú entonces vences eso, ese miedo y eso cuando lo practicas pues te hace más fuerte la musculatura cerebral, perdón por la tontería que estoy diciendo pero por hacer una analogía y tienes también estas relaciones públicas que te ayudaron a conocer más gente y demás entonces ese es tu entorno, con eso creces y en algún momento empiezas a decidir qué vas a hacer de tu vida, vas a dedicarte al tenis o vas a dedicarte a otra cosa. Te llegó ese momento, qué pensabas en ese instante? Sí, me fui a estudiar un año fuera. ¿A dónde te fuiste? Me fui un año a San Juan, a Capistrano, California. No terminé. ¿Qué te fuiste a estudiar allá? fui a estudiar equivalente a primero de prepa la realidad es que no, no, me entraba mucho no había tanta forma de interactuar como hoy día, porque la verdad era la llamada por el teléfono, etc. El huracán Gilberto desconectó la península. Y el siguiente año me voy a un... mi abuelo, me acuerdo que era... mi abuelo era un gran patriarca, la verdad, y muy influyente entre toda la familia. La verdad, sí, era una persona que influía en las decisiones de todos. entonces me dice, no, pues te vas a estudiar un año a un internado, el primero me fue a una casa, el segundo me fue a un internado ¿Quién era tu abuelo? Joaquín Roche Martínez entonces me voy al internado y en ese inter de que me fui y regreso, cuando mi papá empieza a organizar la copa de tenis me dice, no te vas a quedar sin hacer nada entonces me vas a ayudar a hacer la organización. Y sí son cosas que te marcan, porque en ese momento que tenía yo, ¿qué quieres, Jonathan? No sé, 16, 17 años, ¿no? Y era el primer torneo mundial que se hacía acá. No se llamaba Copa Yucatán, pero era el primer torneo mundial. Y mi papá, es que hay que ver dónde se hospedan y cómo están, y hay que organizar esto, y hay que ver qué van a comer. Y no tenía la infraestructura que hoy se tiene para todas estas cosas que hacen hoy en día y pues yo tenía que, pues ahorita hablo con mis amigas, ahorita hablo con mis amigos, con los otros tenistas, con no sé qué y te ayudamos. Y éramos muchísimos que eran edecanes y eran boleros, ósea éramos la gente ayudando a que se realizara un torneo, que casualmente, te decía que hoy regresaba de Puerto Vallarta, me entró un poco esa nostalgia de que vea puros chavitos organizando el torneo de Puerto Vallarta de ahorita, de esta semana. Fuiste a ese torneo que es también de tenis? También de tenis, empezó ayer. Entonces te viste ahí, viste a estos chavitos este fin de semana y fueron unos chavitos que eran, bueno. O sea me proyecté. Eras tú. Eran puros chavitos del club ayudando a un señor que tenía la iniciativa que estaban trayendo el deporte a Puerto Vallarta que está entonces dices tú los entiendes porque tienes un mérito cosas que pueden estar no tan bien pero dices es un gran mérito el organizarte el convocar el buscar patrocinios o sea todas esas cosas las empecé a vivir yo desde muy chiquita, la verdad. Entonces cuando yo regreso de estudiar, pues yo regreso de estudiar y había cosas en mi colegio que yo decía, ¿por qué no las hace el colegio? Regresé a tercero de prepa y yo decía, ¿por qué no hay un anuario? ¿por qué no hay un periodiquito de noticias? O sea, hay ciertas cosas que aprendes ahí que no existían y yo dije, pues las voy a hacer. Y la verdad es que desde ahí empecé a construir Regina que soy hoy porque en ese entonces yo fui presidenta de la sociedad de alumnas de ese y entonces empezamos a implementar algunas cosas en tercero de prepa en el colegio. Entonces algunas cosas ya las traías de sangre que era lo inquieta, o sea nadie te podía detener, segundo el tema de una disciplina que te hace el deporte, tercero tu viaje que te abre los ojos a un mundo que no conocías y cuarto tus relaciones públicas, entonces eso te construye en el momento en el que tú empiezas a definir tu perfil ya como adulto, o sea, eras quien hacía que las cosas sucedieran. Sí, me gustaba organizar, me sigue gustando organizar cosas, la verdad, me gustaba organizar, aprendí toda esa, me acuerdo muchísimo de la primera copa Davis que se hizo en México que la organizó mi papá este, te digo que el tenis lo tengo, no íbamos a hablar de esto y mira que estamos al lado de este. O sea que tu papá, fíjate ya me removiste ahora a mí, te recuerdo, o sea tu papá estuvo involucrado en aquellos días de Leo Lavalle de... 100% Ah mira, sí, sí, sí. Yo porque obviamente si me oye mis hijas o mi hijo no tienen ni idea de quién es Leo Lavalle, pero pues después de Leo Lavalle la verdad es que no ha habido un tenista con el renombre internacional que él tuvo, más allá de que haya ganado o no. Entonces en esos días tu papá organizaba la Copa Davis. En esos días mi papá organizaba la Copa Davis, el presidente de la Federación Nacional era el primo de mi papá, entonces mi papá estaba como segundo a bordo, entonces ya estaba muy en... ya era parte de su trabajo, ya estaba involucrado, entonces por eso nos involucrábamos también nosotros como apoyo a mi papá y en esta historia cuando... entonces empecé a organizar muchas cosas y me gustaba, entonces cuando yo regreso al colegio y ya entonces tenía yo que decidir que voy a estudiar y pues me llamaba... sí me llamaba la atención un poco el futuro, o sea, de qué va a pasar, o sea, como que no quería yo hacer lo tradicional, ¿no? Y decía, no quería estudiar. Para mí lo tradicional era administración, que decía yo. No lo veía como que yo muy... no había tantas carreras como hay, con tantas especialidades como hay hoy, porque es la realidad. Y yo decía, ¿qué hago? Entonces me acuerdo que me hicieron el famoso examen psicométrico, tus habilidades y demás y era yo muy manual, o sea, me gustaba mucho trabajar con las manos, entonces sí pintaba poco, este, hacía cosas, manualidades y demás, me gustan las matemáticas, me gustaba lo manual y me gustaba esta parte de lo personal, entonces me acuerdo muy bien, este, la universidad estaba empezando, la ANAGUA, como ya he dicho, soy egresada allá y me acuerdo que el padre, algunos sabrán, el padre Salvador, me decía pues la verdad es que tu mundo es la robótica, pero te estoy hablando de la robótica hace treinta y tantos años y me decía pero no existe en México, entonces usted tiene que ir a Japón. Válgame, tenemos que ver con lo que pasó después, después del corte, porque tenemos a Regina Garza, quienes están oyendo, ustedes la cantidad de experiencias que ha tenido importantes e interesantes. Soy Jonathan Ruiz, esto es Parte Aguas, regresamos en un momento. Se acababa de decir el padre que de acuerdo con tus habilidades de matemáticas, de manualidad, de relaciones públicas, tú tenías que ir a robótica. No había robótica, no en la escuela, no había robótica en Yucatán. En el país. Ah, en el país. No, no había. ¿Qué pasó después? ¿Qué hiciste? Entonces lo que me dijo, pues lo único que te queda es por estudiar la licenciatura en informática. Ok. Entonces entro a la licenciatura en informática, en lo que para nosotros era la Mayab, que hoy es la Náhuatl, Náhuatl Merida, Náhuatl Mayab. Entonces entré a estudiar la licenciatura en informática. Ahora se llama ingeniería o tiene otro nombre, pero en ese entonces era una mezcla entre la administración y cierta parte de sistemas. Y lo que sí te puedo yo decir, que sigo recibiendo de eso es que lo que veías mucho es procesos, o sea tú veías mucho más el proceso de una empresa, el proceso de la automatización, el proceso y a mí me tocó que, lo voy a decir, estudiar Cobol y Pascal, que son lenguajes que hoy obviamente los jóvenes no deben saber, pero y luego enseñé Cobol, o sea, di clases de Cobol en la universidad. Yo tomé clases de kobol. Tú tomaste clases de kobol. Sí, también. Entonces, para mí el kobol te daba un pensamiento de lógica muy diferente que no te lo da ningún otro lenguaje, o sea, y años después decían, no hay que quitarlo, pero la verdad, la estructura mental que te daba el kobol es una estructura mental que sí la sigo teniendo yo creo no fue de las cosas que yo creo que va a marcar más y el final de mi carrera al final de mi carrera y había una materia que se llamaba auditoría de informática auditoría en informática ese era ese era la materia aunque suena como la materia más sexy que puede pues en ese momento habían dos libros sobre eso. ¿Qué consistía? ¿Revisar los esqueletos de una organización y hacer esa auditoría? Había que revisar lo que los sistemas estaban empezando a hacer. Pero estamos hablando, creo, de un momento que no había internet, que no habían tantos famosos RPs, ¿no? Entonces, las empresas que tenían sistemas grandes, pues eran las empresas grandes realmente no habían las micro no tenían unos sistemas que pudieras tener entonces como que tampoco el mercado para el sureste era muy amplio sin embargo una de las cosas que a mí me gustaba con todo esto me encantaba irme de compras ok entonces en ese momento mis papás pasaban por un momento económico no muy bueno y yo le dije a mi mamá que tengo que hacer para poderme irme de viaje a Miami? Pues juntar dinero, para que te puedas ir de viaje. Pues bueno, entonces, un tío que sigue, que hasta la fecha la verdad le tengo mucho aprecio, me dice, pues quiero entrar a trabajar las horas que yo pueda. Y que sabes hacer, sé inglés, y me gusta la parte de computación, pero estaba yo en primer semestre. Y empecé a trabajar en un despacho. ¿Qué día era? Más o menos, ¿qué año? ¿Recuerdas? Como en el 87, 88 más o menos. Ok. Entonces empecé a trabajar en este despacho, en el área de informática, y ahí empecé a entender qué era la auditoría en informática. Entonces era una mezcla entre el contador y el auditor. Y también ahí conocí a mi marido, que hoy es mi esposo. La realidad, él es contador, pero empecé yo a hacer estos procesos que eran procesos de revisión, en qué usabas el sistema, qué parte tecnológica tenías o qué no tenías, y me metí mucho al tema de la auditoría de informática. Realmente le dediqué muchos años de mi vida, fui presidenta de la Asociación Internacional de Auditores en Informática, que se llama ISACA, fui vicepresidenta internacional, hicimos el congreso nacional en el creo que 2020, no vaya no me acuerdo que año, este en 94 habrá sido, trajimos al evento en latinoamérica, o sea, estaba yo muy metida en el entorno, puse mi propio despacho junto con mi esposo, empezamos a hacer muchas auditorías de este tipo, y de ahí llegué a este tema del emprendimiento, de la innovación. La verdad es que no se hablaba del emprendimiento, no se hablaba de la innovación. Y cuando ya empezaba a hacer las auditorías, lo que sí te dabas cuenta es dónde las empresas tenían una oportunidad de mejorar sus procesos y de implementar tecnología, que estamos hablando de otra tecnología a la que hoy tenemos, pero era el momento en que yo podría revisar, ¿no? Y eso te hacía que tenías que estar muy actualizado legalmente, fiscalmente y tecnológicamente. Entonces, te ve un componente muy complicado. ¿Por qué? Pues porque el meter una tecnología es legalmente permitible, no permitible. o sea, ¿cuál es el sustento legal para hacer esto? Entonces había mucha interacción con la parte de los contadores también y pues ese mundo me sigue gustando, me fascina porque me gusta mucho y hizo que yo trabajara para el municipio de Mérida, para el gobierno del estado, primero como como externo, mi despacho, y luego yo creé el área de auditoría de sistemas del municipio de Mérida y creé el área de auditoría de sistemas del gobierno del estado. Debo hacer un paréntesis ahí porque uno, ahora mismo, estoy haciendo una analogía, estamos pensando en la adquisición de tecnología para ciertos procesos, el más visible es la inteligencia artificial en donde no hemos legislado nada, y habrá que legislar en algún momento, que si se vale, que no se vale, hasta dónde, cómo, no? Y tú en ese momento estabas con una tecnología que en ese momento era igualmente disruptiva, o sea, estabas eliminando papel y convirtiendo las cosas en una cosa que ahora ya es muy conocida, pero en esos días era lo digital, no? O sea, era... Además, en un estado que a decir verdad, si bien es cierto que no era el estado más poblado del país, siempre ha sido un estado que ha estado a la vanguardia en materia tecnológica en la atención de público. Aquí, yo lo recuerdo porque yo vengo desde muy pequeño a Yucatán de vacaciones y demás, yo recuerdo estos kioscos en los que tú podías sacar tu acta de nacimiento como si fueras al cajero automático, cuando en la Ciudad de México tenías que hacerte una fila de 200 personas en el centro de una oficina mugrosa para sacar tres actas que tenían que ir a buscar al libro y hacer... o sea, era una cosa verdaderamente de los cincuentas, cuando aquí eso ya se hacía digitalmente, perdón, pero tenía que decirlo, entonces en ese momento tú estabas ahí. Ese proyecto fue mío. Ah, mira. Ese proyecto lo hicimos de varios que hoy ya tú conoces, que yo ya te presenté, ok, pero ese proyecto lo hicimos porque, digamos que en ese momento yo era el policía de los de sistemas, yo dependía de la Contraloría del Estado, y los de sistemas estaban queriendo implementar todas estas, hacer el cajero y demás, entonces había ahí un poco de la disrupción. ¿Por qué? Porque, ¿cómo voy a auditar esto? ¿Me vas a volver a sacar una factura? ¿La voy a volver a imprimir? O sea, era el proceso, le digo, no, no vas a volver a imprimir nada, todo viene digital, pero donde está la evidencia de que pagaron entonces todo este tema que se vuelve disruptivo, también había que hacerlo legal y en esa parte de la legalidad era, me acuerdo muy bien porque el contrato me decía hoy si voy a ayudar a los de informática, no voy a ser policía, le dije es que no puede ser que no podamos automatizar esto, si tu me das el elemento legal para que lo puedas automatizar, yo te dejo que lo hagan los de sistemas. Y el elemento legal lo tuvimos que hacer. En ese entonces existía un cajero normal donde tú vas a sacar dinero. ¿Esa es una actividad de comercio? Sí. Pues esa también es una actividad de comercio. ¿Esto está sujeta a la ley de sociedad mercantil de la actividad de comercio? Sí. Ahí me tuve que meter a derecho informático. ¿Por qué? Porque teníamos que ver cómo sí se podían implementar sistemas y teníamos que ver la parte legal. Entonces eso me dio mucho de ese background. Regina, eres bien nerd. Eso yo no lo sabía. Pensabas que era social nada más. No, era así, era yo. Pero me sigue gustando aprender. Qué padre. esa parte pues era un tema de decir yo creo que más bien dime que no puedo hacerlo porque lo haga si si claro no, era un tema de decir no lo puedes hacer y le digo si si lo voy a hacer es que alguien tiene que hacerlo y yo tengo mucho respeto por quienes hacen eso que es lo más complicado en realidad porque no es atractivo no es no es un una actividad que la gente busque hacer y alguien la debe hacer porque si no no nos organizamos y tú eres esa persona que se mete a las telarañas, encuentras el orden de las telarañas y las hilas para que todo tenga una conexión correcta. Ya viste por qué digo que soy una araña tejedora. Es cierto, tú dices que eres una araña tejedora. Ya te había dicho que soy una araña. Pues eso hacía, realmente lo que a mí me pasó es que la informática y la auditoría te daba una visión del negocio de todas las áreas, entonces habría que conectarlas tecnológicamente con el recurso que había en ese momento. Y entrando ya a la parte, voy a decir, de innovación, que hoy le llamamos innovación, pero en ese momento no le llamábamos innovación, en ese momento llamábamos gobierno electrónico, le llamábamos implementar tecnología en los... o sea, no había un tema de decir vamos a crear nuevos negocios o vamos a innovar en los negocios y vamos a hacer nuevos empaques y no, ese terminal no existía. Y ahí es cuando a mí me invitan a formar parte de la universidad, este, en ese momento para decir oye, ¿qué podemos hacer desde la universidad y un poco lo que pasaba en ese momento era que el crecimiento del estado era mucho por franquicias, o sea lo que pasaba aquí es que los empresarios era pues hoy traigo no sé, Burger King, McDonald's, o sea pura franquicia y era como lo que estaba en ese boom, no? y decías bueno quién crea innovación, quién crea... Sí, porque no es innovación traerte una franquicia, es un acto de comercio pero replica, es un modelo que alguien innovó, correcto pero innovar es realmente traer al mundo algo que no existía y que paguen por él y que paguen, sí claro porque una cosa es que lo crees y otra cosa es que haya alguien interesado en retribuirte darte es que bueno que lo tocas porque esto ya lo han dicho otros individuos inclusive el mismo Elon Musk, el dinero no es más que una base de datos o sea en su dimensión más pura es eso, es una base de datos en la cual cada quien saca de su base de datos para darle a alguien que le entrega valor, o sea, si yo estoy dispuesto a darte algo en mi base de datos a ti, es porque yo siento que lo que tú me vas a dar genera valor en mí, y es por eso que saco de lo mío para dártelo a ti y que tú lo uses y luego tú hagas otra cosa con ese, pero qué interesante que lo digas, sí, perdón, y luego? y entonces empezamos a en ese momento que estaba yo terminando de colaborar con el gobierno del estado me invitan a la universidad porque hubo un punto que para mi fue un, hoy si como dices tu, un par de aguas que fue un proceso de planeación con el gobierno del estado, con la Nelbid, con la OCDE donde realmente el punto medular fue que había que innovar, que el Estado necesitaba invertirle a lo que era la, vamos a decir, economía del conocimiento y toda la parte. Y viene cabe gobierno, me invitan a participar en la universidad y yo le decía, pero yo no puedo ser, por ejemplo, directora de una escuela. Le digo, pues sí, voy a innovar, o sea, voy a disrumpir con todo. Y se creó un área que en su momento se llamó Único, que era la unidad de innovación y competitividad. Y la verdad es que el retorno en ese momento, pues sí, muy disruptivo, pensando cómo podemos cambiar muchas cosas. Una de las cosas que yo creo que seguimos todos haciendo que nos falta mucho por aprender es la famosa vinculación entre la academia, empresa y realmente esta triple hélice que se habla, pero es muy difícil aterrizar. Y la verdad es que mis amigos de otros países llegaron y me dijeron, cómprenos un boleto de avión y vamos a decirte qué hacemos por Yucatán. Vinieron tres, les compramos un boleto de avión. Lo que hicieron por Yucatán me lo tienes que contar después del corte. Porque eso nos va a llevar a la fase final de este programa, que es justamente eso, cuando Yucatán da un salto a ámbito internacional en este esquema de innovación. Regresamos, esto es Parte Aguas, yo soy Jonathan Ruiz, no tardamos. Regina, estábamos con que trabajando para el gobierno, trajiste talento del exterior para que le dieran una refrescada a las ideas de tu equipo de trabajo. ¿Qué pasó? Porque eso es lo que nos va a llevar a donde estás ya, en este punto. Sí, cuando estos tres amigos, que son tres amigos míos todavía, ellos son lo que en su momento seguramente conocías como la fuga de los cerebros, o sea, que eran científicos que por equis se fueron a estudiar al extranjero. Que eran mexicanos. Son mexicanos viviendo en el extranjero, ellos crean una red en especial para apoyar ahora los proyectos, vamos a decir, mexicanos. Entonces yo les hablo y les digo, oigan, pues quiero hacer esto, ahora estoy dentro de una universidad, ¿cómo impulsamos la innovación? Me dicen, ahí fue cuando me dicen, páganos nuestro boleto de avión y vemos. Entonces la verdad es que cuando ellos llegan, hicimos un paseo por la ciudad, fuimos a ver muchas cosas que estaban. En ese momento estaba el famoso City, que hoy es donde está el siglo XXI, en lo que es la AFI, que fue el primer clúster de tecnología que se habían hecho con muchos de las empresas de software, que ya empezaban a impulsar el tema de esa parte de la industria, ¿no? Hicieron un recorrido por hoteles y etcétera, ¿no? Entonces llegan y dicen, bueno, pues tenemos una buena y una mala. Me dice ok, pues dime primero la mala. Pues la mala es que no hay nada. Me dice no hay innovación per se, no hay patentes, no hay investigación y desarrollo, no hay nada para que tú realmente puedas hacer lo que yo quería hacer era una transferencia de tecnología. Empezar a hablar del mundo de las patentes y crear negocios alrededor de eso, que es lo que hoy se escucha un poco más, me dice, pues no hay nada. Y la buena es que puedes hacer lo que quieras. Entonces, pues de ahí me agarré. Entonces empezamos a hacer muchas cosas que me dieron mucho permiso y confiaron en mí, la verdad, en la universidad, para empezar a crear muchas cosas. Y empezamos a mapear lo que existía también en el estado y también había una política pública que ayudaba porque la política pública también ya estaba metida en el tema de impulsar la innovación y eso también ayudó. En qué años estamos hablando, qué gobierno estábamos hablando? En el gobierno de Fox más o menos. Ok, de Vicente Fox. Era el gobierno de Vicente Fox, entonces y luego fue con Calderón y luego hasta con Peña Nieto, entonces en estos realmente esa parte de hay que impulsar las empresas a que innoven pues la gente también tenía que entender que significa innovar. Sí me acuerdo que eran incubadoras, era lo que se oía mucho en esos días. Empezaron a hablar de incubadoras y antes de eso se empezó a hablar de círculos de calidad pero los círculos de calidad es mejorar un proceso actual, pero no es ser disrupción, vamos a decirlo así. Entonces había unas confusiones entre si la reingeniería y la innovación, yo digo, son como que tíos, pero no llegan a ser ni hermanos, ¿no? Entonces, ahí empezamos a ver qué necesitábamos para impulsar el tema y nos dimos cuenta que había que formar mucho a las personas, o sea, había que enseñarles sobre propiedad intelectual, había que enseñarles sobre... yo voy más hacia la innovación, luego me llevo al emprendimiento, pero realmente mi tema principal es la innovación, no el emprendimiento. Entonces empezamos a ver en estos temas y nos dimos cuenta que la gente no sabía muchas cosas, entonces empezamos a crear programas para que la gente viera, y la verdad creo que de las partes más padres de todos que hicimos una un grupo al que le llamamos núcleos de innovación eran 15 empresarios que estén que querían y confiaban en nosotros porque no era un modelo que existiera que dijeras ya lo replicó entonces vengo no era el querer aprender para ver si podían ellos innovar en ellos mismos y en sus negocios. Y entre esos ejercicios nos llevamos a a Boston, estuvimos en Harvard, en MIT, viendo cómo funcionaba el ecosistema, hicimos muchas actividades de estas y el reto fue, se les dieron 9 herramientas diferentes de cómo transformar sus negocios de un porcentaje a X's. Uno de ellos es Farik Ezetina, que lo conoces perfecto, de National Soft. Farik Ezetina es una personalidad en Yucatán. Él construyó en National Soft, pero construyó el restaurant, el soft restaurant que a la postre terminó vendiéndola, entiendo que bien vendida, ¿no? El dato no lo sabe nadie, pero más que él, claro. Claro, pero es, pero ¿por qué lo menciono? Porque una de las cosas que yo la verdad le veo en él, que apostó a tratar de impulsar, eso es que nosotros estamos acostumbrados a ver a los negocios como familiares. Se los voy a dejar a mis hijos. Y ahí lo que pasó en National Soft es que vieron la posibilidad de vender el negocio y volver a hacer otro, pero no pensaron que el negocio lo van a dar sus hijos, por ejemplo, ¿no? Que esa es la parte tradicional que nosotros venimos acarreando por nuestras familias, ¿no? Es decir, ¿cómo voy a hacer un negocio y luego voy a pensar en que lo voy a vender o será completamente disruptivo pensar que va a llegar un momento que quieres que te compre otro. Y hoy ese es el deporte favorito de Silicon Valley pues. Tú lo acabas de decir, de Silicon Valley, por qué no de Mérida, ya ahí es donde voy a llegar, por qué no pasa acá, por qué no pasa en Yucatán, o sea, por qué no y por donde va empezando a pasar empieza en Guadalajara, empieza en Monterrey y ahí es donde llego al proyecto de Ares 71 porque con lo que yo ya viví con lo que ya se formó, hay muchas cosas que las semillas ya se crearon la universidad ya tiene un buen programa de emprendimiento, algunas instituciones, otras educativas igual o sea, la semilla está puesta pero yo creo que ahorita el tema es, nos tenemos que ver si realmente queremos entrar en esta, vamos a decir, el conocimiento y hacer que las empresas crezcan de diferente forma y pensar que la creación de negocios es diferente. Y además ahora, yo creo que la diferencia de cómo pasó hace 16 años, que estuve 14 años yo en la universidad, es que ahorita tienes dos, voy a decir tres cosas diferentes. Una, no tienes la cantidad de subsidios que tenías antes, que eso te ayudaba en la política pública para hacer, porque tenías, como yo digo, siempre tenías la cereza del pastel o la, algo que eso ayudaba al empresario a meterse, oye, pues voy a probar, no voy a decir que esté bien o esté mal, simplemente había un incentivo. Hoy no hay tanto ese incentivo, creo que pueden haber otros incentivos, y también había un tema de que la gente en ese momento todos aprendieron, aprendieron de transferencia de tecnología, aprendieron de emprendimiento, aprendieron de innovación, aprendieron de otros métodos de hacer negocio, y vino todo el tema ahora de inteligencia artificial. Exacto. Entonces, eso nos va a cambiar el mundo otra vez. Sí, definitivamente, de hecho, si es comercial, en mi columna Partida de Aguas de Mañana hablo de cómo Walmart explica que está haciendo procedimientos que hubiera necesitado cien veces el personal que tiene hoy de tecnologías de la información para acelerar los procesos de modificación de catálogo para dar con lo que los clientes quieren y esto duplicó su margen en cuestión de dos años es decir del 3-4 por ciento que es muy bajo lo duplicó al 6-7 por ciento que eso para Walmart es un montón de dinero porque vende muchísimo entonces no totalmente de acuerdo que es área 71 para aquellos que lo perciben como algo abstracto, ¿cómo lo defines? Yo lo defino como un punto de encuentro. Para mí es un club de innovación, porque lo quiero poner como es ciertas personas que tienen el interés de conectar con otras. Entonces es como pasa en cualquier otro club. Voy allá y pago una membresía porque me quiero conectar con otras personas por el deporte, por la parte social. pues es el conocimiento que al final es la innovación. Entonces, Área 71 es el punto de encuentro de empresas principalmente de base tecnológica que tengan un componente tecnológico, ya sea en lo digital, en la parte de software, vamos a llamarle en la energía renovable. O sea, ya la innovación es muy transversal. Antes veíamos la innovación exclusivamente en software. Hoy no, la innovación es completamente transversal. Entonces, lo que estamos buscando es que se vuelva el punto de encuentro y que realmente ahí como sociedad nos podamos unir para poder hacer las relaciones que necesitemos con otras universidades, con otros institutos y crear en el futuro nuestro Silicon Valley. O sea, se habla mucho de la parte logística de conectarse con progreso, conectarse con Miami, con Centroamérica, por geográficamente como estamos, pero no hay un lugar de punto de encuentro imparcial que puedas trabajar con todos y eso para mí es Área 71. Hay una empresa dedicada a los parques industriales muy importante en México que se llama FINSA, ellos trabajan en todo el país y me llamó la atención ver hoy un reporte, un índice de avance industrial en el cual hay un solo estado de la Ciudad de México para abajo, es decir, en el país, pues todos conocemos el mapa, solo un estado está entre los países que son realmente posibles receptores de inversiones near shoring, y ese estado es Yucatán. Entonces, vaya, hay una lógica detrás de perseguir la innovación como una ruta de ingresos para este estado. ¿Cómo definirías tú el éxito de esta intención que tú tienes y cómo te ves en cinco años, Regina? En cinco años espero con mucho más, con una red mucho más grande que se pueda conectar. Y veo que tenemos que colaborar mucho mejor, siendo menos, voy a decir, individualistas, pensando más por un beneficio como comunidad, que se habla mucho de las comunidades, pero a la hora que se aterrizan es un poco difícil. Y eso es lo que yo espero que podamos lograr en el futuro y que todos entiendan que todos pueden ganar sabiendo cuál es la parte de su valor de cada uno de ellos y cómo los conectamos. Muy bien, Regina. Oye, tienes que decirme cuál es tu canción favorita, perdón, es tradición de este programa escuchar de nuestros invitados. ¿Qué canción podrían oír 100 veces en una isla desierta si no hubiera nada más? Yo creo que una de Vaselina. ¿Cuál? ¿Cuál te gusta? ¿La de Big Balls of Fire? ¿Cómo se llama de Vaselina? Tengo un poco de asesoría aquí en la cabina, perdón. Pero seguramente habrá por ahí... Esa. We go together, esa, esa. Ok. Regina, gracias. ¡Suscríbete!